One Piece Gaiden - Foro Rol One Piece
[Autonarrada] Pros y Contras de dejar el Alcohol [T2] - Versión para impresión

+- One Piece Gaiden - Foro Rol One Piece (https://onepiecegaiden.com)
+-- Foro: El mundo (https://onepiecegaiden.com/forumdisplay.php?fid=10)
+--- Foro: East Blue (https://onepiecegaiden.com/forumdisplay.php?fid=16)
+---- Foro: Reino de Oykot (https://onepiecegaiden.com/forumdisplay.php?fid=51)
+---- Tema: [Autonarrada] Pros y Contras de dejar el Alcohol [T2] (/showthread.php?tid=1622)



Pros y Contras de dejar el Alcohol [T2] - Tofun - 31-10-2024

28 de Verano del año 724
Oykot


La brisa marina acariciaba mi rostro mientras me sentaba en el borde del muelle, las olas rompían suavemente contra los pilares de madera, como si el océano mismo intentara despertarme de mi letargo. Miraba al horizonte, donde el sol empezaba a asomarse tímidamente, tiñendo el cielo de tonos naranja y rosa, un espectáculo que debería haberme llenado de inspiración y energía. Sin embargo, en lugar de eso, solo sentía el peso de una resaca monumental, una especie de tsunami de malestar que arrastraba mi cuerpo hacia el abismo del olvido.

Habían pasado 48 horas desde que celebramos la victoria en Oykot, y no tengo duda de que los dioses del licor sonrieron sobre mí. Fiestas, risas, brindis y el inconfundible sabor de “El Ascensor” me acompañaron en cada uno de esos momentos, llevándome a un estado de euforia que, para ser sincero, era difícil de resistir. Pero ahora, mientras observaba cómo el sol se alzaba sobre el puerto, me di cuenta de que la fiesta había terminado, y era hora de enfrentar la cruda realidad. Mi estómago se retorcía, mi cabeza pulsaba como si un tambor estuviera ensayando dentro de ella, y lo más inquietante de todo: mi mente empezaba a cuestionar la razón de mis excesos.

Con un suspiro, saqué un trozo de papel del bolsillo, y comencé a escribir una lista. Sí, una lista. “Los pros y los contras de dejar el alcohol”. Quizás lo que necesitaba era un poco de claridad en medio de este caos interno. Así que, aquí vamos.

Pros de Dejar el Alcohol:
  1. Mejora de la Salud: No más resacas que me hacen sentir como si hubiera sido golpeado por un tren de mercancías. ¡Finalmente podré recordar el nombre de mis amigos, o al menos intentar recordar qué eran esos seres extraños que me rodeaban en la fiesta!
  2. Claridad Mental: Sin el velo del alcohol, podría pensar con más claridad. ¡Adiós a las profundas reflexiones de las 3 a.m. sobre si los gatos dominan el mundo o no! Tal vez hasta podría recordar que hay más cosas en la vida que no son cerveza y karaoke.
  3. Menos Miedo a la Deshidratación: Ya no tendré que preocuparme de que la única cosa que ingiero sea el alcohol, seguido de un vaso de agua que me parece más un mito que una realidad. ¡Adiós, deshidratación y hola, agua que realmente se toma! Esto era una mentira como una catedral.
  4. Dinero para Otros Placeres: En lugar de gastar mi oro en ron, podría comprar cosas más útiles, como un sombrero nuevo que no se me caiga cada vez que me agacho o, mejor aún, ¡un mapa que me muestre dónde están las mejores fiestas! ¡No! Fiestas no...
  5. Menos Dudas de Identidad: ¿Quién necesita alcohol para hacer amigos? Puedo ser el tipo divertido sin una copa en la mano. O eso espero. Aunque, si el alcohol es mi mejor amigo, tal vez necesite un nuevo grupo de amigos.
Contras de Dejar el Alcohol:
  1. Adiós a las Bizarreadas: Sin el alcohol, no habrá más locuras como bailar sobre las mesas (o taburetes) o intentar convencer a un pez de que es un delfín. ¡Esas historias son lo que mantienen la vida interesante!
  2. Presión Social: Mis amigos podrían mirarme con esas expresiones de “¿Qué te pasa, Tofun? ¿Te has convertido en un monje?” y dejar de invitarme a las fiestas. Como si dejar el alcohol fuera lo mismo que dejar de ser divertido. ¡No puedo ser el único que se divierte en estas aventuras!
  3. La Rutina Aburrida: Sin el encanto del vino y la cerveza, mis días podrían volverse tan emocionantes como ver pintura secarse. ¡Tal vez debería considerar un nuevo pasatiempo como coleccionar rocas! O incluso más emocionante: ¡clasificar las tapas de botellas! Si... Ese me gusta.
  4. Efecto Social de “La Avispa”: La gente podría pensar que soy un aguafiestas. En fiestas, ya no seré el alma del evento, sino el tipo que se sienta en una esquina, mirando a la multitud como un anciano que acaba de salir de una reunión de la tercera edad.
  5. Tentaciones por Doquier: Siempre habrá un bar con amigos que insisten en que “solo una copa más” no hará daño. Es como intentar resistirse a una galleta de chocolate cuando ya has decidido que estás a dieta. 
Mientras analizaba la lista, un debate moral se formó en mi mente, como una batalla entre la razón y el instinto. En un rincón estaba el Tofun maduro, que anhelaba la salud y la claridad. En el otro estaba el Tofun borracho, quien quería seguir bailando con las musas del licor.

¿Qué tal si encuentras un equilibrio? — murmuré, hablando conmigo mismo. — Podrías intentar reducir, no necesariamente eliminar.

La idea resonó en mi mente, como un eco distante. Quizás no necesitaba dejar el alcohol de golpe. Podría intentar controlarlo, hacerlo una parte de mi vida sin que me consumiera. Pero entonces, me pregunté si podría confiar en mi voluntad. La tentación siempre estaba al acecho, como un depredador acechando a su presa.

Mientras seguía mirando al horizonte, el sol ahora brillaba con fuerza, iluminando las aguas del puerto. Era un nuevo día, una nueva oportunidad para renacer. Recordé todas las veces que me había sentido increíblemente bien después de una fiesta, pero también todas las veces que había deseado no haberme pasado de copas.

Finalmente, después de mucho deliberar, decidí que merecía la pena intentarlo. No necesitaba ser un santo, pero tal vez podría ser un mejor amigo, un mejor luchador, un mejor Tofun. Así que, con una sonrisa decidida, rasguñé la última línea en la lista y escribí: “¡Un nuevo comienzo, sin excesos!”

No sabía si lograría mantener esa promesa, pero al menos había dado el primer paso. Para comenzar iba a pasarme un par de días sin beber y... luego vamos viendo. Mientras el viento soplaba y el sol brillaba, me sentí un poco más ligero. Quizás esta sería la última vez que miraría hacia atrás en busca de consuelo en el fondo de una botella. Tal vez, solo tal vez, podría enfrentar la vida con un nuevo enfoque. El puerto de Oykot se extendía ante mí, lleno de posibilidades y nuevas aventuras, y estaba listo para navegar en esas aguas, con el viento a favor y una determinación renovada.