35 Verano

Luego de un extenso viaje por el East Blue por fin llegaba a su destino, antes de despedirse de su fiel y amigo transportista, advirtió que lo dejase cerca de algún bar, claro, era la mejor manera de darse la bienvenida. No eran muchas las veces que había pasado por aquella Isla, por lo que no había mejor manera de conocerla que recorriendo sus bares, además tantas horas de viaje traían una sed inconmensurable, por lo que su primer paseo sería destinado al Trago del Marinero.

 Con la calma misma de la mañana Illyasbabel recorría la zona Porturaría buscando aprovisionarse de bolsas de tabaco. No demoró demasiado en conseguirlo, aquel lugar estaba en constante movimiento, y las tiendas y puesteros aparentemente disponían gran cantidad  de productos, aunque la Marine tuviera una fuerte presencia en la Isla, esta misma parecía ocultar una cara oscura, o debería decir, la contracara de la moneda. No había que ser un genio para percatarse de los turbios negocios que por allí rondaban, algunos piratas malhumorados y civiles comunes y corrientes. No estaba de humor para armar alborotos innecesarios ya qué aun no sabía el motivo de su presencia en esa isla, mantener un perfil bajo era lo indicado.

 Luego de atravesar varias calles, inmiscuyéndose en las multitudes portuarias, encontró lo que buscaba, una gran cantina reconocida en la zona por tener varios tragos a disposición de la clientela, aunque lo suyo era la cerveza y el sake, era importante la buena fama del mismo para asegurarse de un buen licor. El crujir de la puerta anuncio su llegada, y algunas miradas curiosas se atrevieron a observarlo con cierto desagrado, pero no duró demasiado, no habían muchas personas y los pocos que habían tenían mejores cosas que hacer: Seguir bebiendo. Continuó a paso ligero hasta alcanzar la barra del bar y una vez allí pidió varias muestras de cerveza para degustarlas, de esta manera sabría cual sería la mejor selección, ya que tenían pensado no solo beber sino que también llevarse un barril consigo.