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Artilugios Personales - Muzen Kibutsuji - 29-07-2024 2 de verano del 724 Era ya casi el ocaso y Muzen no lograba descansar tranquilamente desde que había llegado a la isla tenía en mente hacer una visita ya que había dejado algunas de sus cosas en la isla para una persona que le aseguro que usaría aquellas de una manera productiva por lo tanto, quería poder verle antes de que seguramente la tripulación hiciera un desastre en la isla, eran un grupo bastante variopinto lo que aseguraba problemas en cada vuelta de la esquina, decidido entonces se puso de pie en ese momento y se terminó de arreglar su ropa azul oscura y unos googlees en los ojos para ocultar sus ojos color cielo, luego de acomodarlos de manera correcta se encamino a la salida de la taberna asegurándose de que sus compañeros no le pudieran ver sería algo incomodo tener que decirles que iba hacia la gran ciudad para meterse en problemas, sonrió levemente para luego de estar en la calle incluso evito hablar con el viejo Jhons este conocía algo de la historia que el había vivido pero no estaba muy de acuerdo con la decisión que había tomado el albino por lo tanto decidido abandonar el lugar sin hacer demasiado ruido. Saco de su bolsillo un cigarrillo para luego encenderlo mientras caminaba por aquel pequeño pueblo, que cada vez parecía tener más habitantes algo que siempre despertaba la curiosidad de Muzen. Finalmente, con pasos tranquilos y su cigarrillo entre los dedos estaba todo bastante tranquilo, se encaminaría por el basurero para llegar hasta la ciudad siempre había sido hasta el momento su recorrido más sencillo, donde menos preguntas tenía que responder, aunque más moneda tenía que dejar, siempre valía la pena si se buscaba moverse con el sigilo necesario para que nadie supiera que había entrado, principalmente el padre de la fémina que estaba por visitar. Pasaron las horas y sin demasiada complicación Muzen pudo entrar al reino de Goa ya caída la noche aprovechando algunos caminos entre la basura donde poco o nada de gente habitaba era bastante terrible el olor que desprendía y desechos que eran dejados por parte de las industrias solo se detuvo un par de veces para ver cómo estaba todo cada día más peor, a los nobles y ricos no les importaba lo que pasara con su isla y los alrededores siempre que tuvieran lo necesario para poder volverse más rico y aumentar su influencia. Dentro del reino aún tenía que moverse con cierto cuidado sabia a donde tenía que ir una zona de la ciudad bastante alta, si bien la joven no era de las más ricas sus padres estaban relacionados con una de las fábricas de la ciudad por lo tanto era dinero lo que más tenían. Arrojo el cigarrillo antes de acercarse lo suficiente para darse cuenta que no estaba solo, la guardia de la casa era más de lo que recordaba hizo que levantara la ceja ya que no esperaba tantas personas custodiando la casa, como si hubiera pasado algo hacia algún tiempo y estuvieran ahora pendientes del lugar. Para Muzen fue más divertido por qué negarlo uso sus habilidades para poder saltar y trepar uno de los muros usando su agilidad y talento aeróbico con el cual lograría quedarse en el segundo piso de la casa, aunque tenía que subir un piso más usando parkour y una de las paredes pudo subirse al tercer nivel llegando al cuarto donde se debería encontrar la joven que tenía sus cosas, el primer obstáculo que Muzen encontraría era el hecho de que sus ventanas estaban cerradas con vigas de metal evitando que se pudiera entrar como si se tratara de una especie de prisión, sin entender realmente lo que estaba pasando se encamino por el mismo tejado hasta encontrar otra habitación el lugar estaba totalmente silenciado como si no hubiera nadie, seria así si no fuera porque él fue capaz de escuchar los pasos de un hombre con armadura en el exterior de la sala donde se encontraba. No dudo en moverse con total sigilo por la habitación ya que había entrado en una especie de cuarto donde tenían guardadas los cambios de cama de ese piso, Muzen había logrado pasear por esa casa en el pasado más o menos se acordaba de lo que esperar en ese lugar. No dudaría en noquear al guardia que se encontraba en el pasillo quien se encontraba con un juego de llaves entre sus ropas abriendo el cuarto vería a la joven que el había no solo ayudado sino que ella también había tenido una relación fugaz con el joven pero en esa habitación no estaba la pelirroja que le había hecho desprenderse de varias herramientas de navegación con tal de agradarla se trataba más bien de una réplica muy mal hecho de ella tenía sus ojos oscuros como si no hubiera descansado bien o peor aún que estuvo llorando por mucho tiempo ella ni se sorprendería cuando vio al albino demorando un poco para reaccionar a sus palabras. -Hola roja, que paso aquí alguien ha apagado la llama que ardía en ti?? Ella ni siquiera respondería solo bajaría la mirada observando el suelo, estaba claro que sus padres le habían hecho pasar por un mal bocado, solo hablaría débil como si llevaba mucho tiempo sin comer incluso. -Vienes por tus cosas verdad, mi padre las empeño a un tipo que le brillaron los ojos cuando las vio me dijo que jamás saldría de este lugar Muzen... La mujer parecía estar en una especie de trance el joven se acercó hasta ella doblando su rodilla derecha y tomando sus manos eran frías y pudo observar que en el brazo derecho tenía como puntos había sido inyectada eso le dio bastante rabia al hombre pero no podía hacer mucho el conocía lo que era formar parte de una familia noble, ir contra la voluntad del patriarca siempre terminaba en problemas solo se colocó de pie y beso la frente de ella antes de simplemente desaparecer de ese lugar ni sin antes estando en el pasillo acertar un fuerte golpe en una de las paredes creando un daño considerable en el material noble de la casa, seguramente todos se darían cuenta que algo extraño paso en ese momento. Muzen sin más remedio se vería obligado a salir por el mismo lugar que entro para evitar ser descubierto por los guardias. Muzen tenía una idea de donde poder buscar a ese vendedor antes de abandonar del todo la zona volteo a mirar hacia la casa apretando sus puños con fuerza ninguna mujer merecía ese tipo de vida. Dar con el tipo responsable de a verse llevado sus cosas no fue para nada difícil, en esta isla los que vendían cosas empeñadas eran conocidos por los operativos y bróker después de todo quien no quería comprar alguna cosa útil cuando otros simplemente tenían que abandonarlas por el hecho de encontrarse en serios problemas económicos no era su caso, pero tenía un significado bastante importante para el albino. Encontró el lugar sin demasiados problemas en la puerta un matón algo dormido quizás ya que no tuvo tiempo de reaccionar Muzen le acerco un puñetazo en la cara y otro en el estómago dejándolo totalmente noqueado se veía que tenía cara de pocos amigos esa noche luego de ver lo que le había pasado a Lucrecia, usando el rostro del guardia lo estrello contra la puerta de la casa de conveniencias donde estaría sus artilugios sin importarle el ruido que pudiera generar dejo el tipo inconsciente a un lado y comenzó a romper la mitad de las cosas que veía en el camino que no le iban a servir, rechisto bastante molesto cuando escucho unos pasos atrás suyo y un golpe vino de frente a su rostro uno que no le diario demasiado pero que si lo hizo regresar en si para poder esquivar el segundo golpe y darle uno bien dado al defensor en el estómago que tuvo que arrojar el aire que tenía en sus pulmones. -O Billy donde están mis cosas donde mierda las pusiste ando con poca paciencia si lo que le compraste a los Bansefi o más bien al idiota que dirige esa familia. -Ya ya lo vendí, un pirata se lo llevo un tipo que con un solo ojo un, me dijo que aquello le serviría para avanzar en sus estudios, me pago bastante dinero, su bandera pirata era una especie de cuervos. No tenía por qué mentirle después de todo se trataban de herramientas que podían ser compradas en varias tiendas de algunas islas, pero esas tenían un significado para Muzen ya que el las había marcado con su sello particular de Raiden por lo tanto quería recuperarlas. Tendría que averiguar quién era ese pirata lo soltaría al dueño luego de acertarle un par de golpes en Lara cara. Llevaría su mano a la ropa sacando un cigarrillo y mirando si se podría llevar alguna cosa de valor del lugar después de todo no quería a ver desperdiciado su tiempo. Un tipo con un solo ojo de donde el albino podría averiguar quién era ese sujeto y tendría que buscar esa banda esto se volvería ya personal. Luego de tomar algunas cosas de esa tienda de empeño para luego venderlo entre sus contactos y sacar algo de dinero se marcharía estaba realmente molesto con su cigarrillo en la boca. Regresaría al dormitorio donde estaban sus nakamas con sus manos vacías. RE: Artilugios Personales - Moderador Gaimon - 29-07-2024 AVENTURA COMPLETADA CON ÉXITO
Al user Raiden por una Aventura T1 se le entrega:
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