[Autonarrada] [Aut-T2] [Navideño] [Cantando Villancico] El Pavo Navideño - Versión para impresión +- One Piece Gaiden - Foro Rol One Piece (https://onepiecegaiden.com) +-- Foro: El mundo (https://onepiecegaiden.com/forumdisplay.php?fid=10) +--- Foro: East Blue (https://onepiecegaiden.com/forumdisplay.php?fid=16) +---- Foro: Loguetown (https://onepiecegaiden.com/forumdisplay.php?fid=48) +---- Tema: [Autonarrada] [Aut-T2] [Navideño] [Cantando Villancico] El Pavo Navideño (/showthread.php?tid=2909) |
[Aut-T2] [Navideño] [Cantando Villancico] El Pavo Navideño - Mayura Pavone - 04-01-2025 Loguetown, 1 de Invierno, Año 724
La mañana invernal en Loguetown despertaba con el crujido suave de la nieve acumulada bajo los pies de los habitantes. Las calles estaban decoradas con guirnaldas y luces parpadeantes, mientras el aroma de las castañas asadas llenaba el aire. Sin embargo, nada podía competir con la extravagancia de un único individuo que desfilaba con una gracia teatral por la avenida principal, atrayendo todas las miradas como el centro de un espectáculo improvisado. Vestido con su habitual capa verdeazulada decorada con bordados dorados en forma de plumas, Mayura Pavone, El Pavo Real del Océano, caminaba con un ritmo harmonioso y deliberado, como si sus pasos estuvieran coreografiados al compás de la música que él mismo entonaba. — Noche real, trono sin fin, Yo tan solo un inútil al fin. Las coronas resplandecen allá, Pero mi voz no les quiere importar. ¡Qué lindo brillar! En mi obra triunfal. Dulce festín, mesa imperial, Donde nunca fui el hijo ideal. Mientras ríen con copas de oro, Bajo el árbol, me guardo el decoro. "¿Por qué nació así?" Susurraban con horror. Triste balcón, nieve sin fin, Me acompaña un pavo real sin festín. "Eres nada", murmura el viento, Pero esta noche, haré un cuento. "¡Reinas falsas sin fe!" Cantarán mi balé. De sus salones yo huiré, Con mi verdad como ley. Pavos reales se dispersarán, En un mar donde yo reinaré. Noche de paz, noche final, Hoy me juro ser algo inmortal... — Cantaba con voz potente y dramática, alzando los brazos con teatralidad, dejando que su eco resonara por las calles. Las miradas de los transeúntes se volvían hacia él, algunas llenas de fascinación, otras de incredulidad, pero ninguna indiferente. Un grupo de niños seguía su melodía, tarareando torpemente la letra mientras reían ante las florituras de su interpretación. Los adultos, por otro lado, cuchicheaban entre ellos, sorprendidos ante la majestuosidad con la que el extraño pirata convertía cada rincón de la ciudad en un escenario. Con cada estrofa, Mayura avanzaba con pasos amplios y elegantes, girando sobre sí mismo al final de cada verso, dejando que su capa ondeara al ritmo del viento frío. — ¡Entre sombras nació mi esplendor! — Exclamó alzando la mirada hacia el cielo, cubierto de nubes, como si dirigiera su canto a los mismísimos cielos. — ¡Seré yo quien dicte su color! — Concluyó, haciendo una inclinación exagerada frente a un grupo de curiosos que lo observaban desde un café cercano. De repente, un grito surgió desde la esquina de la calle. — ¡Ese es el del cartel! ¡Mayura Pavone! ¡El Pavo Real del Océano! ¡Tiene una de las recompensas más alta entre los piratas novatos de verano! — La algarabía de la escena se cortó en seco cuando tres figuras emergieron entre la multitud: cazadores de recompensas armados con espadas y dagas, vestidos con capas de piel para resguardarse del frío. Mayura los observó con un brillo de diversión en sus ojos. — Oh... parece que tengo admiradores especiales esta mañana. — Dijo mientras llevaba una mano al pecho y daba un paso hacia atrás con dramatismo. — ¿Interrumpen mi actuación para pedirme un autógrafo, o es que desean jugar a ser villanos en alguna obra improvisada? — Concluyó con una mezcla de narcisismo e histrionismo, lanzando una mirada amenazante al final. Los cazadores, lejos de compartir el humor del pirata, avanzaron con paso decidido. Uno de ellos, un hombre de complexión robusta levantó una gran hacha señalando hacia Mayura. — No vamos a caer en tus juegos, Pavone. ¡Tu cabeza vale una fortuna! — Exclamó con su voz ronca y exageradamente grave. Como respuesta Mayura suspiró con una expresión de falsa resignación, inclinando la cabeza hacia un lado. — Qué aburridos... — Murmuró para sí mismo antes de dar un salto ágil hacia atrás, colocándose estratégicamente en el centro de la plaza. — ¡Entonces, caballeros, bailen conmigo si desean un final memorable! — Exclamaba con entusiasmo tras, con un movimiento veloz e imperceptible para un humano promedio, desenvainó una de sus katanas con un brillo plateado que reflejó la luz del sol. Los cazadores lo rodearon, confiados en su número, pero Mayura sabía que su destreza era tan letal como su teatralidad. El primer cazador se lanzó con un grito, blandiendo su hacha con fuerza. Mayura dio un giro sobre un pie, esquivando el golpe con la elegancia de un bailarín, y asestó un corte preciso en la empuñadura del arma, desarmando a su oponente con facilidad. — ¡Ah, una entrada espectacular! Pero… un final decepcionante. — Comentó al ver al cazador tambalearse y caer de espaldas. Los otros dos cazadores dudaron un instante, pero no tardaron en atacar al unísono. Sin perder el ritmo, Mayura esquivó con pasos ágiles y coordinados, como si la batalla fuera parte de una coreografía ensayada. Con un rápido movimiento, usó su capa para cegar momentáneamente a uno de ellos, haciendo que tropezara contra un puesto de frutas y quedara fuera de combate. El último cazador, ahora solo, retrocedió con evidente nerviosismo. — ¿De verdad quieres seguir, o prefieres irte con un poco de dignidad? — Preguntó Mayura, inclinándose levemente mientras apuntaba con la katana hacia el suelo. El cazador dudó un momento antes de soltar su espada y salir corriendo, dejando tras de sí el eco de las risas de algunos espectadores. Mayura guardó su katana con un movimiento fluido y realizó una reverencia exagerada hacia el público que se había reunido para observar el desenlace. — Gracias, gracias. La función ha terminado… al menos por ahora. — Anunció con una sonrisa mientras retomaba su camino. La gente aplaudió tímidamente mientras Mayura continuaba pavoneándose por las calles de Loguetown, entonando de nuevo su villancico personal como si nada hubiese pasado, un pavo real en su hábitat natural, exhibiendo sus plumas con orgullo y dejando su huella inconfundible. Sin duda, la ciudad entera recordaría su paso durante mucho tiempo, pero ahora tocaba buscar un lugar donde hospedarse pues el 3 de invierno se reuniría con toda la Hand of Destiny para zarpar hacia el Mar del Norte. "Aún me queda tanto por deslumbrar... y mis nakamas aún no saben lo que les tengo preparado. Será memorable." Pensó recordando que en aquel mar había mandado a construir una sorpresa para su tripulación, un magnífico balandro con diseños dignos del Pavo Real del Océano. RE: [Aut-T2] [Navideño] [Cantando Villancico] El Pavo Navideño - Moderador X Drake - 06-01-2025 ¡RECOMPENSAS POR AUTONARRADA T2 ENTREGADAS!
Mayura Pavone
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