
Henry
Tigre Rojo de la Marina
08-01-2025, 04:35 AM
Día 9 de Invierno del Año 724
Copos de nieve caían lentamente del cielo, siendo un recordatorio de la temporada del año en la que estábamos. En aquella mañana un soldado marine tocaba la puerta del suboficial Henry, para suerte del soldado el suboficial ya se encontraba despierto desde muy temprano. — Adelante. — dijo Henry al estar demasiado ocupado como para levantarse ahora mismo. El soldado, habiendo escuchado esto último, abre la puerta y se para firmemente a un metro y medio de esta. — Suboficial Henry, altos cargos de la marina me pidieron que le avise de su próxima misión el día de hoy. —
Henry se encontraba entre libros, estudiando para pasar el examen de oficiales, pudiendo así ser ascendido en cualquier momento. — Listo, disculpa soldado, de que se trata esta misión? — Henry terminaba de guardar todos aquellos libros en su lugar, poniéndose de pie, escuchando a lo que aquél soldado tenía para decir. — De hecho no es nada del otro mundo, usted fue asignado a patrullar las calles de Sparrowshade, evitando cualquier crimen o injusticia en el lugar. — Henry se mostraba pensativo, pues Sparrowshade era dónde su brigada había estado patrullando hace unos días.
— Perfecto, salgo de inmediato, ya puedes retirarte, soldado. — el joven suboficial terminaba de ajustarse su uniforme para salir de una vez de patrullaje. — ¡Si señor! — Segundos después de ver aquél soldado marcharse por su puerta, Henry sale de la misma con dirección a la puerta principal, estirando cada una de sus extremidades. Aparentemente este no usaba sus poderes para combatir el frío del invierno, pues este prefería pasar por aquél frío como parte de su entrenamiento.
De camino a la salida del G-17 Henry observaba a soldado marchar de un lado al otro, protegiendo el bastión de la justicia en todo el North Blue. A diferencia del G-23 en Kilombo esta base contaba con una mayor fuerza militar, lo que se reflejaba en una mayor seguridad en aquella isla. Uno de los objetivos de Henry era pasar el examen de oficial y volverse uno de gran renombre, volviendo al G-23 una vez este sea un gran y respetado marine. Pero el camino no sería fácil, el North Blue es uno de los Blues más complicados y peligroso, había sido un milagro que nuestro medio de transporte cayera tan cerca del G-17.
Una vez fuera de la base Henry caminó hasta la ciudad, dónde ocurría gran parte del comercio de aquella isla. Otros marines y cazadores recorrían las zona, lo que aliviaba la carga del suboficial Henry. Aún así este necesitaba algo de acción o por lo menos algo con lo que distraerse. Recorriendo una buena parte de Sparrowshade, el suboficial Henry se encontró con el mercado Swift Feather, donde ocurría la mayor parte del comercio e interacciones entre todo tipo de individuos en aquella isla. Tanto marines como cazadores encontraban sus provisiones en aquél lugar, evitando así perder el tiempo en lugares dónde no valía la pena.
El un lugar enorme, vulnerable a robos fugaces y esto Henry lo sabía muy bien, no por algo había nacido en Rostock. El joven marine se ocultó en un pasillo mientras escuchaba a la gente hablar sobre la mercancía, preguntándose su debían comprar una cosa o la otra. Todo parecía estar yendo a la perfección, tanto así que Henry empezó a caer dormido. Afortunadamente lo que parecía ser una roca caía desde el techo del edificio al que Henry estaba recostado, había sido alguien? No se sabía pero lo importante era que una señora estaba siendo robada. — ¡¡Auxilio, me quieren robar mis tomates, alguien llame a la marina, rápido!! — la señora no pudo contener a aquellos dos tipos por mucho tiempo.
Aquellos dos malandros salieron corriendo del lugar con varias bolsas de vegetales en las manos. — ¡Alto ahí, ladrones! — gritó Henry mientras corría detrás de aquellos tipos. Mientras más se acercaba el marine a atrapar a sus ladrones más este se daba cuenta del tamaño y agilidad de aquellos ladronzuelos. Aquellos dos "tipos" eran algo bajos y demasiado ágiles, como si fueran un par de chavales. Pues no pasó mucho antes de que Henry pudiera poner sus manos en aquellos ladrones, cargándolos con una mano cada uno, evitando así que salieran corriendo.
Luego de media hora interrogando a los chicos, Henry se dio cuenta de que estos eran huérfanos, los cuales huyeron tras la muerte de sus padres. Luego de una seria charla sobre lo que estaba bien y mal, el suboficial logró convencer a los jóvenes de estudiar en la Escuela Celestial Horizon y algún día convertirse en grandes marines o cazadores, eso ya estaba a selección de ellos. Estos parecían ansiosos de comenzar su nueva vida en aquella escuela, por lo que Henry decidió llevarlos él mismo, devolviendo todos aquellos vegetales a la señora del mercado.