Illyasbabel
cuervo de tiburón
19-10-2024, 08:42 PM
Noche, Verano 21
Luego de una mañana por lo menos conflictuada y una tarde de quehaceres cotidianos, el viejo Illya retornaba a la playa que había divisado horas atrás. Alejado de las urbes y frente a las costa, había encontrado una playa de ensueño para descansar los próximos días. La soledad y la meditación era uno de sus pasatiempos preferidos, y aquel sitio cumplía a la perfección de sus expectativas. La única distracción era el sonido de la marea en su avance sobre la arena y el sonido de las hojas mecidas por el suave y cálido viento de verano. En ocasiones la brisa marina llegaba hasta su rostro, recordándole, que a pesar de ser verano, el océano refrescaba la noche, y más al estar cercano a la mar.
Tuvo suerte en conseguir unos barriles de cerveza a muy buen precio. Cuarenta litros de cerveza y algo de comida para pasar los días. En cuanto el ocaso marco la hora abrió el primer barril y se dispuso a servirse su primer pinta. Se sentó sobre la arena y observó el horizonte, que poco a poco manifestaba estrellas multicolores y abría espació para la noche.
Bebió el primer vaso con rapidez, tenía sed, por lo que rápidamente se sirvió su segundo trago mientras preparaba una pequeña hoguera para cocinar la cena de la noche. Tenía pan y algunas frutas y verduras, las cuales se dispuso a cortar para preparar su plato: Un sándwich de pescado. Colocó los panes cortados sobre una piedra caliente al borde de la hoguera para de esta manera tostarlos, de igual modo hizo lo mismo con lo que quedaba del pez de la mañana. Nuevamente se levantó mientras la comida se calentaba y se sirvió una tercer pinta de cerveza. - Ahhh... que delicia - se dijo así mismo mientras disfrutaba la bebida. No había nada mejor que una noche de tranquilidad y buena bebida.
Tuvo suerte en conseguir unos barriles de cerveza a muy buen precio. Cuarenta litros de cerveza y algo de comida para pasar los días. En cuanto el ocaso marco la hora abrió el primer barril y se dispuso a servirse su primer pinta. Se sentó sobre la arena y observó el horizonte, que poco a poco manifestaba estrellas multicolores y abría espació para la noche.
Bebió el primer vaso con rapidez, tenía sed, por lo que rápidamente se sirvió su segundo trago mientras preparaba una pequeña hoguera para cocinar la cena de la noche. Tenía pan y algunas frutas y verduras, las cuales se dispuso a cortar para preparar su plato: Un sándwich de pescado. Colocó los panes cortados sobre una piedra caliente al borde de la hoguera para de esta manera tostarlos, de igual modo hizo lo mismo con lo que quedaba del pez de la mañana. Nuevamente se levantó mientras la comida se calentaba y se sirvió una tercer pinta de cerveza. - Ahhh... que delicia - se dijo así mismo mientras disfrutaba la bebida. No había nada mejor que una noche de tranquilidad y buena bebida.