MC duck
Pato
15-09-2024, 09:42 PM
La historia estaba siendo contada en un callejón oscuro y sombrío, de noche, mientras solo las antorchas iluminaban las calles de la ciudad de Loguetown, mientras un hombre desesperado intentaba alejarse de manos y pies atado, mientras una sombra sombría envuelta en una capa cuya tela parecía tejida en la misma oscuridad de la noche, con un sombrero de ala tan ancha que era extraño que no se le hubiera caído de la cabeza, y sus ojos brillantes en la oscuridad estaban envueltos en un antifaz que ocultaba su rostro, aunque no un enorme pico que empezaría a parlotear.
-Buenas noches, señor, bienvenido, a la presentación del capítulo uno de “historias para no dormir de Mc Duck”. Hoy os contaré como pase de ser un tierno patito a volverse todo un pato hecho y derecho, el inicio de mi leyenda, Todo empezó en la bruma, oscura y tranquila ciudad portuaria de Loguetown, Un lugar custodiado por la justicia, la verdad y el honor, que se auto proclamaba como “Democracia Parlamentaria” Pero no se engañen, en este lugar ellos no cortan el pan, y no le untas la mantequilla del poder ni brindan con el vino de la permisividad del gobierno mundial, bueno, eso último si, tal vez. Pero los que llevan el verdadero poder en las calles, son los criminales. Pese a estar ante las narices de la marina, porque los que están en el poder siempre quieren más poder.
-No… no necesito el trasfondo de la ciudad donde vivo
-CALLATE! me desconcentras… ¿Por donde iba?
En esta caótica ciudad llegó un pato muy peculiar, era llamado MC Duck, y no era un pato común que se satisface con las migajas de pan duro y rancio que le tiraban los ancianos, él tenía sueños de grandeza y riqueza. No, no era un pato común; tenía aspiraciones mafiosas, de control y de tomar las riendas de un mundo que le decía que nunca lograría nada por ser simplemente un pato. Y si, aquí vendría una explicación más detallada de cómo o por qué decidió convertirse en mafioso, pero… eso no nos interesa, demasiada charla, tras mucha paja canónica sin importancia, se había convertido en un prestamista.No te conviertes en mafioso de la nada, empiezas desde lo más bajo… Pero Pato Destacaría, aunque fuera por Pato.
-Ya… ¿esto es por lo que te debo dinero?
- Pero había un pequeño problema, minúsculo casi insignificante: nadie, y repito, nadie, se tomaba en serio a un pato que pedía deudas a los que había dado dinero, deudas de forma legítima, claro. Desde luego, era difícil intimidar cuando eres un pato con plumas blancas esponjosas adorables y blancas como la nieve de invierno, así que MC Duck decidió que era hora de cambiar de estrategia.
-Enserio, se lo digo, lo perdí todo en el casino Missile, yo no…
- MC Duck se disfrazó, envuelto en una capa negra y un sombrero de ala ancha, con un antifaz como un héroe de esos que se ven en las películas y comics. Con su disfraz puesto, se convertía en un justiciero nocturno, listo para acosar a sus clientes morosos. Los deudores no sabían qué había en su camino, pero pronto aprenderían que un pato es capaz de hacer grandes cosas cuando toca la tranquilidad de su bolsillo. Eso lo transformó, ese poder de intimidación, esa energía oscura que emana de la misma noche, del vacío entre las estrellas, esa velocidad y reflejos de velocista… Nace Speed Point, o como a mi personalmente me gusta llamarlo… Darkwing. Una fuerza oscura de la noche… se convirtió, en el señor de la noche…
La sombra puso una gesto un tanto heroico que no pegaba mucho con las cirscunstancias.
-Utilizando técnicas poco convencionales de cobro, MC Duck se presentaba a sus deudores en momentos inesperados, incluso en el baño. "¡Es hora de pagar la deuda, amigo!" “es hora de pasar a la acción!” “es hora de ponerse peligrosos!” Frases muy molonas, y las gritaba mientras ellos hacían su mejor intento por no caer de espaldas o cagarse encima, asustados de ver un pato con una capa. ¡El terror se apoderaba de ellos en esos instantes! Las estrategias de MC Duck resultaron ser más ingeniosas de lo que se imaginaban, y pronto, la gente de Loguetown comenzó a hablar sobre el misterioso pato que acechaba a los deudores. Deudores como tú… amigo.
-Enserio, si me deja ir… ¡No dire nada! ¡lo juro!
-Con cada encuentro era más violento, cómico y aterrador al mismo tiempo, La mente del pato se fracciono y creo a un ente de pura oscuridad, muy Pro y algo edgy. Mientras MC Duck ganaba respeto. ¿ves? no es difícil que todos ganen si hacen de su parte. ¡PERO NO! los malditos clientes se reían de un pato simplemente por su apariencia, juzgando sin conocer, sin saber la oscuridad que latía en su corazón, Y alimentarón al señor de la noche… Y empezaron a desaparecer… comenzaron a entender que no era solo un prestamista despreciado, sino un personaje temible en el corazón del crimen de Loguetown. Vosotros, malditos deudores, me creasteis. La risa en vuestras bocas se convirtió en temor, y el temor en respeto, mientras MC Duck disfrutaba de su nuevo estatus dentro del inframundo de la mafia… Yo, disfruto de vuestro terror.
-No, no, por favor…
-Así, el pato que una vez fue ignorado encontró su lugar en la historia de Loguetown. Con un poco de ingenio, algo de maña y un par de tiros bien dados…¡Con los cojones bien puestos! Bueno, y por qué no decirlo, con mucho humor, se dio cuenta de que incluso un pato puede lograr grandes cosas, siempre que no se tenga miedo de rasguñar la superficie de lo que los demás piensan… Como te voy a rasguñar yo a ti.
-Ehhm… no se como sentirme ante eso… por favor… para ya de contar historias…
- Y así, MC Duck, el pato prestamista, se convirtió en una leyenda en las noches de Loguetown, ya no solo un prestamista, sino un símbolo del ingenio y la determinación, todo mientras mantenía su carácter divertido y peculiar. Al menos hasta que un HIJO DE PUTA, lo enfado y lo obligó a matarlo en un callejón.
Con esas palabras MC Duck emergió de las sombras con un arma a la que apuntó directamente a la frente del hombre quien entró claramente en pánico mojando los pantalones, aunque por el olor, no seria la única fuga que sufrió.
-No por favor, en serio su dinero…
-Creía que querías que parara de contar historias… ASÍ QUE NO ME CUENTES TU LAS TUYAS… ¡DAME MI DINERO!
-VALE! ¡VALE! SE LO DARÉ SE LO DARÉ PERO NO ME…
Dos disparos se oyeron en la oscuridad, y se produjo un silencio incómodo antes de que los perros en la lejanía empezaran a ladrar por el ruido, las cuerdas del hombre cayeron, sin que este sufriera rasguño alguno, como si las balas hubieran sido finamente apuntadas para solo dañar las cuerdas., El tipo se palpaba el cuerpo buscando agujeros que no encontraria.
-TIENES UN DIA…
-¡gracias gracias… se lo pagare!
El hombre huyó, y el pato sopló el cañón humeante de su arma, poniendo una pose muy heroica aunque nadie podía verlo, al menos hasta que las linternas lo iluminaron, marines apuntaron con sus pistolas.
-¡He deténgase ahí!
pero en un rápido movimiento una bomba de humo los envolvió y el extraño héroe no estaba en el suelo, los marines buscaron con la mirada y lo vieron, a 20 metros en el tejado del edificio mas próximo, haciendo perfil contra la luna mientras canturreaba.
-El señor de la noche… soy mitad hombre mitad animal… el señor de la noche… mejor escapa o te va a matar … el señor de la noche… con tu corazón no deberías jugar,...
Y de un salto, el misterioso individuo desapareció en la oscuridad de loguetown
-Buenas noches, señor, bienvenido, a la presentación del capítulo uno de “historias para no dormir de Mc Duck”. Hoy os contaré como pase de ser un tierno patito a volverse todo un pato hecho y derecho, el inicio de mi leyenda, Todo empezó en la bruma, oscura y tranquila ciudad portuaria de Loguetown, Un lugar custodiado por la justicia, la verdad y el honor, que se auto proclamaba como “Democracia Parlamentaria” Pero no se engañen, en este lugar ellos no cortan el pan, y no le untas la mantequilla del poder ni brindan con el vino de la permisividad del gobierno mundial, bueno, eso último si, tal vez. Pero los que llevan el verdadero poder en las calles, son los criminales. Pese a estar ante las narices de la marina, porque los que están en el poder siempre quieren más poder.
-No… no necesito el trasfondo de la ciudad donde vivo
-CALLATE! me desconcentras… ¿Por donde iba?
En esta caótica ciudad llegó un pato muy peculiar, era llamado MC Duck, y no era un pato común que se satisface con las migajas de pan duro y rancio que le tiraban los ancianos, él tenía sueños de grandeza y riqueza. No, no era un pato común; tenía aspiraciones mafiosas, de control y de tomar las riendas de un mundo que le decía que nunca lograría nada por ser simplemente un pato. Y si, aquí vendría una explicación más detallada de cómo o por qué decidió convertirse en mafioso, pero… eso no nos interesa, demasiada charla, tras mucha paja canónica sin importancia, se había convertido en un prestamista.No te conviertes en mafioso de la nada, empiezas desde lo más bajo… Pero Pato Destacaría, aunque fuera por Pato.
-Ya… ¿esto es por lo que te debo dinero?
- Pero había un pequeño problema, minúsculo casi insignificante: nadie, y repito, nadie, se tomaba en serio a un pato que pedía deudas a los que había dado dinero, deudas de forma legítima, claro. Desde luego, era difícil intimidar cuando eres un pato con plumas blancas esponjosas adorables y blancas como la nieve de invierno, así que MC Duck decidió que era hora de cambiar de estrategia.
-Enserio, se lo digo, lo perdí todo en el casino Missile, yo no…
- MC Duck se disfrazó, envuelto en una capa negra y un sombrero de ala ancha, con un antifaz como un héroe de esos que se ven en las películas y comics. Con su disfraz puesto, se convertía en un justiciero nocturno, listo para acosar a sus clientes morosos. Los deudores no sabían qué había en su camino, pero pronto aprenderían que un pato es capaz de hacer grandes cosas cuando toca la tranquilidad de su bolsillo. Eso lo transformó, ese poder de intimidación, esa energía oscura que emana de la misma noche, del vacío entre las estrellas, esa velocidad y reflejos de velocista… Nace Speed Point, o como a mi personalmente me gusta llamarlo… Darkwing. Una fuerza oscura de la noche… se convirtió, en el señor de la noche…
La sombra puso una gesto un tanto heroico que no pegaba mucho con las cirscunstancias.
-Utilizando técnicas poco convencionales de cobro, MC Duck se presentaba a sus deudores en momentos inesperados, incluso en el baño. "¡Es hora de pagar la deuda, amigo!" “es hora de pasar a la acción!” “es hora de ponerse peligrosos!” Frases muy molonas, y las gritaba mientras ellos hacían su mejor intento por no caer de espaldas o cagarse encima, asustados de ver un pato con una capa. ¡El terror se apoderaba de ellos en esos instantes! Las estrategias de MC Duck resultaron ser más ingeniosas de lo que se imaginaban, y pronto, la gente de Loguetown comenzó a hablar sobre el misterioso pato que acechaba a los deudores. Deudores como tú… amigo.
-Enserio, si me deja ir… ¡No dire nada! ¡lo juro!
-Con cada encuentro era más violento, cómico y aterrador al mismo tiempo, La mente del pato se fracciono y creo a un ente de pura oscuridad, muy Pro y algo edgy. Mientras MC Duck ganaba respeto. ¿ves? no es difícil que todos ganen si hacen de su parte. ¡PERO NO! los malditos clientes se reían de un pato simplemente por su apariencia, juzgando sin conocer, sin saber la oscuridad que latía en su corazón, Y alimentarón al señor de la noche… Y empezaron a desaparecer… comenzaron a entender que no era solo un prestamista despreciado, sino un personaje temible en el corazón del crimen de Loguetown. Vosotros, malditos deudores, me creasteis. La risa en vuestras bocas se convirtió en temor, y el temor en respeto, mientras MC Duck disfrutaba de su nuevo estatus dentro del inframundo de la mafia… Yo, disfruto de vuestro terror.
-No, no, por favor…
-Así, el pato que una vez fue ignorado encontró su lugar en la historia de Loguetown. Con un poco de ingenio, algo de maña y un par de tiros bien dados…¡Con los cojones bien puestos! Bueno, y por qué no decirlo, con mucho humor, se dio cuenta de que incluso un pato puede lograr grandes cosas, siempre que no se tenga miedo de rasguñar la superficie de lo que los demás piensan… Como te voy a rasguñar yo a ti.
-Ehhm… no se como sentirme ante eso… por favor… para ya de contar historias…
- Y así, MC Duck, el pato prestamista, se convirtió en una leyenda en las noches de Loguetown, ya no solo un prestamista, sino un símbolo del ingenio y la determinación, todo mientras mantenía su carácter divertido y peculiar. Al menos hasta que un HIJO DE PUTA, lo enfado y lo obligó a matarlo en un callejón.
Con esas palabras MC Duck emergió de las sombras con un arma a la que apuntó directamente a la frente del hombre quien entró claramente en pánico mojando los pantalones, aunque por el olor, no seria la única fuga que sufrió.
-No por favor, en serio su dinero…
-Creía que querías que parara de contar historias… ASÍ QUE NO ME CUENTES TU LAS TUYAS… ¡DAME MI DINERO!
-VALE! ¡VALE! SE LO DARÉ SE LO DARÉ PERO NO ME…
Dos disparos se oyeron en la oscuridad, y se produjo un silencio incómodo antes de que los perros en la lejanía empezaran a ladrar por el ruido, las cuerdas del hombre cayeron, sin que este sufriera rasguño alguno, como si las balas hubieran sido finamente apuntadas para solo dañar las cuerdas., El tipo se palpaba el cuerpo buscando agujeros que no encontraria.
-TIENES UN DIA…
-¡gracias gracias… se lo pagare!
El hombre huyó, y el pato sopló el cañón humeante de su arma, poniendo una pose muy heroica aunque nadie podía verlo, al menos hasta que las linternas lo iluminaron, marines apuntaron con sus pistolas.
-¡He deténgase ahí!
pero en un rápido movimiento una bomba de humo los envolvió y el extraño héroe no estaba en el suelo, los marines buscaron con la mirada y lo vieron, a 20 metros en el tejado del edificio mas próximo, haciendo perfil contra la luna mientras canturreaba.
-El señor de la noche… soy mitad hombre mitad animal… el señor de la noche… mejor escapa o te va a matar … el señor de la noche… con tu corazón no deberías jugar,...
Y de un salto, el misterioso individuo desapareció en la oscuridad de loguetown