Hay rumores sobre…
... que existe un circuito termal en las Islas Gecko. Aunque también se dice que no es para todos los bolsillos.
[Misión de temporada] El Gato y el Ratón - Grupo A
Tofun
El Largo
Reboté de un lado a otro como una pelota de tenis, igual que las que usaba Guybrush para jugar en el patio de las orugas los jueves, justo al salir del colegio. Y tal como en aquellos tiempos, logré noquear a todos los guardias sin causar ni una sola baja. ¡Sonreí como un niño con helado! No estaba en mis planes hacerles daño, solo ponerles a dormir la siesta un rato.

Con los guardias fuera de combate, arrastré los cuerpos hasta el cuarto de la limpieza. Ahí, empecé a cachearlos buscando algo de valor, pero lo único que fui encontrando era pura chatarra: un pepino (¿en serio?), unos chicles más caducados que mi sentido del humor, un cactus (¡¿un cactus?!), un par de condones, y un tubo de pasta de dientes. Tiré todo menos las llaves, que esas sí que me servían. Tapé los cuerpos con mantas y trapos como si estuviera echando queso por encima de una de mis exquisitas recetas de pasta.

La abrí con una facilidad que ni yo me esperaba, y comencé a descender lentamente. La sala de máquinas no tenía guardias, solo había algunos expertos con bata y un par de cerebritos de la física o esa cosa rara que decían que hacía que el mundo se moviera. Mientras trataba de idear qué hacer a continuación, un estruendo sacudió la central.

“Umibozu... la calamidad” pensé, como si me hubieran encendido una bombilla en la cabeza. ¡Tenía que ser él! Las luces rojas comenzaron a parpadear y una alarma infernal empezó a sonar como si hubieran puesto un disco de villancicos en agosto. Me puse nervioso, de esos nervios que te hacen querer salir corriendo en círculos. ¿Volvía con mis compañeros? ¿Intentaba evacuar a esta gente? Nah, aquí estaban a salvo y además bien encerraditos. Ni se iban a meter en problemas, ni iban a fastidiarnos la operación.

De pronto, deje que mi cuerpo segregase una cantidad absurda de espuma, cubriendo toda la escalera como si fuese causada por una grave avería en la planta superior, quizás algún proceso quimico de la sala con la advertencia. Salí corriendo con mi mejor cara de pánico.

Espuma de Cerveza
U128103
ÚNICA
Defensivo
Tier 1
24/9/2024
15
Costo de Energía
1
Enfriamiento
Tofun segrega espuma de cerveza de su cuerpo que dura dos turnos, la espuma es lo suficientemente densa como para bloquear la visión del enemigo. Puede crear hasta 5 metros de radio, puede darle formas a la espuma. La espuma no tiene usos encadenados o combinados con otras técnicas.


¡Chicos, soy el de la cerveza! ¡No sé si os acordáis de mí! — Dije, como si fuera una celebridad olvidada por sus resacas. — ¡Tenemos un problema enorme! ¡Una avería muy seria! — Señalé la espuma como si fuera una prueba apocalíptica. — Los guardias salieron pitando, pero me dijeron que apaguéis todos los sistemas de la central o esto podría explotar. ¡Dios mío! — Me llevé las manos a la cabeza como si mi vida estuviese en juego, mirando al suelo con una preocupación fingida. — ¡La situación es gravísima! No salgáis de aquí, esta sala es la única segura. [CARISMA]



Salí corriendo de nuevo, perdiéndome en la nube de espuma mientras me dirigía hacia la puerta. La abrí y, sin pensarlo dos veces, me dediqué a destrozar la cerradura o la manilla interior antes de salir corriendo, cerrando la puerta con llave detrás de mí. Con suerte, estarían tan ocupados apagando todo que ni se darían cuenta.
Tan pronto como me fue posible, me deslicé hacia la pasarela exterior, donde estaba Ubben, y vi el caos que se estaba armando. ¡Menudo cristo! 

¿Cómo vais? ¿Parece que esto está a punto de caer, no? — Dije con la tranquilidad de quien comenta el clima, intentando aparentar ser el alfa de la Revolución. Saqué el Den Den Mushi y me comuniqué con Airgid. — Chaqueta metálica, esto está a punto de reventar. — Dije, mientras echaba un vistazo a esos extraños vehículos acuáticos que había por ahí. ¿Qué demonios eran esas cosas? Nunca había visto nada parecido. Mi mente ya estaba maquinando.

Si atacaban a Ubben, cubriría sus espaldas, pero mientras no podía dejar de dar vueltas a una idea que me parecía gloriosa.

Oye, Ubben... ¿y si luego cogemos esos cacharros acuáticos para ir con el resto? — Dije, imaginándome la entrada triunfal junto al Grupo B y C, montados en vehículos acuáticos como si fuéramos los héroes de una película de acción de bajo presupuesto. Solo de pensarlo, una sonrisita traviesa se dibujó en mi rostro. — Jejeje —solté, más para mí mismo que para nadie.

Resumen

Stats y demás
#21
Percival Höllenstern
-
Stats Nuevos, Armas y Disclaimer



La presa se encontraba cediendo, lo noté al tiempo que mis esferas finamente talladas regresaban a mis manos a fuerza de su propio giro tras el impacto, y el que había sido un momento de sigilo perfecto y afortunado, se convertía en un campo de batalla abierto.

Nuestros números eran claramente inferiores, pues los que conocíamos la Armada sabíamos que lo nuestro era operar bajo números reducidos y crear el mayor caos posible, y en esta ocasión sobre un puente colindante, pero alejado, pude escuchar como se elevaba un sonido de cuerda tensada al tiempo que una serie de arpones se dirigían a la otra parte de la presa.

Los hombres y mujeres que portaban estas extrañas pistolas de arpones, iban vestidas en una suerte de trajes de una tela extraña, ennegrecida y aún húmeda por el periplo marítimo, pero también vestían un extraño casco que si bien dejaba entrever cabezas, recordaba a las pompas de oxígeno de los Tenryuubitos, pero mucho más modestas.

Fue un milagro que no atacaran a mi ubicación, pues quizá hubiera sido demasiado tarde, pero rápidamente tomé cobertura del hecho valiéndome nuevamente de las alturas y de replegarme cuerpo a tierra sobre estos tejados utilizando de protección las chimeneas. Acto seguido guardé mis esferas en el interior de mis ropajes y me acomodé la ropa mientras el relajante sonido del crujir de mis dedos era realizado por medio de la presión habitual de mi pulgar sobre la mano izquierda.

Mientras agradecía mi fortuna en silencio, de la parte trasera de mi cuerpo, agarré con cuidado mi arco tratando de que no se me viera, mientras al mismo tiempo me acercaba con cautela para trazar una diagonal con los hombres a 80 metros de mí, que se disponían en equidistancia ante nuestra posición y contra los cuales, si bien tenía buena visibilidad, la distancia en esta ocasión era un problema por la lejanía. 


Con paciencia, me encaramé hacia una chimenea, mejorando aún más mi cobertura y amplificando más mi ratio de visión y observé con atención a uno de estos individuos, concretamente el que se encontraba más hacia la izquierda y, por lo tanto, cerca de mí, y comencé a orientar mi arco largo contra su posición y en sigilo tensé una flecha tomada desde el carcaj corto que se encontraba en mi cintura y bailaba sobre mi trasero con una correa algo holgada.


Mantuve la posición de guardia del arco esperando que ese o cualquier otro individuo del grupo se acercaran, algo que tendría que realizar totalmente aquella escuadra si querían cazarnos y nos habían visto, acariciando y esperando el momento perfecto para acabar con su pobre vida.


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Virtudes y Defectos y Bónus

Armas e Inventario

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#22
Alistair
Mochuelo
Stats actualizados & notita pequeña


Un sigilo cuanto menos descuidado de su parte, de eso no tuvo duda cuando hubo consecuencias. Sobreestimando la cantidad de guardias que se habían movilizado hacia otro extremo de la estructura, pretender echar vuelo inicialmente parecía una idea aceptable en una situación apresurada. Lejos de la realidad, los guardias que aún permanecían por el lugar no fallaron en observar al chico Lunarian echando vuelo y, sin medir palabra, apuntarle con sus cañones dispuestos a derribar al Ícaro que no se levantaría más que unos cuantos metros del suelo, lejos de la meta en la que, quizá, podría haber sido tan ambicioso como para encontrar una cobertura parcial y habría evitado llevarse un tiro a la cabeza, sino al menos a una extremidad menos... vital para su funcionamiento biológico. 

La primera respuesta, totalmente instintiva, fue la de colocar su diestra sobre el mango de su katana y su zurda en la guarda, dispuesto a desenfundar rápidamente y protegerse de los proyectiles como pudiera para aunque sea mitigar parte del daño y no acabar con dos proyectiles incrustados en su cabeza; no era una buena salida enfrentándose a mas de un tirador, pero era su mejor opción en el instante inmediato. Una tentativa de defensiva que, de hecho, acabó sin hacer falta en lo absoluto. Algo que desconocía en lo absoluto, una acción invisible -o quizá incluso una fuerza- a la cual no podía otorgarle explicación lógica provocó que los hombres a punto de jalar el gatillo cayeran inconsciente en el acto, previniendo que parte de él saliera a volar al momento de colisión del proyectil. Sentirse afortunado era infravalorar el sentimiento que le dio en el acto, uno que además inmediatamente le arrancó uno de los suspiros de alivio mas emocionales en mucho tiempo.

Finalmente: La presa, y todo el caos que se estaba armando alrededor de ella. Umibozu. el Kaiju de la armada, de hecho fue lo segundo que pudo observar luego del gigantesco objetivo al que apuntaban; siendo atacado por figuras que distinguía con dificultad, el primer pensamiento del chico fue el de saltar al agua para mitigar como pudiera la tarea del titán, pero... No. Se mordió el labio en frustración, entendiendo que probablemente solo estorbaría en el enfrentamiento de la criatura marina, desistiendo de la idea. — Por favor aguanta todo lo que puedas, gigantón. — Si llegaba un momento en que pudiera serle de ayuda, y lo necesitara, allí estaría para Umi. 

Por lo pronto: Información. La presencia de mis compañeros en la zona y la apaleada apariencia de la presa dejaban en claro que ya se estaban encargando ellos de hacerla añicos, algo que ocurriría mas pronto que tarde por la debilidad estructural que estaba siendo impuesta sobre ella, y el peso del agua que retenía con las pocas fuerzas que le quedaran. Pero las ocho figuras extrañas en las motos submarinas permanecían como una variable completamente desconocida, un imprevisto al cual prefería dar respuesta cuanto antes. Tomó cobertura tan pronto las mencionadas figuras emergieron, y empezó a explorar sus alrededores en busca de mas cuerpos de seguridad derribados por la misteriosa fuerza -el Haoshoku de Umi-. En ella, tenía tres claros objetivos de los cuales solo esperaba encontrar uno, dos si tenía suerte, o tres si el universo se sentía en extremo generoso: Un comunicador que quizá serviría para escuchar comunicaciones de los hombres recién llegados -o en su defecto para comunicarse con sus aliados por la duración de la misión-, algún indicativo que le permitiera entender las habitaciones con alta prioridad del lugar, y... comida. El estomago empezaba a rugirle con ganas, y pelear con el estómago vacío era algo que prefería evitar. 

Resumen

Virtudes+Defectos & Conteo

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#23
Atlas
Nowhere | Fénix
Escuadrón Barracuda

Parece que por fin empieza la fiesta, ¿no? Yo diría que sí, dado que Ubben se ha librado de milagro de que le volasen los sesos con la descarga de voluntad de su compañero subacuático y, con buen criterio, se ha puesto manos a la obra al ver de dónde viene la amenaza. Sí, de esos cinco que se han subido en una pasarela tras salir del agua y de los otros tres, idénticos a ellos, que siguen bajo el agua. De cualquier modo, lo primero es lo primero y hay que tirar la presa abajo, ¿no? Por la forma en que la grieta se está extendiendo parece bastante evidente que va a caer más tarde o más temprano mientras os aseguréis de que nadie meta el hocico en vuestro trabajo, pero vale, me parece bien. Tus sembon vuelan en dirección a la abertura que tus compañeros habían realizado previamente, aumentando la severidad de la herida de la estructura y provocando que el agua comienza a salir con más fuerza incluso. Debido al creciente ímpetu del agua, asistís al derrumbe completo de la presa. El agua escapa con un caudal turbulento y vertiginoso al que, sorprendentemente, vuestros enemigos subacuáticos parecen adaptarse bastante bien.

No sé si los de las pasarela te han llegado a ver hacer tu movimiento o no, pero estaremos de acuerdo en que se han plantado en una zona plagada de cuerpos inconscientes de personas uniformadas como tú. Además, por si no te has dado cuenta, has formado una buena. Que sólo tú de entre todos ellos te mantengas en pie y te aproximes hacia ellos... Creo que eso no hay carisma que lo salve. Es por ello que tu ataque no pilla desprevenido al buzo situado más a la derecha del grupo, el más próximo a ti.

Cuando lanzas tu aguja, tu enemigo alza ambos brazos en un intento de interponer estos o su arma en la trayectoria de tu proyectil para, al menos sufrir menos daños de los que presentes causarle. Desafortunadamente para él, no consigue desviar la ofensiva o protegerse lo suficiente como para evitar que su arma caiga a sus pies, sobre la pasarela.
Guardia Alta
COM102
COMBATIENTE
Defensiva Activa
Tier 1
No Aprendida
20
Costo de Energía
1
Enfriamiento
Cruzando los brazos mientras los eleva el usuario adquiere una postura defensiva para amortiguar un poco el siguiente daño buscando quedar erguido. Incrementa la [Defensa Pasiva] en +5 durante la ejecución.
Defensa Pasiva + [RESx2] de Daño Mitigado


Como imaginarás, el tipo no se queda quieto y decide pasar a la ofensiva. Intenta recorrer a toda velocidad la distancia que os separa. Cuando quieres darte cuenta, se ha plantado justo frente a ti e intenta golpearte en el costado derecho con una violenta patada giratoria. Inmediatamente después, da un salto hacia atrás para volver a situarse junto a su arma en una posición ventajosa en un punto más elevado de la pasarela, intentando en el proceso propinarte una patada ascendente en el mentón.
Impacto de Media Luna
ACR302
ACRóBATA
Ofensiva Activa
Tier 3
No Aprendida
41
Costo de Energía
2
Enfriamiento
Buscando trazar el mayor arco posible con su pierna o brazo, y aprovechando la rotación de su cuerpo, el usuario trazará un rápido golpe como si su cuerpo fuera un látigo, causando [Desarme] de impactar contra alguna extremidad que sujete un arma. Esta ofensiva disloca por unos momentos la extremidad con la que se ataca logrando un ligero alcance adicional de 1 metro en el golpe,
Golpe Basico + [FUEx2,3] de [Daño contundente]


Umibozu, por tu parte, después de confirmar que has hecho una brecha más que considerable en la presa —y si miras un poco verás que tus compañeros la han acrecentado— te volteas para encarar a los tres enemigos que se han quedado bajo el agua para detenerte. Deben haber juzgado que tu tamaño y la que acabas de formar te convierten en el enemigo más peligroso y el primero a abatir si quieren cumplir con su trabajo. Está en tu mano confirmarles sí es así o no.

Tu maniobra te permite desviar varios de los proyectiles y mitigar considerablemente el daño que pretendían causarte, pero aun así algunos logran herir tu gruesa piel y varias laceraciones pasan a adornar tu cuerpo, si bien ninguno de los arpones se queda clavado en tu anatomía —menos mal que hay algo bueno, ¿no?—.

Sea como sea, el hecho es que después sigues girando como la ruleta de un casino: sin parar, a gran velocidad y con intención maliciosa. Como una inmensa mole submarina, ruedas a toda prisa hacia las motocicletas subacuáticas, que se intentan apartar de tu trayectoria sin demasiada fortuna. Consigues impactar sobre las tres en orden sucesivo, desmontando a unos ocupantes que se quedan flotando bajo el agua con sus armas en ristre.

De cualquier modo, los tres enemigos alzan sus armas en tu dirección una vez has rebasado su posición. Inicialmente se quedan muy quietos, aparentemente fijándote como objetivos para no errar el tiro y, acto seguido, ejecutan un movimiento en el que disparan con sus armas al tiempo que lanzan una suerte de puñetazo hacia delante.
Centrar Tiro
TIR201
TIRADOR
Utilidad Activa
Tier 2
No Aprendida
29
Costo de Energía
1
Enfriamiento
Apuntando con su arma hacia un blanco, centrando su atención y dejando de percibir bien sus alrededores durante la ejecución de esta acción salvo de su objetivo, el usuario centrara su atención completa en su objetivo, logrando encadenar junto a esta técnica alguna acción ofensiva contra su objetivo, adquiriendo su adversario una desventaja de [Reflejos] para reaccionar y la ofensiva tendrá un incremento de daño.
[-5 Reflejos] y +25 de [Daño]

Shot Fist
GUN301
GUNKATA
Ofensiva Activa
Tier 3
No Aprendida
36
Costo de Energía
2
Enfriamiento
Portando una arma de fuego en su mano el usuario realizará un disparo contra su objetivo. Al tiempo que realiza este movimiento, ejecuta un puñetazo hacía el oponente, incrementando la velocidad y potencia de la bala, que viajará hasta 16 metros adicionales. El disparo gana +5 [Tasa de Acierto].
Golpe Básico + [FUEx2,5] de [Daño Perforante]


Es justo después de este momento crítico al que ya me contarás cómo reaccionas que os dais cuenta de que el agua que os rodea escapa a raudales por la presa que, por fin, ha sido destruida. Es por ello que el volumen de líquido en el que os podéis mover va menguando, de manera que cuando os queréis dar cuenta ya no estáis sumergidos. Por el contrario, os encontráis sobre un terreno irregular compuesto por rocas semienterradas y arena mojada, en el cual se forman pequeños charcos que provocan un chapoteo cuando los pisáis. Por cierto, no sé si os habéis fijado o no, ¿pero qué era eso que se iba por ahí junto al agua, golpeándose contra las piedras del suelo, los restos de las compuestas y chocando entre sí como si fuesen canicas? Juraría que eran las motos subacuáticas, pero no lo tengo del todo claro.

Tofun, el carisma te hace más creíble a ti, pero no medio lelos a los demás. Como buenos cerebritos y prodigios contratados por la élite económica de Oykot, antes de asumir lo que dices como una verdad inquebrantable todos ellos llevan sus ojos cargados de dioptrías a las pantallas en las que viven inmersos la mayor parte del tiempo.

—Parece que hay una fuga —dice uno de ellos, pero no es una avería del sistema—. Ajustaremos la potencia de los motores para que no se sobrecalienten al haber menos agua, pero con una buena calibración podrán continuar produciendo energía aunque sea menor a ritmo. Una vez se solucione el problema de la fuga restableceremos la potencia habitual, ¡pero muchas gracias!

Mira el lado positivo. No han hecho lo que querías porque no tenían por qué hacerlo, pero al menos no han sospechado de que tengas nada que ver con esa alarma rojiza que suena, suena, suena y suena. ¿Por qué? Ni idea, la verdad, pero no tengo del todo claro si la cadena de cosas que has planteado después tendría lugar en caso de las cosas en el interior no fueran tal y como lo habías planeado... Como es el caso, vaya.

Percival, con gran destreza optimizas tu posición de tiro para hacer tus ataques lo más letales posibles. Dicen que todo llega para quien sabe esperar, lo que no tenemos claro es cuánto se puede perder esperando. Dada tu cercanía a la posición del novato, seguiré informándote sobre la situación en la zona más cercana a las compuertas en su parte.

Alistar, parece que el susto te ha puesto un poco los pies en la tierra. No digo que sea algo bueno o malo, pero lo cierto es que seguramente así puedas sobrevivir al menos un poco más. En cualquier caso, te noto hoy un poco más enérgico, no sé, como si hubieses crecido un poco. No te estarás dopando, ¿no?

Sea como sea, te consigues escabullir por la zona sin atraer la atención de los cinco buzos que se encuentran fuera del agua. Desde tu posición puedes ver cómo uno de ellos, el situado más a la derecha, inicia un enfrentamiento con Ubben. Bajo la superficie —cuando había superficie— Umibozu se encarga de los que no han sacado la cabeza del agua. Los otros cuatro, por el contrario, no se quedan quietos y pasan a la acción. De un salto, abandonan su posición en las pasarelas y saltan al terreno pedregoso que conformaba el suelo del embalse. Se mueven con bastante velocidad, evitando los charcos y saltando de roca en roca para evitar resbalar —aunque algo me dice que tampoco lo harían—. Se dirigen a la zona de las compuestas, que ya no sirve de contención para nada porque todo el agua ha escapado.

Dos de ellos se sitúan en lo que sería el centro dela zona que antes ocupaban las compuestas y parecen sacar un artefacto de un pequeño bolsillo situado en su espalda, uno cada uno, antes de depositarlo en el suelo. ¿Para qué serán? Sea como sea, alcanzas —tú y nuestro querido Ojo de Halcón, claro— a ver cómo los otros dos abandonan el terreno pedregoso de un potente salto y se colocan a buen resguardo en ambos extremos de la presa, empleando tuberías para cubrirse lo mejor posible. El más cercano a ti, por cierto, que no te ha visto pero estará a unos quince metros, es el que estaba más a la izquierda en la formación. Por cierto, ¿qué es eso que se está bebiendo uno de los que ha sacado un artefacto de sus bolsillos? ¿Cuándo lo ha sacado?

Al margen de eso, consigues encontrar un Den Den Mushi entre las pertenencias de los inconscientes. Puedes escuchar órdenes de todo tipo, pero ninguna dirigida a lo sujetos que se os han echado encima sin previo aviso —en el minilore del grupo entenderás por qué, aunque no puedes saberlo on-rol—. No parece haber ningún objeto de valor más entre los caídos, aunque sí algún caramelo y chocolatina, un total de tres entre unos y otros, que podrías llevarte si te hace falta.
Mates

Presa
#24
Umibozu
El Naufragio
Los arpones golpearon en mi cuerpo hiriéndome seriamente, pero por suerte ninguno quedó clavado en mí. Aunque gracias al giro podría haber sacado provecho inicialmente, después hubieran sido más un lastre y un incordio para todo.  En mi avance conseguí desmontar a varios de los enemigos de sus motos de agua. Lamenté estar en mi elemento, pues de haber estado en tierra firme aquello habría significado el fin del combate al haber aplastado por completo a los tipos. Tampoco podía lamentarme, porque en el agua era donde mi superioridad brillaba, no solo por los beneficios que me brindaba, sino por los perjuicios que aplicaba en los humanos y demás seres no acuáticos. Como fuera, mi avance me dejó en una posición desventajosa. Mala planificación. Ahora entre mi posición y la huida tenía a tres enemigos que difícilmente me iban a dejar escapar tranquilamente. Detuve el giro y me encaré de nuevo a mis rivales. Tras de mí estaba la abertura que ya me había encargado de hacer, pero era por dónde habían venido esos tipos, por lo que no era descabellado pensar que pudieran haber más o tener alguna trampa lista esperándome. No, si quería escapar tendría que acabar con esos tres o, como poco, pasar hasta el otro lado.

Una sonrisa se dibujó en mi rostro al tiempo que las membranas del cuello se expandían y plegaban varias veces. La presa había caído. Nuestro objetivo estaba cumplido. El agua salía a borbotones y el nivel descendía rápidamente. Aquello significaba varias cosas. La primera era que perdía mi superioridad estratégica. La segunda que si conseguía aplastar a los humanos con complejo de pez sería la última vez que tendría que hacerlo. Finalmente que ya daba igual lo que me pudiera pasar, mi papel estaba hecho y ahora los engranajes debían seguir girando hasta completar el plan. Tan solo esperaba que el grupo B estuviera ya listo para evitar la inundación masiva de la isla. Adopté una posición defensiva, atento a los tres. Mi altura y envergadura me daba una buena panorámica de mis rivales, pudiendo verlos a los tres a la vez. Todos ellos me apuntaban con sus armas y como si de un movimiento repetido por un espejo se tratara, los tres dieron un puñetazo hacia adelante con sus armas, disparándolas de esa manera tan peculiar. Tres balas volaron raudas hacia mí. ¿Por qué esos tipos habían decidido que yo era su final raid boss?  En una posición aparentemente descubierta, encajé con precisión las balas, reduciendo de esa manera el daño recibido por cada una de ellas. A continuación inicié una carrera contra el buzo central para arrollarlo por completo al tiempo que llegaba a la presa. Cargué con fiereza y contundencia, empleando todo mi potencial
Contenido Oculto
en un avance en línea recta.


Resumen


Aclaraciones

Inventario

VyD

Técnicas


#25
Alistair
Mochuelo
Stats

Virtudes+Defectos & Conteo


El sonido de metal resquebrajándose y deformándose hasta su inevitable punto de intolerancia señaló el éxito de sus compañeros asediando sin piedad la presa, la cual acabó por colapsar ante todo el peso del agua tras ella con una estructura incapaz de hacerle frente. Al menos por la primera parte, la operación había resultado ser exitosa. Pero el canto final de victoria aún estaba demasiado fuera de alcance como para considerarlo definitivo, mucho menos para celebrarlo. Aún quedaba trabajo por hacer.

El saqueo a las pertenencias de los guardias desmayados en el perímetro había sido tan exitoso como podía esperar: Si bien no encontró ningún indicativo de las zonas mas integralmente importantes de la central hidroeléctrica -una pena, pero es cierto que sería demasiado pedir-, a cambio había conseguido dos de las cosas que más le hacían falta en el escenario. Lo primero y que más le alegró el día: Una de esas pequeñas criaturas que utilizaban para comunicarse, un Den Den Mushi, el cual estaba abarrotado de órdenes tan caóticas como el escenario que se había formado en las proximidades; como si de un último aliento se tratara, la seguridad a cargo de la defensiva parecía intentar restaurar el orden de sus integrantes y realinearlos para poder solventar la situación que, en un parpadeo, había presentado más de un contratiempo mayor. Eso es lo que le decía su atención al canal de comunicaciones en uso, pero... Ninguna parecía ir a las figuras desconocidas que habían hecho reciente acto de presencia. ¿Quiénes narices eran? ¿Unos oportunistas, quizá? No, parecían demasiado organizados para ser una simple coincidencia en busca de metafórico oro. 

Pensarlo de más no iba a cambiar nada a estas alturas, era hora de moverse. No sin antes guardar el Den Den, por supuesto.

Lo segundo, un bonus: Golosinas, algo que le provocó un pequeño gruñido en el estomago y un brillo intenso -casi caricaturesco- en su mirada al momento de verlo. El chico siempre había sido de muy buen comer, algo que se mostraba en las energías que exhibía en su día a día; no contaba con una ración propia solo por falta de preparación y una precaria situación económica. Para cuando parpadeó una única vez, las golosinas habían desaparecido de sus manos a cambio de un sutil trazo de chocolate en la comisura de sus labios, que duró tanto o menos que su causa al relamerse en la zona. Buen provecho.

Regresando a la situación, intentar trazar cada movimiento en la escena fue un reto a superar. Ahora sin agua qué contener tras sus puertas, el terreno acuático había pasado a secarse completamente, dejando un considerable espacio donde la maniobrabilidad podía complicarse para quien no fuese lo suficientemente ágil. Claramente excluyendo a los desconocidos, ¿acaso eran de esos ninjas que solo conocía en historias de ficción?

Los artefactos que dos de ellos cargaban en su espalda y colocaban en el centro de las compuertas consiguió llamar su atención al momento como un ave a un objeto brillante, frunciendo su ceño mientras toda clase de posibilidades recorrían su cabeza. La situación ya era lo suficientemente extraña como para añadir dos variables completamente desconocidas, algo que solo se intensificó todavía más cuando los mencionados guardias empezaron a beber una sustancia misteriosa. ¿Qué podía ser eso? ¿Algún tipo de dopaje? Tanto como quisiera arrojarse de cara a intentar su suerte con ellos, sería una movida extremadamente descuidada y suicida. Más por cruzar en medio del campo de batalla que se había formado, y el importante hecho de que dos de ellos parecían haber tomado distancia del resto, sin un objetivo discernible. ¿Qué tramaban? 

Lo mejor por ahora era aprovechar su propia posición ventajosa en medio del sigilo, confiar en sus compañeros que contaban con mas distancia efectiva, y hacer su parte con uno de los que se había movido más cercano a Alistair. Se escabulló como pudo detrás y entre las estructuras de la zona, cerrando distancia como tuviera disponible hasta entrar en rango. 

Una vez consiguiera cerrar la distancia a 10 metros, su diestra desenfundó lentamente su katana para evitar hacer cualquier ruido innecesario, y se abalanzaría sobre el enemigo en un intento de realizar un ataque sorpresa, aprovechando el rápido desplazamiento que su técnica podía ejecutar. Si había suerte, causaría suficiente daño como para preocuparse por uno menos.

Cuchillada
esp201
ESPADACHíN
Ofensiva Activa
Tier 2
24/9/2024
33
Costo de Energía
1
Enfriamiento
Una estocada que el usuario realiza al mismo tiempo que realiza en un solo paso un [Dash] de hasta 8 metros en los que busca ensartar a todo lo que encuentre a su paso con la punta de su arma, llevando consigo a su víctima con un [Empuje] en caso de conectar hasta el final del recorrido del Dash.
Golpe Basico + [FUEx2,2] de [Daño perforante]


Una estocada rápida, dolorosa y efectiva que cargaba la intención de ensartar el acero de su arma de filo sobre el hombro derecho opositor, y todo lo que pudiera ponerse en medio. Sea que la primera ofensiva resultara exitosa o no, removería el arma de la herida -si llegara a clavarse- para luego ejecutar un tajo horizontal de derecha a izquierda dirigida al muslo derecho a la vez que daba un paso hacia atrás, logrando distancia suficiente para defenderse de un posible contraataque, colocando su katana frente a él en vertical y ligeradamente inclinada al frente. Si la primera no colaba, un segundo intento no estaba de más. 

Resumen


Stats con buffs + Resumen técnico Bélico
#26
Percival Höllenstern
-
El amanecer teñía el horizonte con tonos pálidos de azul y gris, mientras los  rayos de sol apenas comenzaban a asomarse sobre Oykot. La luz era tenue, lo justo para delinear las sombras de los edificios altos y las gruesas chimeneas que se alzaban desde la Central Eléctrica, aún envuelta en la penumbra de la madrugada. El agua de la presa, desbordándose sin control, reflectaba esos destellos de luz como si fueran hilos de oro flotando sobre su superficie agitada.

Mi respiración se ralentizó mientras apuntaba, concentrado en la figura que se movía a lo lejos. El guardia, vestido con ese extraño traje de buzo, caminaba distraído por la plataforma. Un paso tras otro, ajeno a la tensión que flotaba en el aire. Mi flecha ya estaba colocada, la cuerda tensa, esperando el momento adecuado.
Sentía el latido constante en mis dedos, el peso del arco equilibrado en mis manos, como si cada músculo de mi cuerpo estuviera perfectamente alineado con el disparo. Los primeros segundos del amanecer siempre habían sido mi mejor aliado: los sonidos apagados, el mundo aún medio dormido, y esa delgada línea entre la luz y la oscuridad que favorecía a los que sabían moverse en las sombras.

Exhalé lentamente, sin prisa. Mi mirada se afiló en su objetivo, el centro de la espalda del guardia, justo entre los omóplatos. No debía haber margen de error, ni ruido que delatara mi posición. No aquí. No con la presa desbordada y la ciudad al borde de un caos inminente. Todo estaba sincronizado, como si el universo mismo sostuviera la respiración conmigo.

Dejé ir la cuerda.

La flecha voló, cortando el aire en un susurro casi imperceptible. Pero no estaba solo en ese disparo. Mientras la flecha cruzaba la distancia, mi boca dejó escapar un silbido grave, bajo y profundo, casi como un lamento que acompañaba el vuelo del proyectil. El sonido se arrastró por el aire, envolviendo el disparo con una melodía oscura, que se fundía con el viento de la mañana.

El guardia no tuvo tiempo de reaccionar. El silbido se extendió, llenando el espacio entre nosotros, y su cuerpo siguió su inercia, ajeno a lo que ya se dirigía hacia él. El amanecer continuaba su lento ascenso, pintando el cielo con un resplandor que parecía ignorar el pequeño acto de violencia que acababa de ocurrir en silencio.

No observé el impacto. No lo necesitaba. El sonido del silbido se desvaneció con la misma rapidez que el guardia desapareció de mi vista. Guardé el arco, con la misma calma con la que había soltado la flecha. El aire frío aún acariciaba mi rostro, con satisfacción y tranquilidad, mientras mis ojos buscaban un nuevo objetivo.

Matemáticas Básicas

Resumen

Virtudes y Defectos y Bónus

Armas e Inventario
#27
Ubben Sangrenegra
Loki
Las agujas lograron su cometido con su usual precisión quirúrgica. La presa, que había estado reteniendo el furioso caudal, comenzó a ceder lentamente bajo la fuerza del agua que, como una bestia liberada, se desbocaba en todas direcciones, retomando su curso natural y ampliando su cauce con el torrente acumulado. El sonido del agua desatándose fue ensordecedor, pero era la señal de que habían logrado su parte de la misión. El bribón de ojos dorados observó su obra con una mezcla de satisfacción y alivio, mientras uno de los hombres armados, que aún sostenía su arma, lo soltaba con torpeza al recibir una de las agujas. El chico de cabellos blancos esbozó una leve sonrisa de confianza al ver que su ataque había sido efectivo, pero aquel breve momento de satisfacción llegó demasiado pronto y se esfumó más rápido aún. Su adversario, herido levemente y desarmado, se abalanzó contra él con intenciones claras de hacerle pagar por su error. Ubben apenas tuvo tiempo de reaccionar cuando la figura del hombre comenzó a cargar hacia él.

En ese instante, la voz de Tofun resonó en sus oídos, pero Ubben, cegado por el peligro inminente, solo pudo gritar —¡Tofun!— con un tono que mezclaba desesperación y confianza en su pequeño aliado. Sin prestar atención a lo que el tontatta le había dicho, Ubben solo esperaba que éste captara la indirecta y acudiera a su rescate. En un movimiento rápido y casi reflejo, el peliblanco metió la mano en su bolsillo, mientras interponía la otra, buscando protegerse del impacto y, con un gesto ágil, arrojó una pequeña bolilla negra al suelo. El artefacto explotó con un fuerte chasquido, liberando una densa cortina de humo gris que rápidamente envolvió a ambos combatientes y oscureció la visión de los presentes [Niebla].

El bribón, aunque acostumbrado a enfrentarse a sus enemigos desde una distancia prudente, sabía que tarde o temprano se vería forzado a luchar cuerpo a cuerpo. No era lo suyo, y lo sabía, pero siempre tenía un par de trucos escondidos para estas situaciones. Con la nube de humo cubriéndolo, tenía una oportunidad de oro. Ya fuese que Tofun lo defendiera o el peliblanco recibiese la patada que buscaba propinar el oponente, el plan de Ubben seguiría a su curso sin alteraciones. Ignorando completamente al hombre que acababa de desarmar con su ataque, deslizó una mano al bolsillo, sacando más senbon, y avanzó conhacia su próximo objetivo, el enemigo 2, que sin perder tiempo, cumplía su trabajo en lo que antes eran las compuertas de la represa.

Ubben frunció el ceño y con su mano izquierda, empuñando un senbon, presionó su propio 2° Punto de Presión Invertido [Pluma de Cuervo], incrementando su propio potencial de ataque. El peliblanco ya en posición, lanzó un senbon hacia el enemigo 2, pero no con la intención de acertar, sino como una finta [Truco de Manos]. Luego, con la misma agilidad, lanzó un segundo senbon finta seguido de dos senbon más en una rápida sucesión, estos últimos sí buscaban golpear al hombre en el 1° Punto de presión [Cuervo Falso] y [Ojo de Cuervo], sin embargo no fue un lanzamiento normal, pronunció exageradamente el angulo de lanzamiento de manera en que se clavasen de la forma más dolorosa posible [Falso Obsequio]. Tras su ataque, el peliblanco retrocedería lentamente, su respiración acelerada mientras sus dorados ojos escaneaban la situación en busca de su diminuto compañero. No podía permitirse quedar solo en ese caos; necesitaba a Tofun para cubrir su espalda. Mientras retrocedía hacia una posición más segura, no pudo evitar procesar rápidamente lo que el tontatta le había dicho antes, en medio de la confusión. Una sonrisa pícara se dibujó en su rostro, ligeramente oculta por la niebla que aún se disipaba.

No nos vendría mal llevarnos un par de esas motos de agua, ¿no?— comentó con tono casual, como si el caos que los rodeaba fuera apenas una molestia pasajera. La idea de aquellas motos era tentadora, un juguete interesante que podría ser útil en más de un sentido. La imagen de ambos escapando sobre las olas a toda velocidad en una de esas máquinas le resultaba casi divertida, pero no podía perder de vista el objetivo.


Resumen
Relevantes
#28
Tofun
El Largo
Aclaración inicial

Actualización



Los expertos me hicieron el caso justo, pero al menos me llevé la impresión de que se quedarían allí metidos sin molestar a nadie. Lo importante era que la parte mecánica de la central estaba a salvo. Salí del lugar tras intentar reventar la manilla interior (para impedir la salida) dejando la parte exterior intacta (para poder abrirles luego). Después me escabullí y me dirigí al escenario principal, donde había comenzado una gran fiesta, inaugurada especialmente para mí por la imponente ruptura de la presa. La fuerza del agua era abrumadora, arrastraba todo a su paso… excepto a la calamidad, Umibozu, y a los experimentados "mercenarios" que habían aparecido para plantarnos cara, enfundados en unos extraños trajes acuáticos.

Algo se escurría entre todo lo que arrastraba el agua. ¿Eran las motos acuáticas? [Vista mejorada]. Mientras oteaba aquello, hacía un escáner completo de lo que me rodeaba; conocer el terreno de combate antes de lanzarse a la acción era clave. Lo había aprendido en mis días de joven ladrón, cuando los golpes rápidos y limpios eran la norma.

Percival encaraba a un enemigo, el novato se enfrentaba a otro, dos enemigos estaban en el suelo llevando a cabo una extraña tarea, y Ubben estaba a la defensiva. Ya había decidido mi movimiento, pero por si fuera poco, Ubben gritó pidiendo mi ayuda. Me había adelantado: iba directo a por ese tipo. Dejé que mi mente se liberara [Inhibición], y salté como un torpedo para interponer mi mano en la patada del enemigo [Enemigo 1], ejecutando de inmediato una llave que lo estamparía contra la pasarela para después tirarle un puñetazo rápido. [Reverso] [El tamaño no importa].

Con ese enemigo derribado, no desperdicié un segundo y me lancé a una endiablada velocidad hacia el nuevo enemigo [Enemigo número 3]. Fui a por él con una serie de golpes rápidos: el primero directo a la cabeza con mi mano izquierda, seguido de dos derechazos en el abdomen, buscando golpearle en el hígado.

[Imagen: Movimiento.png]


Resumen mates

Resumen breve

Técnicas, pasivas y estadísticas
#29
Atlas
Nowhere | Fénix
Mientras todo en el reino de Oykot se encuentra patas arriba, cuando las fuerzas locales se dan cuenta de qué está sucediendo, la situación en la zona donde antes de ubicaba la presa que servía de fuente de energía para la central hidroeléctrica alcanza su punto crítico. El Escuadrón Barracuda, contratado por los poderosos mercaderes locales para asegurar la buena defensa de un punto clave para ellos como la central, parece resultar insuficiente hasta el momento para contener a las liberadores fuerzas de la Revolución.

Umibozu, ya sin agua alrededor pero no con menos ganas de mandar a esa panda de ricachones al fondo del mar —ojalá, ¿verdad?—, contraataca y carga en dirección a esos perros de presa que han enviado para intentar detenerle. Puedes ver cómo los tres ejecutan un veloz movimiento rotatorio con una voltereta en el que buscan alejarse de tu trayectoria y tu área de efecto. Los dos que están a los lados, pese a no conseguirlo del todo, logran evitar buena parte del daño. Sin embargo, quien no tiene tanta suerte es el que se encontraba en una posición central, el que era el principal objetivo de tu carga. A ése te lo llevas por delante, dejándole varios huesos fracturados y en unas condiciones bastante lamentables. En el suelo, si bien no está muerto y se intenta levantar para seguir dándoos guerra, todo indica a que al menos por el momento no se podrá levantar.
Rotación Rápida
ACR301
ACRóBATA
Utilidad Activa
Tier 3
No Aprendida
37
Costo de Energía
2
Enfriamiento
El usuario realizará una voltereta rotando hacia cualquier dirección, en busca de evadir una ofensiva en su contra gracias al rápido y flexible movimiento. Dicho movimiento se realizara con mayores [Reflejos] y el usuario podra desplazarse 15 metros adicionales a su [Movilidad] durante el recorrido de la esquiva, adquiriendo un +4 en su [Tasa de Acierto] para la proxima ofensiva.
+10 [Reflejos]


Quienes no se quedan quietos son los otros dos, que a pesar del daño sufrido están muy dispuestos a continuar dando guerra. Puedes ver cómo, después de aterrizar tras sus respectivas maniobras, rompen a correr hacia ti empuñando sus armas de fuego de un modo un tanto extraño. Cada uno te ataca desde un flanco, golpeando tus patas traseras con la culata de sus armas en primer lugar para, justo después, dar un salto hacia atrás y disparar en dirección a las mismas con intención de entumecerlas.
Lightning Revers
GUN401
GUNKATA
Ofensiva Activa
Tier 4
No Aprendida
43
Costo de Energía
2
Enfriamiento
Empuñando alguna de sus armas de fuego el usuario girara la misma para propinar un poderoso golpe con la culata de su arma al mismo tiempo que realiza un disparo con mucho retroceso para aprovechar este y causar un [Entumecimiento] en la zona afectada por 1 Turno.
Golpe Básico + [FUEx2,4] de [Daño Perforante]


Alistair, parece que finalmente ha llegado tu momento. Habiéndote agenciado tu molusco de confianza y habiendo saciado ese apetito, parece que la zona de la presa se ha vaciado por completo y la situación se ha puesto un tanco complicada, por decirlo suavemente. Tus compañeros parecen estar apañándose la mar de bien. Aun así, resulta evidente que estáis en inferioridad numérica y me parece una excelente idea eso de echarles una mano.

Junto a ti, como dices, hay un enemigo oculto que no te ha visto, pero tú sí que sabes que está ahí. Te mueves con cautela y disimulo, buscando un punto ciego y la distancia idónea desde la que atacarle. Observando la situación desde detrás de una tubería, no percibe tu llegada hasta que ya estás encima de él. Tu filo atraviesa su hombro derecho, tal y como te propones, empujándole y provocando que se choca con la tubería que le servía de parapeto.

No obstante, de cara al segundo movimiento tu enemigo atina a desenvainar su arma e interponer el acero que le da forma entre tu espada y su muslo. Aun así, puedes ver cómo su hombro sangra considerablemente y el golpe con al tubería no le ha sentado del todo bien.

Es en ese momento cuando él decide pasar a la acción. Alzando su arma y moviéndose lateralmente hacia la izquierda, lanza dos disparos en tu dirección antes de, súbitamente, saltar hacia delante —hacia ti—, liberando un nuevo disparo con más potencia que los anteriores.
Shot Fist
GUN301
GUNKATA
Ofensiva Activa
Tier 3
No Aprendida
36
Costo de Energía
2
Enfriamiento
Portando una arma de fuego en su mano el usuario realizará un disparo contra su objetivo. Al tiempo que realiza este movimiento, ejecuta un puñetazo hacía el oponente, incrementando la velocidad y potencia de la bala, que viajará hasta 16 metros adicionales. El disparo gana +5 [Tasa de Acierto].
Golpe Básico + [FUEx2,5] de [Daño Perforante]


Percival, la flecha abandona tu arco en el momento preciso, con la potencia medida y la dirección exacta. Tu silbido la mece y la acuna, guiándola hasta su objetivo y susurrando al oído del pobre buzo una promesa de muerte inminente que nunca llegará a oír. No hay pólvora ni estruendo que delate que el proyectil ha abandonado el arco. Por el contrario, el único sonido que se escucha es el del metal tocando el suelo y un cuerpo desplomándose. La flecha ha atravesado el cuerpo de tu enemigo por completo como si de un cuchillo y mantequilla se tratasen. Él cae fulminado en un charco de sangre, con el gesto plácido de quien ni se ha dado cuenta de qué ha pasado.

En otro orden de cosas, suponiendo que decidas echar un vistacito a tu alrededor desde tu posición privilegiada en las alturas —sobre todo detrás de ti—, podrás comprobar que el resto de integrantes de la Revolución parecen estar haciendo bastante bien su trabajo. El agua liberada de la presa por vosotros parece estar siendo desviada y en vez de discurrir hacia la zona de los balleneros, donde habitualmente iría, ha sido reconducida hacia la región nororiental de Oykot. De momento parece que va todo a pedir de boca, ¿no? Podrías plantearte si esa información es digna de ser compartida con tus compañeros o si alguno de ellos necesita un poco de apoyo aéreo a distancia, pero eso ya como tú veas. También puedes tumbarte un rato a descansar, si quieres.

Tofun, tu aparición estelar detiene la patada que el enemigo había lanzado hacia Ubben mientras el segundo, en una maniobra de distracción con la que busca darle continuidad a sus ágiles movimientos, lanza una bomba de humo justo bajo sus pies. La bomba de humo os envuelve a ambos mientras el lanzador de sembon sale de la zona y continúa con su plan de acción —voy a ir primero con Tofun porque ha interrumpido el ataque a Ubben, para no estar saltando de uno a otro—.

Sea como sea, como te digo, consigues bloquear por completo el ataque del buzo y, más aún, tu mañana logra que caiga al suelo —ya estaba desarmado en este turno—. En consecuencia, quedáis los dos metidos en una densa nube de humo negro liberada por Ubben de la que no tardas en salir, de nuevo, como una exhalación.

Tu siguiente objetivo es uno de los enemigos situados en la presa, al que atacas sin clemencia alguna y sin dar margen de que reaccione. Tu velocidad es tal que, a pesar de tratarse nada más y nada menos que la que lleva la voz cantante dentro del Escuadrón Barracuda, no tiene forma de responder en modo alguno a tu ofensiva. Has conseguido golpearla hasta en tres ocasiones antes de que piense en darse la vuelta siquiera, lanzándola por los aires y arrojándola a la violenta corriente marina que, iracunda, busca a libertad tras abandonar la presa.

Volviendo a Ubben, tus sembon dan de nuevo en el blanco. El otro tipo que se encontraba en la zona de la presa los recibe de pleno, sin posibilidad alguna de responder, y cae a plomo hacia delante, lo que hace sospechar que por el momento no se va a mover de ahí.

Puedes ver como tiemblan un poco en el suelo mientras intenta mover uno de sus brazos, pero se queda quieto acto seguido. Si echar un vistacito alrededor en busca de las motos —como ya os comenté antes—, parecen haber salido de la zona junto al agua desbordada de la presa. En el camino han ido golpeándose entre sí, con las piedras del suelo y con los restos de las compuertas. Actualmente deben estar en algún punto entre donde estáis y el recorrido que viene siguiendo la corriente. El estado no lo sé, pero no creo que estén para muchos trotes, ¿no te parece?

Sea como sea, parece que alguien detrás de ti ha cogido su arma y en cierto modo te había escogido como rival a batir. Es por ello que, desde el suelo, el enemigo que había derribado Tofun apunta como buenamente puede en tu dirección antes de liberar un único disparo con el que pretende cobrarse su venganza. Viene con una trayectoria insólita, que cualquiera calificaría como curva de no ser porque es imposible... ¿o no?
Centrar Tiro
TIR201
TIRADOR
Utilidad Activa
Tier 2
No Aprendida
29
Costo de Energía
1
Enfriamiento
Apuntando con su arma hacia un blanco, centrando su atención y dejando de percibir bien sus alrededores durante la ejecución de esta acción salvo de su objetivo, el usuario centrara su atención completa en su objetivo, logrando encadenar junto a esta técnica alguna acción ofensiva contra su objetivo, adquiriendo su adversario una desventaja de [Reflejos] para reaccionar y la ofensiva tendrá un incremento de daño.
[-5 Reflejos] y +25 de [Daño]

Tiro Imposible
ASA301
ASALTANTE
Ofensiva Activa
Tier 3
No Aprendida
41
Costo de Energía
2
Enfriamiento
La habilidad del usuario con las armas de proyectiles le permite realizar un disparo con una perfecta trayectoria y curvatura que de forma sorpresiva logra rebotar con superficies y objetos, buscando alcanzar a sus objetivos desde ángulos complicados y puntos ciegos, dificultando su reacción, aumentado su alcance hasta 12 metros. Los objetivos de estos disparos verán sus [Reflejos] reducidos en -5 ante esta ofensiva.
Golpe Básico + [DESx2,5] de [Daño perforante]


Off

#30


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