¿Sabías que…?
... existe una tribu Lunarian en una isla del East Blue.
[Aventura] Buscando trufas
Qazan
Qazan
Había llegado por fin esa época en Kilombo, la semana de la truffe dorée.

Durante una semana al año y sin motivo aparente, por toda la isla crecen hongos, setas, trufas y champiñones de todo tipo. Por muchos años los lugareños cuentan la leyenda de la Trufa Dorada, aún sin tener registro alguno de su existencia, todas las personas que saben de esta historia relatan lo mismo, "No existe nada en el mundo que iguale su sabor".

Esta semana está tan arraigada a la cultura popular que de hecho los niños y adolescentes dejan de ir a la escuela y dejan los trabajos familiares para salir en busca de estos alimentos ya que son una buena fuente de ingresos para sus familias. En la taberna de Rostock todos los años se organiza un concurso cuya finalidad es la misma, encontrar esa trufa de la que hablan las leyendas. El premio que ofrecen es una jugosa cantidad de Berries que hace que valga la pena intentarlo... Por otro lado nadie ha ganado nunca esta competición.

Al terminar el concurso, en la taberna se celebrará el Baile del Champiñon, una vieja costumbre que tienen coincidiendo con el final de la semana de la truffe dorée.

Off
#1
Gretta
La Devoramundos
Gretta estaba en la charca de barro que se había hecho en aquella casa que había ocupado junto a su banda; ellos decían que la habían pagado, pero ella no había pagado nada. "¿Estará ya la comida? Desde que volvimos a esta isla después de esa diabólica aventura llena de escaleras, tengo más hambre; comí taaan poco… a quien quieres engañar, antes comías lo mismo". —OUNGH OUNGH— se rio Gretta y entonces, con ese gesto que hacía su nariz al reírse, un olor le llegó de pleno, llenando todo su cuerpo. "¿Qué cojones? Espera, espera, espera, no me jodas, NO PUEDE SER". Gretta se puso de pie de un salto, fue corriendo a la puerta de la casa, se agachó porque no cabía, la abrió de un manotazo casi arrancándola de cuajo y asomó su cara.

—¡TRIUFAS!!!!— gritó Gretta a través del pórtico —¡ADIOS, VOOOOY, NOCHE VUELVO! Y salió corriendo como poseída por un poder indescriptible.

"Trufas, trufas, por fin, cuanto tiempo…, el mejor momento del año y ¿qué setas habrá en esta zona? Champiñones, Níscalos, Boletus, Colmenillas, Shiitake, Angula de campo, Trompetillas, Portobello, Perrechicos... me meo de la emoción" pensaba Gretta siguiendo un olor que entraba por su nariz y la hacía ir como si flotase. Desde que nació, su hocico detectaba muchísimos olores y reaccionaba de mil maneras a ellos, pero pocos le hacían sentir lo mismo que le transmitían las trufas y los hongos. 

Era como si hubiese nacido con un superpoder para encontrarlas. Volvió a coger su mochila y se fue dirección al bosque. Por el camino vio a mucha gente que parecía que se dirigían a hacer lo mismo que ella; puso su oído a trabajar y escuchó como hablaban de un concurso en la taberna, o de una gran trufa dorada que nunca había sido encontrada e incluso de un baile del champiñón. "Estas gentes me caen bien, comparten mi afán por este tan noble arte de la recolección de setas; me arrepiento un poco de haberles destrozado un barco", pensaba Gretta, pero al momento vio a un niño con su familia; iban vestidos con ropas de montaña, las típicas que usaban los recolectores, y se le fue toda muestra de humanidad. "¡Pero eh! ¿Qué cojones piensas? Esas trufas son tuyas y como se acerque alguien le cortas la puta cabeza. ¿Cómo que te caen bien? Al que me quite las setas lo mato." 

—Y tu chiaval, me como a familia si coges trufa diorada eh. Le dijo Gretta al niño que la miraba haciendo un gesto de pegar para asustar al crío.

Entonces apretó el paso en dirección al bosque.
#2
Qazan
Qazan
El niño de la boticaria comenzó a llorar al ver a terrible bestia gigante, del mismo susto dejó caer una pequeña cesta mientras el crío salió corriendo a esconderse bajo las faldas de su madre. Glotilde, la boticaria, habia escuchado hablar anteriormente de "La bestia que tumbó el barco" y no tardó nada en darse cuenta de que Gretta encajaba a la perfección con la descripción de dicha bestia.

Tanto la mujer como su marido e hijo salieron corriendo con dirección al monte alejándose a toda prisa de la cesta del niño. Glotilde y su marido llevan a sus espaldas cada uno una mochila de la cual, gracias a tu gran olfato, sabes que llevan más de estos hongos y setas que tanto te gustan. Sin embargo, gracias a tu gusto precisamente por estos sabes que hacia donde se dirigen no hay manera de que encuentren más de estos.

Puedes seguir a la familia y robarles las mochilas aunque ya gozas de mala fama y un descuido podría suponer que nuevamente la Marina te busque por la isla. Por otro lado la boticaria te puede proveer de un buen alijo de setas sin que tengas que esforzarte demasiado aunquee... Podrías perderte el Baile del Champiñon. ¿DE VERDAD TE VAS A PERDER UNA FIESTA CON COMIDA GRATIS?

A la cesta del crío están empezando a acercarse animalillos salvajes olisqueando, tranquila, tienes suerte de que no les gusten los hongos y simplemente huelan los alrededores.
#3
Gretta
La Devoramundos
El niño comenzó a llorar y Gretta asintió con la cabeza como satisfecha con la reacción. "Exacto, cada uno tiene que saber su lugar: el tuyo, niño, es huir de la gente como yo, y el mío es dejar claro quién manda aquí… Pero bueno, ¿qué es esto que se le ha caído?" Pensaba Gretta mientras se agachaba para coger la cesta que había dejado el niño al salir corriendo. Estaba llena de setas, entonces olfateó en dirección a la familia que huía —OUNGH OUNGH—. Pudo discernir que sus mochilas iban cargadas, pero que en la dirección a donde iban no habría más de estos manjares.

"¿Acaso esa familia me conoce? Parecía que al principio se me habían quedado mirando como si les sonase. A ver si van a ser los padres de Shiro, y les ha contado quién soy porque me va a pedir matrimonio pronto, aunque ¿porque habrían salido corriendo? No tiene sentido, yo soy majisima, se lo habría dicho… Tiene que ser otra cosa. ¿No sería suyo el barco que volqué, no? ¿O algún familiar suyo era alguno de los marines que maté? Con lo bien que iba el día, no quiero unos marines dando por culo, la verdad. Os habéis librado esta vez, pero como os volváis a meter entre las trufas y yo, tendremos problemas". Pensó Gretta, viendo con mirada inquisitiva irse a la familia; al rato ella comenzó a girarse en la otra dirección.

Gretta miró el bosque delante de ella, se paró y meditó un momento la mejor opción. "Con tanta gente, el exterior del bosque tiene que estar esquilmado ya. Tendré que ir bien adentro, a la zona más húmeda para encontrar las mejores, o incluso a la gran trufa esa". Se puso a cuatro patas, con el hocico lo más cerca del suelo, y empezó a olfatear y andar intentando seguir un rastro sólido de trufas, o incluso buscando un olor que no fuese habitual… Si la trufa dorada existía, no podría oler como cualquier otra.

Árboles, plantas, matas, animales, todo era aplastado o apartado de su camino. Ella era como un tren y ese tren solo tenía un propósito, las trufas.
#4
Qazan
Qazan
El estruendo causado en las profundidades del bosque hace que los más jóvenes abandonen la búsqueda de hongos por hoy, asustados, corren la voz de que una bestia está causando estragos en el bosque. Por ahora no ha llegado el rumor a oídos de la marina. Tu imparable avance hace que se mezclen demasiado los olores entre sí, si te quedas observando un momento los brotes de hongos te das cuenta de que aunque los olores te resulten familiares... ¿No los reconoces? 

Lo cierto es que en Kilombo hay una vegetación autóctona propia de la isla, estos champiñones no se pueden encontrar en otro lugar. Setas, champiñones, hongos y trufas de los colores más variopintos que puedas llegar a imaginar. Estoy sorprendido de que no le hayas hincado aún el diente a ninguno con lo llamativos que son. Amarillos, Verdes, Púrpuras, Plateados, blancos con lunares rojos... Sin duda esta isla te ofrece toda una grata experiencia culinaria.

Por desgracia, eres tan bruta que te has cargado los carteles que habían puesto los Marines describiendo algunos de ellos, si te parases a leer algún cartel lo máximo que alcanzarías a leer es "Efectos". Podrías probarlos tú misma, al fin y al cabo, ¿Para qué los estás recogiendo si no?

De pronto un fortísimo viento en contra te hace llegar el delicioso aroma de la sopa que estaban preparando en el centro del pueblo de Rocstock para el Baile del Champiñón. Qué gran problema, tienes tan buen olfato, tan agudo y especializado, que el aroma de la sopa te lo ha saturado. Estos isleños no aprecian el valor de una buena Saetilla Plateada cruda... Antes de que tu olfato empiece a quedar aturdido, captas un olor muy peculiar, a frutas maduras que se entremezcla con notas tostadas y toques a chocolate. Nunca habías olisqueado nada igual. Ese particular aroma parece provenir de algún lugar más allá del bosque.
#5
Gretta
La Devoramundos
Gretta seguía como un elefante en una cacharrería, avanzando por el bosque e intentado discernir un rastro entre toda la gama de olores que había. "Qué cantidad de nuevos olores, por dios… espera, ¿qué es eso?" Se fijó en un grupo de setas con tintes distintos a todo lo que conocía. Nunca había visto unas así. Gretta era lo que la gente normal llamaba un "médico", aunque ella prefería hacerse llamar "la que habla con la pachamama", porque todo lo que sabía sobre medicina y cómo funcionaba un cuerpo, lo había aprendido de la misma naturaleza. La tierra era la que le había enseñado a lo largo de su vida todo lo que sabía.

Así que sabía a ciencia cierta que las setas podrían causar todo tipo de efectos, algunos incluso mortales. "Mierda, he roto el cartel, bueno, que digo, si no se leer". —OUNGH, OUNGH— se rio y al momento buscó si había alguien cerca. "Joder, se han ido todos corriendo, no hay nadie a quien pegar para que me lea esto… bueno, si algo he aprendido en todos estos años, es que las cosas se descubren probando". Gretta, tras esa reflexión, cogió un manojo de las nuevas setas y las olfateó bien bien, esperando sacar, gracias a su instinto, cual de ellas podría tener un riesgo mortal. Una vez descartadas las que ella creía suponer que serían muy peligrosas, se comió el resto.

Nada más hacerlo, otro olor anuló al resto. "Estúpidos pueblerinos, ¿qué hacen haciendo sopa con estos manjares? Las setas se comen vuelta y vuelta en la sartén, con un toque de aceite y un poco de sal. Mira, no bajo a daros de ostias porque… ¿espera que este otro olor?" Pensaba Gretta mientras una nueva fragancia rompía su cerebro, algo ya no solo nuevo, si no magistral.

Gretta giró bruscamente su cuerpo en la dirección de la que provenía este nuevo aroma. "Tiene que ser esto, madre mía, ¡si sabe cómo huele… ay! Shiro, que esta noche me vas a hacer muy feliz", pensaba ella, corriendo en la dirección guiada por su hocico. Y, por ahora, sin saber si lo que había consumido tendría efectos secundarios o no.
#6
Qazan
Qazan
Gretta implacable, avanzaba por el bosque siguiendo el ínfimo rastro que había dejado aquel aroma único. Este avance le llevó a desviarse un poco de las profundidades de la frondosidad del bosque, antes de darse cuenta habría salido de entre los árboles para encontrarse con una explanada gigantesca la cual daba al camino que dirigía al faro de Rostock.

Una nueva brisa te hace llegar nuevamente ese aroma magistral, esos toques de chocolate invadían el hocico de Gretta, de un rápido vistazo, te das cuenta de que proviene precisamente del faro. Sin embargo, de pronto notas que alguien posa su mano sobre ti, una mano pequeña, la de un humano promedio, uno más del montón si lo comparamos con tu propio tamaño, aunque también notas esa mano cálida y familiar.

-Mi amor, es la hora de comer, ven, acabo de terminar de preparar la comida que más te gusta-. Luego de aquellas palabras, reconoces enseguida esa voz. Si te giras podrás ver a Shiro, tu compañero de piratería y amor prohibido dentro de la Banda del Peliblanco. Para tú sorpresa, Shiro te espera desnudo al lado de un campamento donde tiene un fuego encendido y justo acaba de terminar la comida. 

El pirata peliblanco actúa de manera algo peculiar, supongo que es normal teniendo en cuenta que cuando salisteis de aquella mazmorra laberíntica desapareció. 

Nada te asegura que ese increíble rastro vuelva a aparecer, sin embargo, ambos tenéis asuntos pendientes que tratar, ¿Porqué desaparecería sin más? ¿Dónde ha estado estos días?     
#7
Gretta
La Devoramundos
Gretta, a cuatro patas como un animal y con su hocico pegado al suelo siguiendo ese aroma, avanzó arroyando todo a su paso hasta dar con un claro en el bosque; el claro daba a un camino. Gretta lo siguió con la mirada y al fondo vio un faro; el olor parecía provenir de allí. "Qué raro, no recordaba que las trufas creciesen en faros... Espera, a ver si el farero cabrón ha encontrado la trufa antes que yo y la está cocinando. Se va a cagar" Pensó, y al momento, justo cuando estaba a punto de iniciar su camino hacia el faro para destruirlo, pegarle una paliza al farero y coger su trufa, una mano le tocó.

Gretta dio un pequeño brinco del susto: alguien se le había acercado sin que ella se hubiese dado cuenta y ahora la tocaba. Giró su cabeza en dirección al ser, mientras pensaba "Ay mi madre, que va a ser un espíritu del bosque de esos, que yuyu, que yuyu". Cuando por fin vio qué o quién era lo que la tocaba, descubrió que era Shiro. -Joderr que siusto Shiro... Decía Gretta y se le cortaron las palabras al ver que el peliblanco estaba desnudo. Gretta había soñado con esto unas mil quinientas setenta y cuatro veces aproximadamente desde que lo conocía. Pero nunca se había hecho realidad hasta ahora.

Allí estaba delante de ella, el cuerpo de Shiro totalmente desnudo "Si que está fuete el cabrón y menudo miembro gasta, justo como me lo imaginaba" Pensaba Gretta mientras se había quedado paralizada mirándolo, era totalmente como en sus sueños, ella lo había intentado ver desnudo en el barco muchas veces pero nunca lo conseguía, como cuando se intentó asomar por la ventana de su camarote para verlo cambiarse, pero debido a su tamaño, su cabeza tapó toda la luz del sol, haciendo que Shiro se diese cuenta y cerrase desde ese momento con una tela la ventana, o como cuando Shiro se fue a bañarse a un lago, y Gretta lo siguió escondiéndose detrás de un árbol para verlo, pero su cuerpo sobresalía por todo el largo del tronco, por lo cual Shiro la vio y la echó del lugar. Así que solo había podido imaginárselo y ahora lo tenía delante. 

—Mi amor, es la hora de comer, ven, acabo de terminar de preparar la comida que más te gusta. Le dijo Shiro a Gretta. "Un momento, Gretta, piensa por dios, Shiro desapareció después de aquella maldita búsqueda del tesoro; llevas días sin verlo, ni se despidió de ti y ¿ahora aparece desnudo en medio del bosque? ¿Justo cuando te has comido unas trufas antes? ... Está claro lo que está pasando aquí; claramente se ha arrepentido de haberme dejado, ha tenido otra familia todo este tiempo y fue a decirles que los abandonaba para estar conmigo. ¡ESO ES!, Shiro. ¡Yo también te quiero!" —Ya voy, Shiro, espierame. Dijo Gretta mientras se desnudaba e iba en su dirección.
#8
Qazan
Qazan
Tu amor platónico se levanta del tocón donde estaba sentado con la sartén en la mano, ladea un poco la cabeza y te sonríe muy tiernamente. -Te había echado de menos Gretta, toma, te he preparado tu plato favorito-. Dijo el peliblanco mientras te servía en un plato lo que parecía ser la comida que más veces le había pedido Gretta a Shiro que le cocinase. Te hace un gesto con la mano para que te sientes a su lado a comer, mientras tanto, Shiro se levanta un momento y entra en la tienda del campamento, el cual por cierto es aproximadamente del tamaño de una cabaña.

Apenas unos minutos después, Shiro aparece nuevamente y se posa sobre marco de la entrada. -Espero que te esté gustando mi vida... Porque el postre te espera dentro-. Dijo tu cocinero querido mientras guiñaba un ojo y con mucha sutileza pasa su mano por su pelvis, casi rozándose el "faro". Tras aquellas palabras vuelve dentro a esperarte. Ésta podría ser tu gran oportunidad para pasar tiempo de calidad con tu amado, está dispuesto a todo y no hay nadie cerca que pueda escucharnos ni molestaros.

El aroma tan increíble de la trufa está apunto de desaparecer y podría ser la última oportunidad de encontrar la Truffé Dorée, sin embargo parece que ya has decidido un nuevo objetivo. Adelante, lucha por tus sueños y fantasías, persigue tus anhelos, déjate llevar por la lujuriosa Trufa Dorada o sigue tus más bajos deseos carnales. Tú decides que hacer y recuerda, nadie va a juzgarte por ello.
#9
Gretta
La Devoramundos
Shiro estaba en un campamento improvisado. En un fuego preparaba algún tipo de comida, y detrás de él había una cabaña. "¿Cómo ha llegado todo esto aquí? ¿Por eso te fuiste, Shiro? ¿Para prepáranos a los dos una cabaña del amor? Ohhhh. Siempre has sido tan detallista; querías que tuviésemos nuestro nidito del amor, apartado de todo, para que nadie nos molestase… Podrías habérmelo dicho, que mal rato he pasado todos estos días sin ti, sin saber dónde estabas, pero bueno, aquí estás, para resarcirte por todo. Y yo, Shiro, yo te perdono".

Gretta escuchó las palabras de Shiro, y vio cómo este le servía un plato de comida; al verlo vio que era su plato favorito, lentejas con gachas, costillar y setas. "Uffffffff, primero Shiro desnudo, ahora mi plato favorito, ¡doy gracias por haberme levantado hoy!" Shiro, tras darle el plato, se fue a la cabaña y girándose ante la puerta hacia Gretta dijo que había un postre dentro de esta. "¿Postre? Shiro, ahora no quiero ningún postre, te quiero a ti… ¿Se acaba de rozar el falo? Vale, vale, vale, Gretta, eres imbécil, él, él es el postre, sexo y comida, un sueño más que tachar de la lista…" Pero Gretta se quedó parada un momento ante toda la situación.

A ella le estaba empezando a extrañar todo esto. "Vale, esto está siendo raro ya. En realidad, ¿estoy siendo cegada por mis ganas de follar con Shiro y de comer? ¿Las setas de antes me están produciendo estas alucinaciones? O ¿es todo real y Shiro ha vuelto para cumplir mi deseo más ferviente?… Gretta, la respuesta está clarísima… Todo esto es real y si no lo es, me la pela, voy a provechar esto al máximo". Reflexionó y se acercó a Shiro.

—Estiaba buscando trufa doriada eh, pero aquí tengo mejor trufón. Dijo Gretta, agarrando con la mano toda la ingle de la alucinación de Shiro y metiéndose con él dentro de la cabaña.
#10


Salto de foro:


Usuarios navegando en este tema: 12 invitado(s)