Sowon
Luna Sangrienta
20-12-2024, 09:17 PM
Vaya caído se había dado al intentar dejar un mensaje, aunque su orgullo de mercenaria saldría algo magullado no había tropezón que no fuese caída, o caída que no fuese tropezón. Lo que la Oni había sentido es que había dado una buena advertencia a su alrededor y ahora podría enfocarse en proteger a la carreta sin tener que molestarse por las hormigas que seguramente intentarían algo o habrían intentado dejarle en aquel lugar lleno de humo para atacar la carreta. Se apoyó en la misma mientras se concentraba para usar su percepción y localizar las probables auras de sus enemigos, la idea era sencilla, tener una idea de su situación y no moverse de la seguridad de la carreta la cual era lo más valioso que los comerciantes querían recuperar. Quizás no lograse atrapar o despedazar a los bandidos pero dudaba que tras haber rozado el filo de la muerte volviesen a intentar robar por esos lugares, el cabecilla se habrá llevado el susto de su vida y lo había visto en sus ojos cuando su espada por poco le parte a la mitad. Pero ahora, había que centrar la mirada en el horizonte o al menos en el humo, concentró sus sentidos tomando con firmeza la espada al levantarse y colocando ambas manos en la empuñadura, para demostrar una elegante pero desafiante postura junto a una sonrisa, el barro la suciedad apenas había alterado su carisma.
― Oigan, comerciantes, no se preocupen me contrataron para que lleguen a salvo. Me disculpo por la estruendosa llegada pero creo que les he dado un buen susto. ¡Bwahahaha! Avanzaremos despacio una salgamos de esta neblina podremos continuar. Si se acercan a mi rango los voy a repeler y además, si los tontos intentan dañarnos puedo tomar medidas mucho más dolorosas. ¡Están advertidos! Esta carreta está protegida por Sowon Shinozaki, orgullosa Oni descendiente del clan mercenario de mayor prestigio en mi natal Onigashima. ¡Entreguen sus armas o salgan del camino si no quieren sentir la caricia de mi acero! ―
Advirtió utilizando un tajo horizontal frente a ella con dos intenciones, una era intentar con el potente corte despejar el área circundante a la carreta y la otra era claramente enviar una advertencia si todo lo anterior no había bastado. El corte era rápido, letal e incluso más fuerte que el anterior, la gigantesca mujer lejos de parecer agotada o humillada por su caída se había levantado con incluso más poder que anteriormente y dejaba en claro que no estaba de broma. Si bien se estaba dedicando a la protección y custodia del elemento principal, no escatimaría en recursos a la hora de defenderlo o defenderse a sí misma. Los bandidos podrían salir corriendo, con los bolsillos vacíos y el orgullo magullado pero vivos o intentar cruzar el rango de la espada de la Oni quien pese a estar cegada parecía conocer los puntos cercanos al girar la cabeza en algunas direcciones antes de que algún ruido llegase.
― Iniciemos con esto, tengan cuidado, puede que haya troncos delante pero los puedo cortar sin problemas. No creo que puedan atreverse a atacar, pero no bajen la guardia. Están a salvo mientras nos mantengamos cerca. ―
La mujer indicó con una sonrisa mientras se apoyaba en la carreta para no perderla de vista, si bien podía ver el aura era mucho más seguro mantenerse lo más pegada a la misma, su mera presencia pondría de manifiesto a los bandidos que no había opción era enfrentar a la muerte o dejarlo ya que la advertencia había subido mucho su nivel. A lo mejor los anteriores resultaban personas de doble moral sobornados, otros podían ser aventureros novatos pero esa gigantesca mujer estaba hecha de otra pasta y apenas se dignaría a cruzar palabras con ellos si no se retiraban o entregaban por las buenas. Ya había utilizado un poderoso ataque como presentación y a juzgar por su actitud no era ni de cerca lo mejor que podría utilizar. Como un fiel escudo defensor, la mujer exploraba el terreno con la espada, apartaba los troncos y luego se colocaba a un costado, manteniendo una marcha cuidadosa y nunca dejando que la carreta se adelantase más que el rango máximo de sus cortes, era como tener a un escudo personal guiando el camino de un ciego. Como si fuese el perro que cuidaba la cabaña de un viejo, aquel que era manso y adorable pero no tenía remordimientos a la hora de enseñar los colmillos al peligro.
― Oigan, comerciantes, no se preocupen me contrataron para que lleguen a salvo. Me disculpo por la estruendosa llegada pero creo que les he dado un buen susto. ¡Bwahahaha! Avanzaremos despacio una salgamos de esta neblina podremos continuar. Si se acercan a mi rango los voy a repeler y además, si los tontos intentan dañarnos puedo tomar medidas mucho más dolorosas. ¡Están advertidos! Esta carreta está protegida por Sowon Shinozaki, orgullosa Oni descendiente del clan mercenario de mayor prestigio en mi natal Onigashima. ¡Entreguen sus armas o salgan del camino si no quieren sentir la caricia de mi acero! ―
Advirtió utilizando un tajo horizontal frente a ella con dos intenciones, una era intentar con el potente corte despejar el área circundante a la carreta y la otra era claramente enviar una advertencia si todo lo anterior no había bastado. El corte era rápido, letal e incluso más fuerte que el anterior, la gigantesca mujer lejos de parecer agotada o humillada por su caída se había levantado con incluso más poder que anteriormente y dejaba en claro que no estaba de broma. Si bien se estaba dedicando a la protección y custodia del elemento principal, no escatimaría en recursos a la hora de defenderlo o defenderse a sí misma. Los bandidos podrían salir corriendo, con los bolsillos vacíos y el orgullo magullado pero vivos o intentar cruzar el rango de la espada de la Oni quien pese a estar cegada parecía conocer los puntos cercanos al girar la cabeza en algunas direcciones antes de que algún ruido llegase.
KENB401
KENBUNSHOKU
Haki básico
Tier 4
No Aprendida
7
2
Permite al usuario percibir con precisión la presencia de otros seres vivos en un área, siendo capaz de apreciar las emociones muy fuertes que exterioricen como un sufrimiento fuerte o un gran instinto asesino, etc. Si lo activa puede anticiparse a un ataque obteniendo para ello un bono de +5 [Reflejos].
Área: [VOLx12] metros. +5 [REF]
― Iniciemos con esto, tengan cuidado, puede que haya troncos delante pero los puedo cortar sin problemas. No creo que puedan atreverse a atacar, pero no bajen la guardia. Están a salvo mientras nos mantengamos cerca. ―
La mujer indicó con una sonrisa mientras se apoyaba en la carreta para no perderla de vista, si bien podía ver el aura era mucho más seguro mantenerse lo más pegada a la misma, su mera presencia pondría de manifiesto a los bandidos que no había opción era enfrentar a la muerte o dejarlo ya que la advertencia había subido mucho su nivel. A lo mejor los anteriores resultaban personas de doble moral sobornados, otros podían ser aventureros novatos pero esa gigantesca mujer estaba hecha de otra pasta y apenas se dignaría a cruzar palabras con ellos si no se retiraban o entregaban por las buenas. Ya había utilizado un poderoso ataque como presentación y a juzgar por su actitud no era ni de cerca lo mejor que podría utilizar. Como un fiel escudo defensor, la mujer exploraba el terreno con la espada, apartaba los troncos y luego se colocaba a un costado, manteniendo una marcha cuidadosa y nunca dejando que la carreta se adelantase más que el rango máximo de sus cortes, era como tener a un escudo personal guiando el camino de un ciego. Como si fuese el perro que cuidaba la cabaña de un viejo, aquel que era manso y adorable pero no tenía remordimientos a la hora de enseñar los colmillos al peligro.