Sasurai
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30-12-2024, 02:31 PM
Viendo que quizá podían entenderse después de todo, y que no parecía haberse metido en peligro, o al menos no de manera inmediata, Sasurai empezó a relajarse un poco. El tal Pájaro Negro parecía sincero, pese a que obviamente parte de su presencia fuese un personaje que interpretaba, y también parecía dispuesto a negociar o adaptarse a lo que el pelirrojo estuviese dispuesto a ofrecer. Si eso era señal de inteligencia o de desesperación era difícil de evaluar en ese punto, pero con la información que tenía hasta ahora valía la pena al menos seguir escuchando.
El músico iría asintiendo y escuchando a su interlocutor, tomando nota mental de los detalles que le parecían interesantes. Era la segunda vez que mencionaba que Umibozu no confiaba fácilmente, y de una forma que daba a entender que esa confianza le abría puertas. ¿Significaba eso que el wotan era alguien importante en la organización? ¿Un pez gordo? En esa reflexión no podría evitar esbozar una sonrisa, pensando que debía recordar la broma para cuando lo viese. Por el momento, no obstante, no había tiempo para bromas ni comentarios, pues el hombre del pelo gris seguía hablando, y se acercaba a la parte interesante, donde le explicaba qué querían de él.
A priori no sonaba mal. Su habilidad e ingenio estaban habitualmente desperdiciados en cualquier tontería que se le ocurriese para sacar unas monedas o conseguir comida, así que tal vez era el momento de darles mejor uso. Lo del valor sonaba una vez más a ponerse en peligro y acabar muerto, pero bueno, tampoco hacía falta quedarse trabado en los detalles. Estas reflexiones estaban a punto de dar igual, ya que la conversación iba a dar un giro hacia los Pulpos Gigantes. ¿Cómo iba a rechazar una oportunidad de involucrarse en eso? Sonaba más interesante que nada de lo que había hecho en su vida, y además al parecer implicaba seguir viajando con Umibozu y compañía.
Ocultando el hecho de que estaba ya más que convencido para participar, el bardo se desperezaría teatralmente, poniendo los codos en la mesa y echando el cuerpo hacia adelante, esbozando una sonrisa. Durante el discurso se le habían acabado los cacahuetes, así que era el momento del plato principal, que además llevaba pidiendo desde que había llegado.
- Todo lo que comentas suena interesante, pero nunca tomo decisiones con el estómago vacío. ¿Qué tiene que hacer uno para que le den algo de comer aquí? - Diría esto y haría una pausa, mirando alrededor, como esperando a que llegase la comida.
- Si hace falta puedo pagar... creo. - Añadiría mientras empezaba a palparse los bolsillos de la chaqueta y el pantalón en busca de algunas monedas.
En lo que a él respectaba el trato estaba prácticamente cerrado, sobretodo porque por el momento solo requería viajar gratis, acompañar a gente a la que pensaba acompañar de todos modos, y visitar nuevos lugares donde con suerte habría comida interesante. No obstante, lo tenían claro si creían que se iba a marchar sin comer algo caliente después de haber venido hasta el dichoso bar, así que por ahora iba a alargar la "negociación" un poco más.
Posts sin comer: 0/5 (en este post seguía comiendo cacahuetes del post anterior)