Henry
Tigre Rojo de la Marina
04-01-2025, 07:27 AM
Lukas nos cubría desde una posición elevada, asegurándose de que ninguno otro enemigo nos pusiera las cosas más difícil de lo que ya había sido. El recorrido hacia la base había sido uno de mucha tensión en incertidumbre en el cual no se sabía si Ben y aquél pirata sobrevivirían o si tan siquiera lo llegarían vivos a la base. Era una situación altamente complicada en la que cualquier cosa podría suceder, ambos marine, Elena Y Henry sabían que el tiempo premiaba, apurando su paso. Mientras corría a la base Henry se da cuenta de algo, su Den Den Mushi había cerrado los ojos, cosa que era bastante raro aún no lo suficiente como para parar por ello.
Dejando el problema del Den Den Mushi para luego el grupo de marines estaba más preocupado por la salud de su compañero Ben, el cual había sufrido quemaduras y un disparo, lo que le ponía en gran peligro. Este también parecía jadear del dolor lo que no paraba de poner a los demás en alerta, preocupados por su estado de salud. Antes de poder llegar a la base Henry decidió llamar a Kuda por una última vez, a lo que este respondió de vuelta aceptando la misión de patrullar las aguas en busca de un hipotético escape pirata.
Al llegar al G-39 se podía escuchar el ruido de los preparativos, viéndose a varios marines reforzar las defensas de la base mientras que en la entrada esperaba una línea de doctores. Ver aquella escena era un tremendo alivio para Henry y el resto, pues siempre había tiempo para admirar la capacidad de movilización que tenía un organismo como lo era la marina. Aparentemente el operativo de rescate de los heridos de la explosión había puesto a los doctores en alerta, los cuales parecían estar al cien por ciento listos para asistir a quién sea.
Al adentrarse a la base los médicos tomaron a los heridos, llevándoselos para poder atenderlos de mejor manera. El peso de la situación seguía siendo bastante pesado, aunque el haber "rescatado" a Ben y haberlo traído a la base era algo digno de una medalla. Aún quedaba saber si sobreviviría o no, lo que llenaba a todos en aquél lugar de nervios. Henry en especial se sentía culpable por haberle hecho aquellas quemaduras, castigandose mentalmente por no haber actuado de otra forma.
De la nada Murray salía de una sala con una cara de alivio y preocupación, brindándole a Henry un gran abrazo con un buen golpe a la espalda, lo que le dejaría marca por unos buenos días. El sargento Murray se mostraba totalmente agradecido con el suboficial Henry al este haber tenido éxito en lo que Murray había fallado, aunque era este último el que recibiría un buen castigo si fallaba el operativo.
"¡Lo lograste, Henry! ¡Lo lograste!" Estas eran las palabras de un sentimental Murray a su salvador del momento. Otros marines se agrupaban alrededor felicitando al suboficial Henry, aunque la pequeña celebración no duró mucho, pues el Den Den Mushi de Henry volvió a sonar, se trataba de Kuda. El alférez Kuda reportaba que no había encontrado a otro barco que no sea al de uno mercante con 3 tipos.
La situación era seria y los demás alrededor de Henry se daban cuenta de esto. Actualmente los piratas se encontraban sin un rehén importante como lo era Ben pero aún eran peligrosos y debían de ser llevados a la justicia. Ante esto Henry se gira a su sargento, pidiendo que esta vez le haga caso. — Sargento Murray, debemos de poner barcos a patrullar las aguas de inmediato y enviar pelotones en busca del refugio de estos piratas, ahora que no tienen a Ben no tendremos problema desplegando nuestras fuerzas. Yo mismo me ofrezco a dirigir un grupo de captura si es necesario. —
El joven marine se paraba firmemente delante de su sargento, pidiendo ser usado nuevamente en contra de esos piratas. — Pese a nuestras bajas estos piratas han sufrido casi la misma cantidad de bajas en el asalto al faro de Rostock, si les demostramos que están rodeados podemos conseguir una rendición de su parte. —
Dejando el problema del Den Den Mushi para luego el grupo de marines estaba más preocupado por la salud de su compañero Ben, el cual había sufrido quemaduras y un disparo, lo que le ponía en gran peligro. Este también parecía jadear del dolor lo que no paraba de poner a los demás en alerta, preocupados por su estado de salud. Antes de poder llegar a la base Henry decidió llamar a Kuda por una última vez, a lo que este respondió de vuelta aceptando la misión de patrullar las aguas en busca de un hipotético escape pirata.
Al llegar al G-39 se podía escuchar el ruido de los preparativos, viéndose a varios marines reforzar las defensas de la base mientras que en la entrada esperaba una línea de doctores. Ver aquella escena era un tremendo alivio para Henry y el resto, pues siempre había tiempo para admirar la capacidad de movilización que tenía un organismo como lo era la marina. Aparentemente el operativo de rescate de los heridos de la explosión había puesto a los doctores en alerta, los cuales parecían estar al cien por ciento listos para asistir a quién sea.
Al adentrarse a la base los médicos tomaron a los heridos, llevándoselos para poder atenderlos de mejor manera. El peso de la situación seguía siendo bastante pesado, aunque el haber "rescatado" a Ben y haberlo traído a la base era algo digno de una medalla. Aún quedaba saber si sobreviviría o no, lo que llenaba a todos en aquél lugar de nervios. Henry en especial se sentía culpable por haberle hecho aquellas quemaduras, castigandose mentalmente por no haber actuado de otra forma.
De la nada Murray salía de una sala con una cara de alivio y preocupación, brindándole a Henry un gran abrazo con un buen golpe a la espalda, lo que le dejaría marca por unos buenos días. El sargento Murray se mostraba totalmente agradecido con el suboficial Henry al este haber tenido éxito en lo que Murray había fallado, aunque era este último el que recibiría un buen castigo si fallaba el operativo.
"¡Lo lograste, Henry! ¡Lo lograste!" Estas eran las palabras de un sentimental Murray a su salvador del momento. Otros marines se agrupaban alrededor felicitando al suboficial Henry, aunque la pequeña celebración no duró mucho, pues el Den Den Mushi de Henry volvió a sonar, se trataba de Kuda. El alférez Kuda reportaba que no había encontrado a otro barco que no sea al de uno mercante con 3 tipos.
La situación era seria y los demás alrededor de Henry se daban cuenta de esto. Actualmente los piratas se encontraban sin un rehén importante como lo era Ben pero aún eran peligrosos y debían de ser llevados a la justicia. Ante esto Henry se gira a su sargento, pidiendo que esta vez le haga caso. — Sargento Murray, debemos de poner barcos a patrullar las aguas de inmediato y enviar pelotones en busca del refugio de estos piratas, ahora que no tienen a Ben no tendremos problema desplegando nuestras fuerzas. Yo mismo me ofrezco a dirigir un grupo de captura si es necesario. —
El joven marine se paraba firmemente delante de su sargento, pidiendo ser usado nuevamente en contra de esos piratas. — Pese a nuestras bajas estos piratas han sufrido casi la misma cantidad de bajas en el asalto al faro de Rostock, si les demostramos que están rodeados podemos conseguir una rendición de su parte. —