
Fon Due
Dancing Dragon
09-01-2025, 01:51 PM
El calor que hacía era insoportable, incluso considerando que estamos en un desierto no era normal este calor el cual empezaba a hacer merma en mis fuerzas. Ni siquiera una pastilla de menta podría refrescarme lo suficiente contra este calor tan asfixiante. No obstante, igualmente era buena oportunidad para tomar una así que, sacando un pequeño frasco de un bolsillo interno de mis pantalones, cogí una de las patillas que en este había y me la metí a la boca.
Ah, la menta, que maravilla. Quizás no ayudaba a combatir el calor, pero igual me mantenía mentalmente cuerdo ante situaciones así de extremas, así que en algo ayuda. No quisiera empezar a delirar sobre la cabeza de Lykos, o desnudarme e intentar montar al pobre de Axew, ya la había liado muchas veces así en mi adolescencia allá en los bosques de Green Bit, mi aldea natal.
Después de un tiempo de seguir en este agobiante éxodo, por fin llegamos a visualizar algo diferente a la arena. Un laberinto de piedra se extendía a nuestros pies el cual bifurcaba en dos rutas. Por suerte contamos con el apoyo aéreo de Sol y Luna quienes nos ayudaron a decidir el camino a seguir.
Aunque estrecho para la mayoría (ya tendría que ser la guarida de un ratón para ser estrecho para mi), el camino elegido conducía a una salida visible para los hermanos alados y, mejor aún, pudieron confirmar presencia de humo siguiendo la ruta de este camino estrecho, ¿sería esto prueba de que estábamos cerca de dar con nuestra presa?
Tanto Lykos como Eve coincidieron en lo que ya yo imaginaba dirían, en caso de tener que pelear en estas condiciones tendría cierta ventaja para moverme comparado con los demás, por lo que asentí con la cabeza estando aun estando montado en la cabeza de Lykos.
“Adelante entonces, si alguien es tan valiente como para emboscarnos aquí se enfrentará a la furia del dragón, hmm.” – dije levantando los puños los cuales brillaban debido al reflejo del sol sobre las nudilleras que llevaba puestas.
Ah, la menta, que maravilla. Quizás no ayudaba a combatir el calor, pero igual me mantenía mentalmente cuerdo ante situaciones así de extremas, así que en algo ayuda. No quisiera empezar a delirar sobre la cabeza de Lykos, o desnudarme e intentar montar al pobre de Axew, ya la había liado muchas veces así en mi adolescencia allá en los bosques de Green Bit, mi aldea natal.
Después de un tiempo de seguir en este agobiante éxodo, por fin llegamos a visualizar algo diferente a la arena. Un laberinto de piedra se extendía a nuestros pies el cual bifurcaba en dos rutas. Por suerte contamos con el apoyo aéreo de Sol y Luna quienes nos ayudaron a decidir el camino a seguir.
Aunque estrecho para la mayoría (ya tendría que ser la guarida de un ratón para ser estrecho para mi), el camino elegido conducía a una salida visible para los hermanos alados y, mejor aún, pudieron confirmar presencia de humo siguiendo la ruta de este camino estrecho, ¿sería esto prueba de que estábamos cerca de dar con nuestra presa?
Tanto Lykos como Eve coincidieron en lo que ya yo imaginaba dirían, en caso de tener que pelear en estas condiciones tendría cierta ventaja para moverme comparado con los demás, por lo que asentí con la cabeza estando aun estando montado en la cabeza de Lykos.
“Adelante entonces, si alguien es tan valiente como para emboscarnos aquí se enfrentará a la furia del dragón, hmm.” – dije levantando los puños los cuales brillaban debido al reflejo del sol sobre las nudilleras que llevaba puestas.