Rengetsu D. Tenji
Príncipe Ciego
10-08-2024, 04:13 PM
Era media noche, el grupo de tres amigos dormía profundamente aquella noche, era un sueño profundo de esos que te hacen levantarte del tirón al día siguiente sin haberte enterado de nada, como si ha explotado la cocina del barco, tu tan pancho roncando. Esto era así para todos menos para el pequeño suricato Jimbo, el cual se despertó a media noche como por instinto o alerta, al fin y al cabo su especie suele permanecer muy vigilante y atenta, al provenir en entornos hostiles donde pueden ser fácilmente presas, genes claramente heredados de su madre.
Una gran luna llena brillaba en el cielo iluminando con su tenue luz la noche dando un brillo particular a las olas. Esa luna era hermosa, grande y brillante, dentro del pequeño ser se podía hacer presente un instinto relacionado con la misma, aunque no se manifestara por completo, hacia gala de sus instintos más primitivos y lo buscaba atraer. Tal vez era ese el motivo por el que se despertó el pequeño mink mientras sus compañeros dormían plácidamente.
El mar estaba en calma y no se apreciaba aun el destino aparente que buscaban seguir los tres viajeros en busca de aquellas misteriosas coordenadas. Una noche con el océano sereno y nada en el horizonte. Aunque no... Si se podía llegar a apreciar algo no muy lejos, era difícil fijarse en ello dado que apenas era un pequeño islote con una roca grande en él, alzándose en todo el centro una única y gran palmera, pero solo una, un trozo de tierra que apenas debía tener diez metros de radio alrededor de la palmera ocupado en su mitad por una roca que se alzaba desde el centro haciendo un mini acantilado de un par de metros de altura y una playa modesta en la otra esquina.
Ese pequeño islote tal vez era un buen lugar en el que pasar la noche para que la barca no quedara a la derriba demasiado o igual había algo de interés allí. Pero fuera cual fuera el caso lo cierto es que en cuanto el suricato se diera cuenta una especie de proyectil esférico saldría de la misma casi alcanzando el bote por poco, impactando en el agua como una bala de cañón con no mucha potencia pero la suficiente para fastidiar la barca si daba de lleno alguna. ¿Qué seria eso?
Una gran luna llena brillaba en el cielo iluminando con su tenue luz la noche dando un brillo particular a las olas. Esa luna era hermosa, grande y brillante, dentro del pequeño ser se podía hacer presente un instinto relacionado con la misma, aunque no se manifestara por completo, hacia gala de sus instintos más primitivos y lo buscaba atraer. Tal vez era ese el motivo por el que se despertó el pequeño mink mientras sus compañeros dormían plácidamente.
El mar estaba en calma y no se apreciaba aun el destino aparente que buscaban seguir los tres viajeros en busca de aquellas misteriosas coordenadas. Una noche con el océano sereno y nada en el horizonte. Aunque no... Si se podía llegar a apreciar algo no muy lejos, era difícil fijarse en ello dado que apenas era un pequeño islote con una roca grande en él, alzándose en todo el centro una única y gran palmera, pero solo una, un trozo de tierra que apenas debía tener diez metros de radio alrededor de la palmera ocupado en su mitad por una roca que se alzaba desde el centro haciendo un mini acantilado de un par de metros de altura y una playa modesta en la otra esquina.
Ese pequeño islote tal vez era un buen lugar en el que pasar la noche para que la barca no quedara a la derriba demasiado o igual había algo de interés allí. Pero fuera cual fuera el caso lo cierto es que en cuanto el suricato se diera cuenta una especie de proyectil esférico saldría de la misma casi alcanzando el bote por poco, impactando en el agua como una bala de cañón con no mucha potencia pero la suficiente para fastidiar la barca si daba de lleno alguna. ¿Qué seria eso?