¿Sabías que…?
... Si haces click 321 veces en la siguiente palabra: Mandarina. ¿Ganarás 500 berries? No nos hacemos responsables de quien lo intente.
Tema cerrado 
[Aventura] [T2] Hormonas descontroladas
Shaelia D. Flamme
La Salamandra
Llegar a la fiesta ha sido prácticamente un paseo. Incluso aunque me hubiera olvidado de las indicaciones de las viejas, cuando veía a un tío o a una tía especialmente bien vestidos, sabía que se dirigían al mismo sitio que yo y que solo necesitaría seguirles en caso de perderme. Pero eso ni siquiera ocurrió. Ante la mansión han desplegado una laaaarga alfombra roja, que está un poco sucia, pero mira, estando en la isla en la que estamos, ya demasiado me parece, la verdad.

Y... cómo no, hay seguridad en la puerta. A todo esto, ni siquiera de qué va la fiesta, y es ese misterio el que lo vuelve todo más emocionante, más divertido. Pero si tengo que esperar... la verdad es que la diversión se convierte en coñazo muy rápidamente. La cola es larguísima, así que tengo tiempo para analizar visualmente a la peña que se dirige a la fiesta. Sí... hay tías que van monas... pero demasiado ceñidas, ¡eso no tiene nada de clase! Mi corsé negro también es ceñido, pero a diferencia de ellas, añade un toque clásico al conjunto que no entenderíais. Miro hacia delante, miro hacia atrás. Soy la más guapa de la cola, está claro, no hay duda, mi collar de perlitas reluce con cada uno de mis movimientos y soy consciente de que nadie brilla más que yo. Y claro, los demás también se dan cuenta.

Uno de los de seguridad, que es incluso más grande que yo, me mira de arriba abajo y resulta tan evidente que me doy cuenta, un análisis completo antes de guiñarme un ojo. ¿Qué le pasa? ¿Le pica o algo? ¿Le ha entrado alguna mierda dentro? Aaah, no, espera, creo que es un ritual de seducción humano o alguna mierda así, alguna que otra vez lo he visto hacer, pero me resulta tan extraño que ya ni me acordaba del todo. Es que los humanos ligan de una manera muy rara. ¿Qué demuestra un guiño? ¿Que eres capaz de desincronizar uno de tus músculos? Si de verdad quieres conquistar a alguien tienes que, no sé, ofrecerle a tu amada la armadura con la que derrotaste a tu enemigo en un duelo a muerte. Eso sí que es romántico.

Pero entonces veo que también me hace un gestito con la mano, para que me acerque, así que con curiosidad le hago caso, todo menos tener que esperar en esa cola infinita. Antes de que sea capaz de decir nada, el tío se quita las gafas de sol y me mira con ojos serios, y un tono que acompañaba la misma mirada. Y seguro que mi mirada, en cambio, debía ser un cuadro. ¿Qué dice de qué? ¿De actuación de qué? Uy, creo que me han confundido con otra, pero... — ¡Claro que era una broma! ¿No me conocéis o qué? — Le sigo el rollo, qué coño. ¡Tengo un puto camerino! ¡Soy una estrella! Me señala el camino, pero antes de irme, le devuelvo el guiño del ojo en un gesto un pelín exagerado. — ¡Gracias, guapo! — No sé quién cojones se cree que soy, pero me la suda, me dirigo al camino que me ha indicado y busco el camerino que me ha dicho. Menos mal que solo es el segundo, porque no sé contar mucho más allá y porque tampoco sé leer, já, no entiendo lo que pone en el cartel, pero ha dicho que es el segundo a la derecha así que... entro, con toda la confianza del mundo.

El camerino es una FANTASÍA. ¿¡Hola!? ¡Está lleno de... cosas brillantes! Ropa por todos lados, abrigos de plumas, bufandas de plumas, pulseras con plumas... ¡Tacones con plumas! Enfrente está el espejo, rodeado de bombillitas blancas y con una foto colgando que supongo que es la tía con la que me han confundido. Me paro después de flipar en colores para ver bien a esa tipa, y a ver, lo cierto es que nos damos un aire... también es una oni, tiene el pelo corto, y... unos pedazo de melones que se escapan de toda lógica anatómica. ¿Cómo puede moverse con eso? Bajo la mirada, observando mi propio escote que ahora mismo parece el pecho de un bebé en comparación. Vaya bajona... ¡No, de bajona nada! Espabila Shaelia, ¡eres mucho más guapa que ella! De cara, al menos...

La puerta se abre de repente y entra un TÍO. Me giro rápidamente y estoy a punto de cantarle las cuarenta, ¿qué confianzas son esas? ¡Podía haberme pillado en bragas! Pero él habla antes que yo, y va tan elegante que intuyo que gritarle no sería una opción muy buena. Aunque... soy una estrella, y las estrellas hacen eso, ¿no? La lían por cualquier cosa, gritan, se ponen insoportables, pero luego salen al escenario y son encantadoras y maravillosas. Así que diez minutos para prepararme. Uf, hay tanto donde elegir, ojalá tuviera un poco más de tiempo, pero la verdad es que lo que más me preocupa es eso de la "actuación". ¿Qué actuación se supone que tengo que hacer, exactamente? Igual puedo sacarle algo de info al pringao este. — ¿Te puedes dar la vuelta mientras me cambio o te vas a quedar mirando? — Tenía que ser formal, pero un poco insoportable, como eran las famosas. Esperando que me hubiera hecho caso, comienzo a rebuscar entre aquel mar de plumas, pero aprovecho que el tío sigue ahí para preguntarle un par de cositas. — Sí, sí, quiero ver las demás actuaciones. — Eso me daría algo de contexto sobre la fiesta, supongo. — He tenido un día... ocupadísimo, ¿me recuerdas que actuación tenía que hacer? — La excusa parece lógica, las tías como yo no parábamos en todo el día y a veces se nos iba el santo al cielo. Y ese tío parece que me conoce, ¿no? Está claro que no voy a saber hacerlo como esa tal SHEILA, que por cierto, vaya nombre de mierda, pero lo haré a mi manera y seguro que MUCHO mejor. Estoy dispuesta a ir hasta el final.

He de decir que podría ser el mejor día de mi vida. Todos los vestidos son preciosos, y aunque me encantaba el vestido que había mangado de la tienda, creo que no puedo dejar pasar esta oportunidad. El nuevo vestido es negro completamente, con escote de corazón y un corsé que termina con una falda corta de volantes. Llevo las piernas al descubierto, terminando con un par de taconcitos del mismo color y con perlas, ¿se nota que me gustan las perlas? Pero lo mejor, lo mejor, es el abrigo que llevo por encima. Es como... una capa, ¡toda de plumas rosas! Combina con mi pelo, combina con mi piel, combina con el vestido... ¡Es perfecto! Y larguísimo, tanto que incluso arrastra por el suelo, pero supongo que esa es la intención. Por supuesto, no me he quitado ni el collar ni los guantes, dan un toque que no quiero perder. Y el último detalle: me he metido relleno en las perolas como para poder amortiguar una caída. Tengo que dar el pego, ¿no? Me miro al espejo una última vez, solo por corroborar lo que ya sé: parezco una diosa. — ¿¡Qué, cómo estoy!? ¡Espectacular, ya lo sé! ¿Vamos o qué? — Le digo al tío de la puerta. Aún no sé su nombre, pero qué más da, soy la estrella, no tengo que conocer el nombre de nadie: ellos conocerán el mío.



Resumen

VYD
#8
Tema cerrado 


Mensajes en este tema
[T2] Hormonas descontroladas - por Raiga Gin Ebra - 18-01-2025, 07:52 PM
RE: [T2] Hormonas descontroladas - por Shaelia D. Flamme - 23-01-2025, 12:47 AM

Salto de foro:


Usuarios navegando en este tema: 5 invitado(s)