Illyasbabel
cuervo de tiburón
14-08-2024, 10:01 PM
Sobre el costado derecho del barco, luego de que la ráfaga de viento lo arrastrara, Illya se encontraba con el tiburón, que tras observarlo con una mirada un tanto acechante, Illya respondió, - No soy un fantasma, o al menos no por ahora - Dijo mientras el Gyojing bajaba por las escaleras hasta el suelo. - Debo admitir que estoy en la misma situación, me alegra poder conversar con alguien, pensé que me estaba volviendo loco - dijo mientras encendía su cigarro y se apoyaba sobre el barco. - Dime...- sus palabras fueron interrumpidas por dos sonidos, casi al unísono, el de una ametralla a la distancia y el de un cabezazo contra el interior del barco, justo del otro lado de donde estaba.- Vaya, parece que no estamos solos - le dijo al tiburón.
Rápidamente se volteó al escuchar el grito de la mujer rubia que exclamaba a sus espaldas, - Oye.. oye... no hace falta alarmase - respondió mientras alzaba las manos en alto, no quería recibir un disparo, aunque no estaba seguro de lo que pasaría en caso de morir, no estaba de más ser precavido. - ¿ La bolsita ? - se preguntó así mismo mientras observaba al tiburón con curiosidad esperando que este tenga la respuesta. Hasta el momento Illyasbabel no se había dado cuenta de que portaba una bolsa con una chapa en su interior, de hecho, él pensaba que todo esto era su imaginación.
También escuchó la voz que provenía del interior del barco, aparentemente otra mujer que había sido arrastrada por la ráfaga, pero a esta ultima no la podía ver, solo escuchar. Se quedó estático con ambas manos alzadas, preguntándose de que se trataba todo esto y porque seguían apareciendo personajes tan extraños.
Hizo un profundo suspiro para mirar a los dos que tenía más cerca, fue allí cuando noto su propia bolsa al mirarse la cintura, - ¡Ah! ¡te refieres a esto! - exclamó asombrado por su nuevo descubrimiento, aunque no estaba dispuesto a hacer movimientos bruscos, por lo que decidió actuar con cautela, - ¿¿Qué te parece si bajas las armas y te doy la bolsa??- preguntó a la mujer intentando buscar algo de empatía en su interior, había apenas diez metros entre ellos, y a sus espaldas, el gyojing, del cual tampoco se fiaba demasiado pero por lo menos no lo había atacado ni mordido, -Vamos... estoy seguro que podemos llegar a un acuerdo - Dijo intentando calmar la situación, al fin y al cabo estaba rodeado.
Cada tanto escuchaba ruidos del interior del barco, probablemente de la otra mujer, quien probablemente, a ojo de Illya, estaría con la otra, aunque la extrañeza del momento no le permitían al Lunarían sacar verdaderas conclusiones, solo vagas suposiciones del origen de aquel particular encuentro.
Rápidamente se volteó al escuchar el grito de la mujer rubia que exclamaba a sus espaldas, - Oye.. oye... no hace falta alarmase - respondió mientras alzaba las manos en alto, no quería recibir un disparo, aunque no estaba seguro de lo que pasaría en caso de morir, no estaba de más ser precavido. - ¿ La bolsita ? - se preguntó así mismo mientras observaba al tiburón con curiosidad esperando que este tenga la respuesta. Hasta el momento Illyasbabel no se había dado cuenta de que portaba una bolsa con una chapa en su interior, de hecho, él pensaba que todo esto era su imaginación.
También escuchó la voz que provenía del interior del barco, aparentemente otra mujer que había sido arrastrada por la ráfaga, pero a esta ultima no la podía ver, solo escuchar. Se quedó estático con ambas manos alzadas, preguntándose de que se trataba todo esto y porque seguían apareciendo personajes tan extraños.
Hizo un profundo suspiro para mirar a los dos que tenía más cerca, fue allí cuando noto su propia bolsa al mirarse la cintura, - ¡Ah! ¡te refieres a esto! - exclamó asombrado por su nuevo descubrimiento, aunque no estaba dispuesto a hacer movimientos bruscos, por lo que decidió actuar con cautela, - ¿¿Qué te parece si bajas las armas y te doy la bolsa??- preguntó a la mujer intentando buscar algo de empatía en su interior, había apenas diez metros entre ellos, y a sus espaldas, el gyojing, del cual tampoco se fiaba demasiado pero por lo menos no lo había atacado ni mordido, -Vamos... estoy seguro que podemos llegar a un acuerdo - Dijo intentando calmar la situación, al fin y al cabo estaba rodeado.
Cada tanto escuchaba ruidos del interior del barco, probablemente de la otra mujer, quien probablemente, a ojo de Illya, estaría con la otra, aunque la extrañeza del momento no le permitían al Lunarían sacar verdaderas conclusiones, solo vagas suposiciones del origen de aquel particular encuentro.