Invierno, año 723, Loguetown, altas horas de la noche.
Era una noche cualquiera dentro de la isla de Loguetown, dentro de la zona portuaria había todo tipo de establecimientos abiertos incluso a altas horas de la noche, porque incluso a esas horas, marineros y mercancías seguían moviéndose por estos lares, y por supuesto negocios mucho menos acordes al margen de la legalidad se ejercían a esas horas más discretas, como peleas de gallos, venta de drogas o actuaciones no dedicadas a un público susceptible, que no tienen cabida en un acto para todos los públicos.
Pero no todo en Loguetown implicaba riesgo o ilegalidad, seguían habiendo establecimientos respetables, no todos los locales eran lugares de mala muerte, incluso algunos tienen zona VIP, donde la gente podía relajarse y separarse de la gentuza nocturna y más escandalosa, como la mayoría de borrachos de estas horas que circulan o caen desmayados en sus pesebres malolientes. Donde lo más ilegal que podría haber sería el juego de cartas ... Pero mientras no se apueste dinero real, no es ilegal ¿verdad? eran solo partidas amigables con mero objetivo de entretenimiento, no con un objetivo lucrativo.
Pero además esa noche había un extraño entretenimiento, donde jugadores y curiosos, se extrañaban al ver en una mesa, un grupo de hombres uniformados, como si fueran empleados de una empresa prestigiosa, aparentemente estaban enseñando a jugar a las cartas a un pato. Si, suena surrealista, lo que aumentaba el morbo y la curiosidad al ver como uno de ellos explicaba las reglas del juego o incluso como el pato tomaba una carta con el pico y la jugaba acorde a estas ¿Era el pato listo o solo estaba siendo entrenado para un circo? queda un poco a discreción.
-¡Muy bien Mc Duck! Está aprendiendo muy rápido.
-Cuack, Cuack...
Incluso, si era ilógico, ver la escena era cuanto menos entretenida y divertida de ver.
![[Imagen: FqPB3BsagAIF9oe.png?ex=66c24c6a&is=66c0f...height=467]](https://media.discordapp.net/attachments/1271854821565272120/1274450923934191678/FqPB3BsagAIF9oe.png?ex=66c24c6a&is=66c0faea&hm=f2dd1d0f7e4cbb3778692f261844c2e1ba31b6fa0828a037e0c6d1d6da5eb97a&=&format=webp&quality=lossless&width=747&height=467)
Era una noche cualquiera dentro de la isla de Loguetown, dentro de la zona portuaria había todo tipo de establecimientos abiertos incluso a altas horas de la noche, porque incluso a esas horas, marineros y mercancías seguían moviéndose por estos lares, y por supuesto negocios mucho menos acordes al margen de la legalidad se ejercían a esas horas más discretas, como peleas de gallos, venta de drogas o actuaciones no dedicadas a un público susceptible, que no tienen cabida en un acto para todos los públicos.
Pero no todo en Loguetown implicaba riesgo o ilegalidad, seguían habiendo establecimientos respetables, no todos los locales eran lugares de mala muerte, incluso algunos tienen zona VIP, donde la gente podía relajarse y separarse de la gentuza nocturna y más escandalosa, como la mayoría de borrachos de estas horas que circulan o caen desmayados en sus pesebres malolientes. Donde lo más ilegal que podría haber sería el juego de cartas ... Pero mientras no se apueste dinero real, no es ilegal ¿verdad? eran solo partidas amigables con mero objetivo de entretenimiento, no con un objetivo lucrativo.
Pero además esa noche había un extraño entretenimiento, donde jugadores y curiosos, se extrañaban al ver en una mesa, un grupo de hombres uniformados, como si fueran empleados de una empresa prestigiosa, aparentemente estaban enseñando a jugar a las cartas a un pato. Si, suena surrealista, lo que aumentaba el morbo y la curiosidad al ver como uno de ellos explicaba las reglas del juego o incluso como el pato tomaba una carta con el pico y la jugaba acorde a estas ¿Era el pato listo o solo estaba siendo entrenado para un circo? queda un poco a discreción.
-¡Muy bien Mc Duck! Está aprendiendo muy rápido.
-Cuack, Cuack...
Incluso, si era ilógico, ver la escena era cuanto menos entretenida y divertida de ver.