Rengetsu D. Tenji
Príncipe Ciego
19-08-2024, 01:59 AM
Takahiro fue un poco tajante con los últimos rezagados del vecindario, aunque ya eran los típicos cuatro histéricos que en el vecindario tampoco contaban con demasiadas simpatías así que el hecho de que se fueran refunfuñando no era muy problemático, era altamente probable que uno o dos efectivamente siguieran su recomendación de ir directamente a pedir explicaciones en esos momentos a la capitana de la base naval o mínimo poner una reclamación. Ya se vería luego si alguien les hacia el más mínimo caso, pero eso ya eran tramites burocráticos que un pobre funcionario tendría que soportar.
Por su parte el marine había recibido una llamada de sus compañeros y la misma quedo interrumpida con el brusco sonido captado por el caracol cal caer al suelo, al mismo tiempo que unos disparos eran captados, algo que sin duda alarmaría al joven de cabellos esmeralda o por lo menos le pondría en conocimiento de que sus compañeros requerían de ayuda. Y comenzó a adentrarse raudo hacia el interior de las instalaciones tras soltar la amenaza de desacato a la autoridad.
Por otro lado en el interior del taller...
Dos balas salieron impulsadas tras un pequeño estallido de pólvora de los rifles que portaban ambos sicarios. Las balas avanzarían a gran velocidad por la sala dirigiéndose una hacia cada contrincante. El hombre abeja, más conocido como Ray, eludiría con suma destreza el impacto certero de la bala dejando que la misma chocara fútilmente contra las puertas metálicas, mientras el joven marine no perdía el ímpetu para su ofensiva, por otro lado su compañero demostrando que era más partidario del tanqueo que de la elusión encajo el disparo sobre su hombro aunque intento bloquearlo, siendo el pobre victima de un leve daño aunque casi logra pararlo por completo, aunque nada que no pudiera soportar.
Ambos pasarían rapidamente a la ofensiva, siendo el hombre zángano el más veloz, que buscaba descender sobre uno de los dos tiradores - Ha, buen intento criatura - El hombre de un sutil movimiento con su mano con el que aprovecho para ajustar su sombrero blanco, haría aparecer una cúpula de una sustancia marrón solida que pararía el impacto de la patada en seco dejando apenas unas pequeñas gritas en la sustancia que al choque liberaría un aroma a cacao - Ocuparos del otro muchachos, no sois rivales para un usuario de akuma no mi - Proclamaría el hombre que no vio venir por el muro que formo la estocada imparable de Atlas que tras encajar el daño con toda su tenacidad ahora placaba con su naginata esa estructura destrozándola en pedazos hasta lograr clavar levemente su arma en la pierna del hombre que le disparo - ¡Ves, ayúdale! - El hombre apartaría a su sicario para que enfrentara al hombre de la naginata, mientras él encaraba al hombre pájaro en lo que los restos de su defensa caían por el suelo desmoronados.
El sicario que fue protegido por su jefe aprovecho la apertura para apuntar su rifle hacia Atlas mientras realizaba un tiro indiscriminado contra el torso del rubio desde una corta distancia. Mientras el otro sicario tras recibir el daño de la naginata, aunque amortiguado gracias a la cúpula, se reincorporaría y con un poco de desfase de unos tres segundos buscaría un rápido disparo sin prepararlo mucho hacia la pierna del joven. Ambos obedeciendo a su jefe buscaban el dos contra uno.
Mientras que el cabecilla se encontraba frente a frente con el hombre zángano con la ventaja de tres metros que le había dado su cúpula - ¡Parece que será una batalla entre usuarios criatura oww! - Exclamaría mientras chasqueaba sus dedos hacia delante lanzando una pequeña ráfaga de esferas de cacao contra el hombre abeja que buscarían estallar en esquirlas de chocolate por la zona.
Pero lo peor de todo seria que cuando Ray se diera cuenta, tras la estela del ataque la figura de un segundo hombre como el primero se había formado a su lado, aunque este estaba hecho íntegramente de chocolate, pero replicaba perfectamente su silueta y ropa con el dulce alimento - Un caballero no se mancha las manos, envía a otros a librar las batallas, ataca mi Chocollanger Owww - El doble se interpondría entre Ray el el hombre trajeado como si estuviera listo para luchar, igual no era buena idea ignorarle.
Aunque cuando ambos marines parecían estar en una clara inferioridad numérica la caballería estaba por llegar. Un destello verde había irrumpido en la recepción, cruzando la misma como una centella aprovechando la puerta que abrió Atlas, para irrumpir en el anden como alma que lleva el diablo, identificando sin perder el tiempo la entrada a la acción por la puerta marcada con las vigas caídas, permitiendo a Takahiro adentrarse en la sala donde estaba la lucha y el tren. Un nuevo contendiente entra en la ecuación.
Por su parte el marine había recibido una llamada de sus compañeros y la misma quedo interrumpida con el brusco sonido captado por el caracol cal caer al suelo, al mismo tiempo que unos disparos eran captados, algo que sin duda alarmaría al joven de cabellos esmeralda o por lo menos le pondría en conocimiento de que sus compañeros requerían de ayuda. Y comenzó a adentrarse raudo hacia el interior de las instalaciones tras soltar la amenaza de desacato a la autoridad.
Por otro lado en el interior del taller...
Dos balas salieron impulsadas tras un pequeño estallido de pólvora de los rifles que portaban ambos sicarios. Las balas avanzarían a gran velocidad por la sala dirigiéndose una hacia cada contrincante. El hombre abeja, más conocido como Ray, eludiría con suma destreza el impacto certero de la bala dejando que la misma chocara fútilmente contra las puertas metálicas, mientras el joven marine no perdía el ímpetu para su ofensiva, por otro lado su compañero demostrando que era más partidario del tanqueo que de la elusión encajo el disparo sobre su hombro aunque intento bloquearlo, siendo el pobre victima de un leve daño aunque casi logra pararlo por completo, aunque nada que no pudiera soportar.
Ambos pasarían rapidamente a la ofensiva, siendo el hombre zángano el más veloz, que buscaba descender sobre uno de los dos tiradores - Ha, buen intento criatura - El hombre de un sutil movimiento con su mano con el que aprovecho para ajustar su sombrero blanco, haría aparecer una cúpula de una sustancia marrón solida que pararía el impacto de la patada en seco dejando apenas unas pequeñas gritas en la sustancia que al choque liberaría un aroma a cacao - Ocuparos del otro muchachos, no sois rivales para un usuario de akuma no mi - Proclamaría el hombre que no vio venir por el muro que formo la estocada imparable de Atlas que tras encajar el daño con toda su tenacidad ahora placaba con su naginata esa estructura destrozándola en pedazos hasta lograr clavar levemente su arma en la pierna del hombre que le disparo - ¡Ves, ayúdale! - El hombre apartaría a su sicario para que enfrentara al hombre de la naginata, mientras él encaraba al hombre pájaro en lo que los restos de su defensa caían por el suelo desmoronados.
El sicario que fue protegido por su jefe aprovecho la apertura para apuntar su rifle hacia Atlas mientras realizaba un tiro indiscriminado contra el torso del rubio desde una corta distancia. Mientras el otro sicario tras recibir el daño de la naginata, aunque amortiguado gracias a la cúpula, se reincorporaría y con un poco de desfase de unos tres segundos buscaría un rápido disparo sin prepararlo mucho hacia la pierna del joven. Ambos obedeciendo a su jefe buscaban el dos contra uno.
TIR101
TIRADOR
Ofensiva Activa
Tier 1
No Aprendida
22
1
El usuario lanzará un proyectil rápido, de hasta 8 metros extra, con su arma apuntando a una de las extremidades de un objetivo con el fin de dificultar el atacar del mismo al causarle [Derribo],
Golpe Básico + [DESx1,8] de [Daño perforante]
Mientras que el cabecilla se encontraba frente a frente con el hombre zángano con la ventaja de tres metros que le había dado su cúpula - ¡Parece que será una batalla entre usuarios criatura oww! - Exclamaría mientras chasqueaba sus dedos hacia delante lanzando una pequeña ráfaga de esferas de cacao contra el hombre abeja que buscarían estallar en esquirlas de chocolate por la zona.
Pero lo peor de todo seria que cuando Ray se diera cuenta, tras la estela del ataque la figura de un segundo hombre como el primero se había formado a su lado, aunque este estaba hecho íntegramente de chocolate, pero replicaba perfectamente su silueta y ropa con el dulce alimento - Un caballero no se mancha las manos, envía a otros a librar las batallas, ataca mi Chocollanger Owww - El doble se interpondría entre Ray el el hombre trajeado como si estuviera listo para luchar, igual no era buena idea ignorarle.
Aunque cuando ambos marines parecían estar en una clara inferioridad numérica la caballería estaba por llegar. Un destello verde había irrumpido en la recepción, cruzando la misma como una centella aprovechando la puerta que abrió Atlas, para irrumpir en el anden como alma que lleva el diablo, identificando sin perder el tiempo la entrada a la acción por la puerta marcada con las vigas caídas, permitiendo a Takahiro adentrarse en la sala donde estaba la lucha y el tren. Un nuevo contendiente entra en la ecuación.