Jim
Hmpf
26-08-2024, 12:46 PM
Día 20 de Verano.
En algún lugar del East Blue.
¡Umpa Lumpa! ¡Lumpa Umpa! ¡Umpa Lumpa!
Cientos de voces coreaban extraños cánticos mientras mi cuerpo, amordazado y atado, era balanceado de un lado a otro. ¡Me estaban transportando! Miré a mi alrededor, confundido. ¿Qué...? Los Wandara ascendían el Volcán de Isla Rudra en fila de a cuatro. Cuatro porteadores me llevaban suspendido entre dos grandes palos de madera. El aire olía a ceniza; el volcán Hinokami parecía estar activo. Al girar la cabeza, vi ríos de magma que descendían por la ladera. Intenté forcejear, pero las cuerdas estaban demasiado apretadas, y el trapo en mi boca no me dejaba hablar. Gritaba en silencio. Finalmente, llegamos a la cima. El líder de los Wandara se acercó y, con un líquido viscoso, me pintó la frente.
¡Rukutu Piribi! ¡Piribi Rukutu! ¡Rukutu Piribi!
Los cánticos cambiaron. Ahora, todos levantaban sus lanzas, mientras mis porteadores me balanceaban con fuerza, como un péndulo. Cada vez más alto... hasta que de pronto, ¡volé! Sentí el aire zumbando en mis oídos mientras caía hacia la boca del Hinokami. El calor era insoportable, y la lava se acercaba rápidamente. Intenté gritar, pero nada salió de mi garganta. Cerré los ojos mientras me precipitaba hacia el impacto, y entonces...
¡Papá!
Grité al despertarme, sobresaltado. Mi corazón latía con fuerza, y tardé unos segundos en darme cuenta de que había sido solo un sueño. Todavía tembloroso, me aferré a la madera del barco, tratando de calmarme. Me incorporé lentamente y fui a sentarme en una de las tablas de popa. El mar se extendía en calma, y mis compañeros dormían profundamente a mis pies. Respiré hondo, dejando que la belleza del paisaje nocturno me tranquilizara. La luna llena se reflejaba en el agua, brillante y majestuosa. Al elevar la vista hacia el cielo, sentí cómo mis pupilas se dilataban, hipnotizado por su luz. Siempre tenía sueños extraños cuando la luna estaba llena... pero no sabía por qué.
De repente, una silueta esférica apareció en el horizonte decorando la luna antes de comenzar a crecer en tamaño. Al principio, no le presté mucha atención, pero luego me di cuenta de que se acercaba cada vez más. ¡Recórcholis! Me agaché justo a tiempo para evitar que el objeto me golpeara la cabeza, cayó al mar a mis espaldas con mucha fuerza.
Miré hacia la luna y seguí la línea imaginaria hacia abajo, hacia el horizonte. Entonces lo vi: un islote diminuto, apenas visible a lo lejos. Achiné los ojos, intentando discernir más detalles. Era una pequeña isla con una sección rocosa y una solitaria palmera en el centro. La curiosidad me invadió, y algo en mí (quizás la alineación de la luna con la isla) me impulsaba a acercarme. ¿El misterioso objeto esférico provenía de allí? [Sentidos Mejorados: Vista]
Aunque no soy un experto en navegación, después de bombardear a Misty con preguntas durante tanto tiempo, había aprendido algunos conceptos básicos. Con el mar en calma, ajusté ligeramente el timón y las velas. Recogí mi arco y mi carcaj, preparándome para lo que pudiera encontrar. Mientras nos acercábamos al islote, seguí mis instintos: primero bajaría las velas para ralentizar el barco, luego echaría el ancla, y finalmente giraría un poco el timón para ladearlo suavemente. Algo me decía que había mucho más de lo que aparentaba en ese pequeño islote bajo la luz de la luna llena.