Juuken
Juuken
02-09-2024, 08:13 PM
Ese tipo disfrazado se mostró un poco intrigado al principio. No terminaba de entender el por qué. Habló algo de una broma. No recordaba haber soltado ninguna broma, no se a qué podía referirse. de pronto se me quedó mirando algo más serio.
-Oye, oye... ¿De dónde sales tú? -Se me quedó mirando fijamente.
Miré a un lado y al otro y me encogí de hombros. Lo cierto es que no tenía ni idea de cómo se llamaba esta isla, creo haber escuchado ya su nombre, pero se me hizo un poco extraño y no pude memorizar el nombre. ¿Tal vez me lo diría aquél peliblanco? Sea como fuese, no tenía ni idea, y eso mismo dije, llevándome una mano a la parte trasera de mi cabeza y sonriendo algo tímidamente.
-La verdad es que no lo sé jajajaja.
Me quedé fijándome en ese traje, la verdad es que era demasiado bueno, estaba completamente empapado, sin embargo daba la sensación de estar seco, y a la vez muy suave, no sabía que tipo de tejido sería, pero resultaba muy llamativo. Hay tantas cosas impresionantes en este mundo. Que pena habérmelo perdido durante tanto tiempo.
-¿Te apetece que vayamos a una taberna y te explico?
Solo entonces me fijé, me quedé completamente paralizado. Había asumido tanto que era algún tipo de disfraz que ni siquiera me había percatado en la cabeza, de hecho incluso buscaba alguna apertura para los ojos. Pero en ese momento lo vi. Su boca se movía al son de las palabras, esos ojos parpadeaban... ¿En serio era un disfraz? Porque de ser así era increíble.
Comencé a mirar a mi alrededor, buscando algo que me indicase si la gente sentía pánico de aquella criatura, aquél ser extraño. Todo el mundo reaccionaba indiferente, de hecho parecían más extrañados por mi reacción que por el hecho de la mera existencia de ese ser. Un tipo parecía que le daba asco, miró hacia esa criatura y sin apartar la mirada escupió al suelo.
-¿Qué te parece? Vamos ahí a tomar un zumo y te explico lo que somos los Gyojin
-¿Los qué? -pregunté inconscientemente.
Esa palabra, Gyojin. Me sonaba haberla escuchado antes, pero fuera de contexto, no entendía nunca de qué hablaban cuando escuchaba esas palabras. Supongo que era el momento de averiguarlo. Aunque no me terminaba de sentir seguro, pero igual podía convertirse en otra maravillosa experiencia, como mi primer encuentro con el peliblanco. Lance creo recordar que era. Aquello fue realmente divertido. Todavía tenía agujetas de ese día.
Comenzamos a avanzar hacia donde había dicho ese ser. Maldita sea, estaba caminando junto a alguien que no sabía siquiera si podía ser un peligro. ¿Por qué me gusta tanto buscarme problemas? Si seguía así podría llegar el día que tendría que renunciar a la promesa que le hice a Juuni. Si algún día moría, todo acabaría en nada.
Entramos en el establecimiento y nos sentamos en una mesa que eligió esa... cosa. Todavía no sé ni cómo pensar de él. ¿De verdad era eso que llamaban Gyojin? Nunca había visto ninguno, joder ni siquiera sabía qué eran esas criaturas.
Un hombre llegó para preguntarnos qué ibamos a tomar.
-¿Que desean?
-Yo algo fresco para beber. Tengo calor -dije sin pensarlo mucho.
-Un refresco para el muchacho. ¿Un zumo, cola, batido...?
Me di cuenta que esperaba una respuesta. No entendía ni qué opciones me había dado, yo siempre pedía agua. Solo se me quedó en la memoria lo último que había dicho, así que lo repetí.
-¿Batido?
-Muy bien, un batido para el muchacho -apuntó en una hoja y se giró hacia el gyojin.- ¿Y para el caballero?
Eso me confirmaba dos cosas. No sabía ni qué diantres era eso llamado batido, ni si me gustaría, y ese ser no es nada peligroso. Al menos por naturaleza.
-Oye, oye... ¿De dónde sales tú? -Se me quedó mirando fijamente.
Miré a un lado y al otro y me encogí de hombros. Lo cierto es que no tenía ni idea de cómo se llamaba esta isla, creo haber escuchado ya su nombre, pero se me hizo un poco extraño y no pude memorizar el nombre. ¿Tal vez me lo diría aquél peliblanco? Sea como fuese, no tenía ni idea, y eso mismo dije, llevándome una mano a la parte trasera de mi cabeza y sonriendo algo tímidamente.
-La verdad es que no lo sé jajajaja.
Me quedé fijándome en ese traje, la verdad es que era demasiado bueno, estaba completamente empapado, sin embargo daba la sensación de estar seco, y a la vez muy suave, no sabía que tipo de tejido sería, pero resultaba muy llamativo. Hay tantas cosas impresionantes en este mundo. Que pena habérmelo perdido durante tanto tiempo.
-¿Te apetece que vayamos a una taberna y te explico?
Solo entonces me fijé, me quedé completamente paralizado. Había asumido tanto que era algún tipo de disfraz que ni siquiera me había percatado en la cabeza, de hecho incluso buscaba alguna apertura para los ojos. Pero en ese momento lo vi. Su boca se movía al son de las palabras, esos ojos parpadeaban... ¿En serio era un disfraz? Porque de ser así era increíble.
Comencé a mirar a mi alrededor, buscando algo que me indicase si la gente sentía pánico de aquella criatura, aquél ser extraño. Todo el mundo reaccionaba indiferente, de hecho parecían más extrañados por mi reacción que por el hecho de la mera existencia de ese ser. Un tipo parecía que le daba asco, miró hacia esa criatura y sin apartar la mirada escupió al suelo.
-¿Qué te parece? Vamos ahí a tomar un zumo y te explico lo que somos los Gyojin
-¿Los qué? -pregunté inconscientemente.
Esa palabra, Gyojin. Me sonaba haberla escuchado antes, pero fuera de contexto, no entendía nunca de qué hablaban cuando escuchaba esas palabras. Supongo que era el momento de averiguarlo. Aunque no me terminaba de sentir seguro, pero igual podía convertirse en otra maravillosa experiencia, como mi primer encuentro con el peliblanco. Lance creo recordar que era. Aquello fue realmente divertido. Todavía tenía agujetas de ese día.
Comenzamos a avanzar hacia donde había dicho ese ser. Maldita sea, estaba caminando junto a alguien que no sabía siquiera si podía ser un peligro. ¿Por qué me gusta tanto buscarme problemas? Si seguía así podría llegar el día que tendría que renunciar a la promesa que le hice a Juuni. Si algún día moría, todo acabaría en nada.
Entramos en el establecimiento y nos sentamos en una mesa que eligió esa... cosa. Todavía no sé ni cómo pensar de él. ¿De verdad era eso que llamaban Gyojin? Nunca había visto ninguno, joder ni siquiera sabía qué eran esas criaturas.
Un hombre llegó para preguntarnos qué ibamos a tomar.
-¿Que desean?
-Yo algo fresco para beber. Tengo calor -dije sin pensarlo mucho.
-Un refresco para el muchacho. ¿Un zumo, cola, batido...?
Me di cuenta que esperaba una respuesta. No entendía ni qué opciones me había dado, yo siempre pedía agua. Solo se me quedó en la memoria lo último que había dicho, así que lo repetí.
-¿Batido?
-Muy bien, un batido para el muchacho -apuntó en una hoja y se giró hacia el gyojin.- ¿Y para el caballero?
Eso me confirmaba dos cosas. No sabía ni qué diantres era eso llamado batido, ni si me gustaría, y ese ser no es nada peligroso. Al menos por naturaleza.