MC duck
Pato
05-09-2024, 12:42 PM
Mc Duck seguía avanzando, admirando la estructura del edificio, cada rincón tenía un secreto a la vista, y organización del local, sin duda tenía significados y intenciones detrás, siguió caminando casi sin ver por dónde iba, mientras estudiaba la colocación de las cámaras y mesas, ¿Estarían los dueños del casino controlando las cartas del jugador, podía averiguar si…
Entonces chocó contra alguien, un inútil que no sabía con quién se estaba chocando, aún así MC Duck fue a formular una disculpa, pues él no miraba por dónde iba, hasta que aún sin entender mucho, veía como el tipo murmuraba en sus narices, algo que irritó al pato.
—¡HE! ¡¿Estas ciego o qué?! ¡Mira por dónde caminas muchacho!
Tenía una de esas caras ingenuas que te dan ganas de estafar todo su dinero, o de educarlo en una nueva forma de vida, y convertirte en el refuerzo paternal que nunca tuvo de pequeño, y guiarlo a una mejor versión de sí mismo. La pregunta es… ¿Cuál de las dos sería?
—Hum… ¿Un lamebotas? Si, por qué no, normalmente no fumo, pero un habano no me matará.- dijo mientras abría su chaqueta azul y sacaba un Habano- Dime muchacho ¿A qué te dedicas? - siguió llamándolo muchacho a pesar de que seguramente tuvieran la misma edad,- hum… interesante, poco práctico, pero interesante.
Casi todo el mundo tenía o un oficio o un sueño, y los sueños raramente daban de comer, así que aquellos que no tenían oficios debían esforzarse más que los demás en conseguir sus metas. O caerían en el abismo del olvido más absoluto.
—Dime muchacho ¿Cuál crees que es el poder más grande del mundo?- parecía una pregunta simple, pero en un universo donde existían tantas razas y poderes extraños y voluntades capaces de doblegar la mente de los débiles, era difícil decir- ¿El poder del diablo sobre los mortales? ¿La ira de un rey justo? ¿El mar y las bestias que lo habitan? … ¿He?
Dejo un poco de tiempo para que lo medirá, y sacará su propias conclusiones, antes de decirle.
—No amigo, ambos lo sabemos, el mayor poder de este mundo no es la magia de las akumas, ni la voluntad de un hombre fuerte… - MC Duck señaló entonces con su bastón a un hombre, que prácticamente pasó a su lado sin mirar a ninguno de los dos, como si no fueran nada, menos que basura, de esas personas que cagan más dinero del que MC Duck y Byron son capaces de apostar en un todo o nada- El mayor poder de este mundo es el DINERO, pero no cualquier dinero… hablamos de MUCHO Dinero.
El ricachón siguió su camino, mientras Mc Duck miraba a Byron con cierto aire apesadumbrado.
—¿Acaso no estás cansado de vivir marginado mientras esos ricachones pasan a tu lado con sus caros trajes y ni siquiera se voltean a dirigirte la mirada?
Entonces chocó contra alguien, un inútil que no sabía con quién se estaba chocando, aún así MC Duck fue a formular una disculpa, pues él no miraba por dónde iba, hasta que aún sin entender mucho, veía como el tipo murmuraba en sus narices, algo que irritó al pato.
—¡HE! ¡¿Estas ciego o qué?! ¡Mira por dónde caminas muchacho!
Tenía una de esas caras ingenuas que te dan ganas de estafar todo su dinero, o de educarlo en una nueva forma de vida, y convertirte en el refuerzo paternal que nunca tuvo de pequeño, y guiarlo a una mejor versión de sí mismo. La pregunta es… ¿Cuál de las dos sería?
—Hum… ¿Un lamebotas? Si, por qué no, normalmente no fumo, pero un habano no me matará.- dijo mientras abría su chaqueta azul y sacaba un Habano- Dime muchacho ¿A qué te dedicas? - siguió llamándolo muchacho a pesar de que seguramente tuvieran la misma edad,- hum… interesante, poco práctico, pero interesante.
Casi todo el mundo tenía o un oficio o un sueño, y los sueños raramente daban de comer, así que aquellos que no tenían oficios debían esforzarse más que los demás en conseguir sus metas. O caerían en el abismo del olvido más absoluto.
—Dime muchacho ¿Cuál crees que es el poder más grande del mundo?- parecía una pregunta simple, pero en un universo donde existían tantas razas y poderes extraños y voluntades capaces de doblegar la mente de los débiles, era difícil decir- ¿El poder del diablo sobre los mortales? ¿La ira de un rey justo? ¿El mar y las bestias que lo habitan? … ¿He?
Dejo un poco de tiempo para que lo medirá, y sacará su propias conclusiones, antes de decirle.
—No amigo, ambos lo sabemos, el mayor poder de este mundo no es la magia de las akumas, ni la voluntad de un hombre fuerte… - MC Duck señaló entonces con su bastón a un hombre, que prácticamente pasó a su lado sin mirar a ninguno de los dos, como si no fueran nada, menos que basura, de esas personas que cagan más dinero del que MC Duck y Byron son capaces de apostar en un todo o nada- El mayor poder de este mundo es el DINERO, pero no cualquier dinero… hablamos de MUCHO Dinero.
El ricachón siguió su camino, mientras Mc Duck miraba a Byron con cierto aire apesadumbrado.
—¿Acaso no estás cansado de vivir marginado mientras esos ricachones pasan a tu lado con sus caros trajes y ni siquiera se voltean a dirigirte la mirada?