Tofun
El Largo
07-09-2024, 08:05 PM
— Podría llegar a creermelo. ¡Shahahaha! — Rei pensando en la posibilidad de que se hubiesen pasado 35 años bebiendo a la espera de mi salida. Conociéndolos no eran tan descabellado, sumergí todo mi cabeza en la jarra de cerveza y le di un largo trago, salí al exterior, agite mi cuerpo y pregunte sin rodeos. — ¿Que es eso de las nuevas generaciones? ¡No entiendo! — Me extrañaba ver a aquel grupo instruyendo a un par de ladrones de poca monta que querían hacer algo, los conocía demasiado bien, si verdaderamente estaban enseñando a alguien no sería una causa cualquiera.
La lluvia era densa, no nos venía mal ayudaba a ocultar nuestro ruido, a tapar nuestras pisadas y a qué pasásemos más desapercibidos. Me adelante ligeramente del grupo mientras los escuchaba bromear y discutir, estaba ojeando el terreno, comprobando que no había moros en la costa. Cuando llegaron hice mi aportación. — Si alguno quiere cruzar hasta la bodega con ese perro capacitado no seré yo. Hoy no hago de postre ni de tentempié. — Mi rostro estaba serio pero pronto dibuje una sonrisa mirando mis compañeros. — He traído magia blanca como para tumbar a un oso jeje — Saqué una bolsa del tamaño de mi bota de mi entrepierna y la agite sosteniéndola con dos dedos. — Un viaje para casa uno y lo que sobre para el perro. Aún así necesitaremos esa carne. — No me mires así, éramos jóvenes joder, había que disfrutar y si nos íbamos a jugar la vida que fuese colocados. Todos consumiriamos aquel día, yo por su puesto aproveche al último turno para, mientras nadie miraba, inspirar el doble de aquel polvo de lo que no nos correspondía. — Diossssss Que potencia. — Espeté en el acto mientras combatía el picor de nariz moviéndola de un lado al otro. Junte las manos con aplausos y las restregué. — Bueno qué. ¿Vamos a por esa carne? —Intentaria liderar el grupo hasta la cocina, una vez allí intentaría localizar donde guardaban o había carne, después analizaría lo que estaban cocinando intentando anticiparme a qué iban hacer después para encontrar un momento en el que ir a por el objetivo. Si todo iba bien el plan sería obtener la carne, hacerle un discreto agujero, meter allí la magia blanca y dejar que hiciese su efecto. Con el perro lo podríamos avanzar
La lluvia era densa, no nos venía mal ayudaba a ocultar nuestro ruido, a tapar nuestras pisadas y a qué pasásemos más desapercibidos. Me adelante ligeramente del grupo mientras los escuchaba bromear y discutir, estaba ojeando el terreno, comprobando que no había moros en la costa. Cuando llegaron hice mi aportación. — Si alguno quiere cruzar hasta la bodega con ese perro capacitado no seré yo. Hoy no hago de postre ni de tentempié. — Mi rostro estaba serio pero pronto dibuje una sonrisa mirando mis compañeros. — He traído magia blanca como para tumbar a un oso jeje — Saqué una bolsa del tamaño de mi bota de mi entrepierna y la agite sosteniéndola con dos dedos. — Un viaje para casa uno y lo que sobre para el perro. Aún así necesitaremos esa carne. — No me mires así, éramos jóvenes joder, había que disfrutar y si nos íbamos a jugar la vida que fuese colocados. Todos consumiriamos aquel día, yo por su puesto aproveche al último turno para, mientras nadie miraba, inspirar el doble de aquel polvo de lo que no nos correspondía. — Diossssss Que potencia. — Espeté en el acto mientras combatía el picor de nariz moviéndola de un lado al otro. Junte las manos con aplausos y las restregué. — Bueno qué. ¿Vamos a por esa carne? —Intentaria liderar el grupo hasta la cocina, una vez allí intentaría localizar donde guardaban o había carne, después analizaría lo que estaban cocinando intentando anticiparme a qué iban hacer después para encontrar un momento en el que ir a por el objetivo. Si todo iba bien el plan sería obtener la carne, hacerle un discreto agujero, meter allí la magia blanca y dejar que hiciese su efecto. Con el perro lo podríamos avanzar