Ray
Kuroi Ya
11-09-2024, 09:57 PM
La sugerencia de Atlas de vestirse de paisano antes de salir del Cuartel General rumbo al puerto fue muy acertada en opinión del peliblanco, y al parecer también del resto de sus compañeros, pues cada uno de ellos se dirigió a su habitación. Unos minutos después estaban todos reunidos de nuevo en la entrada principal de la base, donde habían quedando en encontrarse antes de ir a cambiarse. Ray llevaba un atuendo cómodo y sencillo. Unos pantalones cargo de color que no sabía precisar con exactitud entre azul marino muy oscuro y negro, junto a una camiseta sin mangas de la misma tonalidad y unas botas altas de un tono gris que contrastaba con el plateado mucho más claro de sus cabellos. La definida musculatura de su torso se dejaba notar bajo la ceñida camiseta, y sus esculpidos brazos podían verse a la perfección sin nada que los tapara. Sin embargo no era ni mucho menos la estética lo que había motivado al joven marine a elegir este atuendo, sino el hecho de que no molestaba los movimientos en absoluto, permitiéndole pelear con total libertad en caso necesario.
Los atuendos del resto de sus compañeros parecían también claramente orientados a resultar cómodos en caso de que tuvieran que combatir, salvo el que había elegido Camille. La oni, probablemente consciente de que se pusiera lo que se pusiera iba a llamar la atención de forma inevitable, había decidido sacar partido a su feminidad con un top deportivo ajustado y un pareo largo que dejaba casi la totalidad de su pierna izquierda al aire. Y coronando su particular vestimenta se había puesto una especie de pañuelo de grandes proporciones simulando un moño pero hacia delante, de forma que tapase los cuernos. Resultaba curioso pero, al haber conseguido esconder de la vista esa parte de su anatomía en concreto, a Ray le daba la sensación de que su amiga iba a llamar mucho menos la atención de lo que lo habría hecho de ponerse algo similar a lo que llevaban el resto de la brigada. Y para colmo debía reconocer que le quedaba bastante bien, opinión que pudo ver cristalina como el agua en el rostro de Takahiro, a quien la oni fulminó con la mirada nada más llegar junto a ellos mientras les advertía de que no quería comentarios respecto a su look.
El rubio sugirió empezar su búsqueda por la parte sur, a lo que los demás respondieron afirmativamente sin necesidad de pensarlo en demasía. Al fin y al cabo se trataba de la zona más conflictiva de la ciudad, cercana al puerto y donde se aglutinaban todos los malhechores que pasaban por Loguetown camino del Grand Line. Takahiro propuso de una forma que podría calificarse como poco caballeresca dividirse en dos grupos de forma que pudieran cubrir un área mayor en menos tiempo y, de paso, llamasen menos la atención. Octojin se mostró de acuerdo, y sugirió que él fuese en un grupo y Camille en otro. Al fin y al cabo, la altura y corpulencia de ambos llamaría la atención inevitablemente, pero esto aumentaría exponencialmente si los dos iban juntos.
- Tiene sentido. - Respondió el joven de cabellos plateados. Así que cuando Octojin se dirigió hacia Takahiro para dirigirse ambos al mismo grupo Ray hizo lo mismo con Camille.
- Si nuestros amigos van a recorrer las tabernas del puerto, será mejor que nosotros vayamos a ver qué podemos averiguar en los muelles, ¿no crees? - Preguntó a la oni antes de ponerse en movimiento.
Los atuendos del resto de sus compañeros parecían también claramente orientados a resultar cómodos en caso de que tuvieran que combatir, salvo el que había elegido Camille. La oni, probablemente consciente de que se pusiera lo que se pusiera iba a llamar la atención de forma inevitable, había decidido sacar partido a su feminidad con un top deportivo ajustado y un pareo largo que dejaba casi la totalidad de su pierna izquierda al aire. Y coronando su particular vestimenta se había puesto una especie de pañuelo de grandes proporciones simulando un moño pero hacia delante, de forma que tapase los cuernos. Resultaba curioso pero, al haber conseguido esconder de la vista esa parte de su anatomía en concreto, a Ray le daba la sensación de que su amiga iba a llamar mucho menos la atención de lo que lo habría hecho de ponerse algo similar a lo que llevaban el resto de la brigada. Y para colmo debía reconocer que le quedaba bastante bien, opinión que pudo ver cristalina como el agua en el rostro de Takahiro, a quien la oni fulminó con la mirada nada más llegar junto a ellos mientras les advertía de que no quería comentarios respecto a su look.
El rubio sugirió empezar su búsqueda por la parte sur, a lo que los demás respondieron afirmativamente sin necesidad de pensarlo en demasía. Al fin y al cabo se trataba de la zona más conflictiva de la ciudad, cercana al puerto y donde se aglutinaban todos los malhechores que pasaban por Loguetown camino del Grand Line. Takahiro propuso de una forma que podría calificarse como poco caballeresca dividirse en dos grupos de forma que pudieran cubrir un área mayor en menos tiempo y, de paso, llamasen menos la atención. Octojin se mostró de acuerdo, y sugirió que él fuese en un grupo y Camille en otro. Al fin y al cabo, la altura y corpulencia de ambos llamaría la atención inevitablemente, pero esto aumentaría exponencialmente si los dos iban juntos.
- Tiene sentido. - Respondió el joven de cabellos plateados. Así que cuando Octojin se dirigió hacia Takahiro para dirigirse ambos al mismo grupo Ray hizo lo mismo con Camille.
- Si nuestros amigos van a recorrer las tabernas del puerto, será mejor que nosotros vayamos a ver qué podemos averiguar en los muelles, ¿no crees? - Preguntó a la oni antes de ponerse en movimiento.