Jack D. Agnis
Golden Eyes
13-09-2024, 12:53 AM
La noche poco a poco avanzó, haciendo que la oscuridad comenzara a reinar por las calles y en el interior de la taberna. Aun así, el tabernero rápidamente encendió algunas lamparas de aceite de ballena las cuales iluminaron de manera mas que efectiva el lugar.
A diferencia de la zona mas rica de aquella isla, al cual contaba con mejores faroles y tecnología para iluminar las calles y las casas, en la zona pobre, aun se seguían usando lamparas de aceite de ballena para iluminar y hasta para calefaccionar algunas casas.
Silver habla con Katarina, la cual lo mira con extrañeza. En su anterior respuesta escueta ya había dejado claro que no tenia intenciones de conversar con él y mucho menos darle información, pero tu insistencia hace que te mire y oiga tus palabras en silencio y aun con una muesca seria y dura en su rostro.
Tus palabras no hacen efecto alguno en ella. Tal vez ya no tienes eso que tenias de joven y por eso aquella mujer practicante no te estaba prestando atención. Una vez oyó lo que tenias que decir, se gira hacia Balagus y también lo oye, pero aunque imperceptible, notas que ella presta algo mas de atención a tus palabras que a las palabras de Silver.
-Ey Jacob, tus empleados están haciendo que mi digestión se corte ¿Por qué no mejor los mandas a trabajar o? O mejor, que vayan a limpiar el vomito de Bob - dijo la mujer al tabernero, quien rápidamente se acercó a ambos y tras tomar su brazos con sus manos, los empuja hacia la cocina.
-Vayan a traer mas comida y bebidas. No les pago para hablar con los clientes, solo deben servirles- dijo algo enojado aquel hombre, mientras sacuda su cabeza algo decepcionado.
Tras aquel pequeño inconveniente, uds siguen trabajando normalmente. Hasta que poco a poco, y tras algunas pocas horas, ven como todos los balleneros comienzan a salir de aquella taberna, dejando solo atrás a Katarina y al tabernero, quienes se sientan en una mesa a charlar.
Pero antes de que digan una palabra, Jacob los mira y les dice:
-Su trabajo ha terminando. Han hecho un buen trabajo. De ahora en mas me quedo a atender yo. Tómense la noche libre y no vuelvan por un par de horas. Pero antes de vayan a hacer vaya a saber que, saquen la basura. Ya saben donde están los contenedores- les ordenó Jacob.
A diferencia de la zona mas rica de aquella isla, al cual contaba con mejores faroles y tecnología para iluminar las calles y las casas, en la zona pobre, aun se seguían usando lamparas de aceite de ballena para iluminar y hasta para calefaccionar algunas casas.
Silver habla con Katarina, la cual lo mira con extrañeza. En su anterior respuesta escueta ya había dejado claro que no tenia intenciones de conversar con él y mucho menos darle información, pero tu insistencia hace que te mire y oiga tus palabras en silencio y aun con una muesca seria y dura en su rostro.
Tus palabras no hacen efecto alguno en ella. Tal vez ya no tienes eso que tenias de joven y por eso aquella mujer practicante no te estaba prestando atención. Una vez oyó lo que tenias que decir, se gira hacia Balagus y también lo oye, pero aunque imperceptible, notas que ella presta algo mas de atención a tus palabras que a las palabras de Silver.
-Ey Jacob, tus empleados están haciendo que mi digestión se corte ¿Por qué no mejor los mandas a trabajar o? O mejor, que vayan a limpiar el vomito de Bob - dijo la mujer al tabernero, quien rápidamente se acercó a ambos y tras tomar su brazos con sus manos, los empuja hacia la cocina.
-Vayan a traer mas comida y bebidas. No les pago para hablar con los clientes, solo deben servirles- dijo algo enojado aquel hombre, mientras sacuda su cabeza algo decepcionado.
Tras aquel pequeño inconveniente, uds siguen trabajando normalmente. Hasta que poco a poco, y tras algunas pocas horas, ven como todos los balleneros comienzan a salir de aquella taberna, dejando solo atrás a Katarina y al tabernero, quienes se sientan en una mesa a charlar.
Pero antes de que digan una palabra, Jacob los mira y les dice:
-Su trabajo ha terminando. Han hecho un buen trabajo. De ahora en mas me quedo a atender yo. Tómense la noche libre y no vuelvan por un par de horas. Pero antes de vayan a hacer vaya a saber que, saquen la basura. Ya saben donde están los contenedores- les ordenó Jacob.