Baltazar Bonez
Dr.Bonez
15-09-2024, 06:56 PM
(Última modificación: 15-09-2024, 07:04 PM por Baltazar Bonez.)
Podia ver claramente la cara de asco que ponía aquel Gyojin, y no era para menos. Normalmente la comida de la señora Magdalene no era apreciada por ningún pirata que llegaba a ese lugar, así que poder evitarle ese mal trago al Gyojin era lo menos que podía hacer, viendo como llamaba al camarero y pedía que le cambiaran el plato por el estpfado de carne. Bonez sabía que no le harían problemas a Octojin, por el simple hecho de que el gyojin podría destruir el lugar y todos los que se encontraban ahí si es que lo deseaba, así que al momento en el que mesero se acercó para saber que es lo que quería el Gyojin, este solo asintió sin intención de negarse a la petición, marchando a toda prisa antes de que ese tipo le arrancará la cabeza de un mordisco.
Ante el agradecimiento del gigante, Bonez solo hace un ademán de cabeza, ya que por lo menos con el estofado tendría algo sabroso y sazonado, no era nada del otro mundo pero si era una comida que se podía disfrutar, haciendo que al momento de presentarse, el gyojin le diera su nombre a lo cual Bonez responde sacándose su sombrero de copa brevemente antes de hacer una leve reverencia de cabeza. Es un gusto señor Octojin.
La respuesta de Bonez fue breve , pero solamente porque quería darle tiempo al Gyojin que parecía estar disfrutando mucho más del estofado quencualquiera de las cosas que preparara la señora, dando varias grandes cucharadas a a la comida antes de decidir volver a agradecerle.
No es nada Ewa. No quería que te tortures más intentando tragar esa comida, realmente no vale la pena. Dice antes se que el gyojin le pregunte que es lo que hacia en aquel lugar, ya que era un lugar bastante tranquilo, en el cual normalmente no ocurría demasiado. Soy solo un caminate, un viajero que anda en búsqueda de información. Dijo en una breve descripción de si mismo, ya que aún debía mantener sus intenciones en secreto por miedo de que aquella bruja tuviera conexiones con algunos piratas de ese lugar, ya que nunca se sabía quien podía caer en su maldición.
¿Y que hay de ti? Es curioso que un gyojin venga esta isla, sobretodo para venir a comer la comida de la vieja Magda. Dice mientras que veía como el gyojin le pedía otra ronda al camarero antes de que le fuera a invitar una ronda.
Pues claro, cuando me termine mi botella estaré feliz de aceptarle ese regalo. Dice antes de darle otro trago más a su vaso, haciendo un leve gesto de gusto al beber aquel shot de ron que bajaba por su garganta.
Ante el agradecimiento del gigante, Bonez solo hace un ademán de cabeza, ya que por lo menos con el estofado tendría algo sabroso y sazonado, no era nada del otro mundo pero si era una comida que se podía disfrutar, haciendo que al momento de presentarse, el gyojin le diera su nombre a lo cual Bonez responde sacándose su sombrero de copa brevemente antes de hacer una leve reverencia de cabeza. Es un gusto señor Octojin.
La respuesta de Bonez fue breve , pero solamente porque quería darle tiempo al Gyojin que parecía estar disfrutando mucho más del estofado quencualquiera de las cosas que preparara la señora, dando varias grandes cucharadas a a la comida antes de decidir volver a agradecerle.
No es nada Ewa. No quería que te tortures más intentando tragar esa comida, realmente no vale la pena. Dice antes se que el gyojin le pregunte que es lo que hacia en aquel lugar, ya que era un lugar bastante tranquilo, en el cual normalmente no ocurría demasiado. Soy solo un caminate, un viajero que anda en búsqueda de información. Dijo en una breve descripción de si mismo, ya que aún debía mantener sus intenciones en secreto por miedo de que aquella bruja tuviera conexiones con algunos piratas de ese lugar, ya que nunca se sabía quien podía caer en su maldición.
¿Y que hay de ti? Es curioso que un gyojin venga esta isla, sobretodo para venir a comer la comida de la vieja Magda. Dice mientras que veía como el gyojin le pedía otra ronda al camarero antes de que le fuera a invitar una ronda.
Pues claro, cuando me termine mi botella estaré feliz de aceptarle ese regalo. Dice antes de darle otro trago más a su vaso, haciendo un leve gesto de gusto al beber aquel shot de ron que bajaba por su garganta.