Hunter D. Alpha
Kurogami no Alpha
19-09-2024, 06:46 AM
Tomas el lienzo cortado, que fue lo que más te ha llamado la atención. En cuanto a lo otro, lo dejas allí junto a él. El dinero lo puede necesitar para recuperarse cuando despierte, aunque probablemente va a necesitar más que un doctor para atender aquello. Llegas al barco, y te parece una lástima que el otro compañero huya con dejado el resto de las cosas. Sinceramente, no lo consideraste una mala jugada, pero tampoco una buena. Aun lo tenías a rango de tiro. Podías sacar cualquiera de tus armas de rango y darle. Pero decides no hacerlo. No es una presa, es alguien débil que simplemente hace lo que puede para sobrevivir. Pero a diferencia del otro, este no se ha propuesto a ponerse en tu camino, así que no has tenido que acabar con él.
Pero por otro lado, lo que queda en el barco no es de nadie. Lo había abandonado y lo correcto era recoger lo valioso para venderlo y aun así tener más dinero para poder conseguir recursos. Un extra, la verdad que prefieres no negarte a tomar. Pero aun no. Eso lo dejarías para el final, por ahora te dispones a seguir investigando y, tu nariz siente olor a muerte. Sigues buscando hasta llegar al lugar y, puedes ver con claridad la carnicería. Todo esto, no era causado por un simple naufragio. El borracho tenía razón. La quimera había sido atacada. ¿Cuántos serian? ¿Serían mucho? ¿Serian pocos? ¿Serán fuertes? Un centenar de preguntas invaden tu mente. Pero todas ellas solo hacen crecer ese sentimiento de querer ir a averiguar quién ha hecho esto y cazarlos.
Porque aun así, yo pienso lo mismo que tu mi querido narrador. No es de piratas hacer justicia. Ni de lejos, los piratas son criaturas libres guiadas por deseo, ambición y codicia. Pero tu y yo sabemos que lo que impulsa a este pequeño es algo más allá de eso.
Porque aquí no ha venido a hacer justicia, ha venido a cazar.
Pero por otro lado, lo que queda en el barco no es de nadie. Lo había abandonado y lo correcto era recoger lo valioso para venderlo y aun así tener más dinero para poder conseguir recursos. Un extra, la verdad que prefieres no negarte a tomar. Pero aun no. Eso lo dejarías para el final, por ahora te dispones a seguir investigando y, tu nariz siente olor a muerte. Sigues buscando hasta llegar al lugar y, puedes ver con claridad la carnicería. Todo esto, no era causado por un simple naufragio. El borracho tenía razón. La quimera había sido atacada. ¿Cuántos serian? ¿Serían mucho? ¿Serian pocos? ¿Serán fuertes? Un centenar de preguntas invaden tu mente. Pero todas ellas solo hacen crecer ese sentimiento de querer ir a averiguar quién ha hecho esto y cazarlos.
Porque aun así, yo pienso lo mismo que tu mi querido narrador. No es de piratas hacer justicia. Ni de lejos, los piratas son criaturas libres guiadas por deseo, ambición y codicia. Pero tu y yo sabemos que lo que impulsa a este pequeño es algo más allá de eso.
Porque aquí no ha venido a hacer justicia, ha venido a cazar.