Drake Longspan
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08-10-2024, 05:07 AM
Silver D. Syxel observaba con detenimiento el barco en el horizonte mientras se acercaban lentamente. Su rostro serio revelaba que no tomaba a la ligera lo que se avecinaba. El humo negro que ascendía desde el mercante le inquietaba, pero su espíritu pirata lo impulsaba a descubrir lo que estaba sucediendo. Con una expresión concentrada y una mirada aguda, el capitán activó su Kenbunshoku Haki (Haki de Observación), extendiendo sus sentidos para captar cualquier presencia o movimiento en el barco enemigo.
Gracias a esta técnica, Silver pudo percibir que había cuatro presencias en la parte inferior del barco, cerca del origen del humo. Ninguno de los tripulantes del mercante parecía haberse percatado de la proximidad del barco pirata, lo cual era inusual. Quizás el humo y la situación en el mercante estaban manteniendo a su tripulación demasiado ocupada como para notar la llegada de los piratas. Esto podría interpretarse de alguna forma como una valiosa ventaja táctica, a excepción de que realmente no sabían sus verdaderas intenciones. Aunque no podía ver con precisión lo que estaba sucediendo en la parte baja del barco mercante, un aura en esa presencia destacaba. Era una sensación diferente, algo que emanaba poder o, al menos, una fuerte concentración. La falta de control sobre aquel Haki le impedía verlo con claridad.
El barco fue izando velas para reducir la velocidad. Aunque Dharkel seguía sintiéndose débil, el medicamento comenzó a hacer efecto, y poco a poco fue recuperando algo de su compostura.
El viento soplaba suavemente, el agua seguía rompiendo contra el casco del barco, y la tensión crecía con cada metro que acortaban entre ambos navíos. Mientras tanto, en el mercante, los ocupantes seguían ajenos a la proximidad de los piratas, completamente absortos en lo que fuera que estuviera sucediendo en la parte inferior del barco. Todo apuntaba a que, en cuestión de minutos, la tripulación de Silver se encontraría cara a cara con el misterio que los aguardaba en el mercante humeante...
Gracias a esta técnica, Silver pudo percibir que había cuatro presencias en la parte inferior del barco, cerca del origen del humo. Ninguno de los tripulantes del mercante parecía haberse percatado de la proximidad del barco pirata, lo cual era inusual. Quizás el humo y la situación en el mercante estaban manteniendo a su tripulación demasiado ocupada como para notar la llegada de los piratas. Esto podría interpretarse de alguna forma como una valiosa ventaja táctica, a excepción de que realmente no sabían sus verdaderas intenciones. Aunque no podía ver con precisión lo que estaba sucediendo en la parte baja del barco mercante, un aura en esa presencia destacaba. Era una sensación diferente, algo que emanaba poder o, al menos, una fuerte concentración. La falta de control sobre aquel Haki le impedía verlo con claridad.
El barco fue izando velas para reducir la velocidad. Aunque Dharkel seguía sintiéndose débil, el medicamento comenzó a hacer efecto, y poco a poco fue recuperando algo de su compostura.
El viento soplaba suavemente, el agua seguía rompiendo contra el casco del barco, y la tensión crecía con cada metro que acortaban entre ambos navíos. Mientras tanto, en el mercante, los ocupantes seguían ajenos a la proximidad de los piratas, completamente absortos en lo que fuera que estuviera sucediendo en la parte inferior del barco. Todo apuntaba a que, en cuestión de minutos, la tripulación de Silver se encontraría cara a cara con el misterio que los aguardaba en el mercante humeante...