Umibozu
El Naufragio
09-10-2024, 02:34 AM
Los arpones golpearon en mi cuerpo hiriéndome seriamente, pero por suerte ninguno quedó clavado en mí. Aunque gracias al giro podría haber sacado provecho inicialmente, después hubieran sido más un lastre y un incordio para todo. En mi avance conseguí desmontar a varios de los enemigos de sus motos de agua. Lamenté estar en mi elemento, pues de haber estado en tierra firme aquello habría significado el fin del combate al haber aplastado por completo a los tipos. Tampoco podía lamentarme, porque en el agua era donde mi superioridad brillaba, no solo por los beneficios que me brindaba, sino por los perjuicios que aplicaba en los humanos y demás seres no acuáticos. Como fuera, mi avance me dejó en una posición desventajosa. Mala planificación. Ahora entre mi posición y la huida tenía a tres enemigos que difícilmente me iban a dejar escapar tranquilamente. Detuve el giro y me encaré de nuevo a mis rivales. Tras de mí estaba la abertura que ya me había encargado de hacer, pero era por dónde habían venido esos tipos, por lo que no era descabellado pensar que pudieran haber más o tener alguna trampa lista esperándome. No, si quería escapar tendría que acabar con esos tres o, como poco, pasar hasta el otro lado.
Una sonrisa se dibujó en mi rostro al tiempo que las membranas del cuello se expandían y plegaban varias veces. La presa había caído. Nuestro objetivo estaba cumplido. El agua salía a borbotones y el nivel descendía rápidamente. Aquello significaba varias cosas. La primera era que perdía mi superioridad estratégica. La segunda que si conseguía aplastar a los humanos con complejo de pez sería la última vez que tendría que hacerlo. Finalmente que ya daba igual lo que me pudiera pasar, mi papel estaba hecho y ahora los engranajes debían seguir girando hasta completar el plan. Tan solo esperaba que el grupo B estuviera ya listo para evitar la inundación masiva de la isla. Adopté una posición defensiva, atento a los tres. Mi altura y envergadura me daba una buena panorámica de mis rivales, pudiendo verlos a los tres a la vez. Todos ellos me apuntaban con sus armas y como si de un movimiento repetido por un espejo se tratara, los tres dieron un puñetazo hacia adelante con sus armas, disparándolas de esa manera tan peculiar. Tres balas volaron raudas hacia mí. ¿Por qué esos tipos habían decidido que yo era su final raid boss? En una posición aparentemente descubierta, encajé con precisión las balas, reduciendo de esa manera el daño recibido por cada una de ellas. A continuación inicié una carrera contra el buzo central para arrollarlo por completo al tiempo que llegaba a la presa. Cargué con fiereza y contundencia, empleando todo mi potencial
en un avance en línea recta.
Una sonrisa se dibujó en mi rostro al tiempo que las membranas del cuello se expandían y plegaban varias veces. La presa había caído. Nuestro objetivo estaba cumplido. El agua salía a borbotones y el nivel descendía rápidamente. Aquello significaba varias cosas. La primera era que perdía mi superioridad estratégica. La segunda que si conseguía aplastar a los humanos con complejo de pez sería la última vez que tendría que hacerlo. Finalmente que ya daba igual lo que me pudiera pasar, mi papel estaba hecho y ahora los engranajes debían seguir girando hasta completar el plan. Tan solo esperaba que el grupo B estuviera ya listo para evitar la inundación masiva de la isla. Adopté una posición defensiva, atento a los tres. Mi altura y envergadura me daba una buena panorámica de mis rivales, pudiendo verlos a los tres a la vez. Todos ellos me apuntaban con sus armas y como si de un movimiento repetido por un espejo se tratara, los tres dieron un puñetazo hacia adelante con sus armas, disparándolas de esa manera tan peculiar. Tres balas volaron raudas hacia mí. ¿Por qué esos tipos habían decidido que yo era su final raid boss? En una posición aparentemente descubierta, encajé con precisión las balas, reduciendo de esa manera el daño recibido por cada una de ellas. A continuación inicié una carrera contra el buzo central para arrollarlo por completo al tiempo que llegaba a la presa. Cargué con fiereza y contundencia, empleando todo mi potencial