Derian Markov
Lord Markov
12-10-2024, 01:30 AM
ALTO OYKOT
6:35 de la mañana
El maletín está cerrado con un candado numérico, un tipo de candado que en vez de abrirse con llave, se abre introduciendo una contraseña girando una serie de ruedas. Sin embargo, ¿quién necesita contraseñas cuando puede romper cosas con las manos? Sin apenas esfuerzo, destrozas el candado con tus dedos y abres el maletín. En el interior hay un montón de subcarpetas con documentos, un juego de plumas estilográficas con pinta de ser caras, una caja de almuerzo que si revisas verás que tiene un bocadillo y un termo de café, un bolso de mano con un kit de maquillaje básico pero de buena calidad y la cartera de la mujer. Cuando revisas las subcarpetas, ves que son fichas de empleados y datos de salarios. En la cartera encuentras también su tarjeta de identificación. Parece que se llama Sylvia Primm y es la encargada de contabilidad y recursos humanos de las instalaciones presa.
Los documentos en sí tienen algunos datos de interés que la Revolución podría encontrar útiles. Horarios de trabajo, notas sobre los trabajadores, información sobre sus familias... pero lo más interesante de todo está en la subcarpeta más fina. Esta última apenas tiene tres papeles. El primero tiene una serie de extractos bancarios con información escueta. Parece ser que enormes cantidades de berries (hablamos en total de cientos de millones a lo largo de meses) han sido enviados desde un banco extranjero a la cuenta de la presa. La única información sobre cuál es el banco de origen es un código alfanumérico y sobre el depositario de la transferencia, un número de cuenta. La segunda hoja es un mensaje para esta mujer, Sylvia, de parte de alguien llamado Avery Hogges. Dirías que te suena, ¿verdad? En el mensaje, Hogges le pide que haga una transferencia de parte del "dinero de Loguetown", cincuenta millones para ser precisos, para la construcción de una nueva fábrica. Por lo que dice en el documento, ya ha recibido aprobación de "los jefes".
La tercera hoja es un documento más preocupante. Lleva el emblema del Gobierno Mundial. Se trata de un documento oficial en el que el alguien llamado C. Hobb solicita a la presa un informe detallado de gastos de "la inversión". No detalla de qué se trata esa inversión, pero con los documentos anteriores probablemente puedas atar cabos y deducir, al menos en parte, qué está ocurriendo aquí.
Una vez echas un ojo a estos documentos, si te diriges a la presa, verás a dos personas arrodilladas junto al guardia, que está inconsciente. Parecen preocupados y estar intentando despertarle. En cualquier caso, parece que tienes vía libre para entrar.
Nota: en caso de que Lobo oculte el cuerpo, no habrá nadie en la puerta.
INSTALACIONES
6:35 de la mañana
- ¿Un músico? ¿Para los jefes? ¿Por qué nadie me ha contado nada? - el guardia arquea una ceja y suspira - Y aún encima si no te dejo pasar, luego me la cargo yo. Si es que... ¡eh! ¡Espera! - parecía que casi le tenías. Estabas convencido de que había colado, cuando de repente el hombre se alarma y empieza a levantar su fusil - ¡¿Dos extraños el mismo día en cuestión de minutos?! - no le dejas llegar a apuntarte con el arma. Tu puñetazo lo estampa contra la puerta y le hace caer sobre sus posaderas, tosiendo aturdido. No te cuesta terminar de dejarlo inconsciente sin causarle daños mayores. Lo malo es que al entrar mediante la violencia, el tiempo que tengáis para investigar probablemente sea más reducido.
En el interior de la caseta encuentras solo unas paredes de cementos iluminadas con bombillas eléctricas y unas escaleras que descienden. Si miras por el hueco, verás que son tranquilamente cuatro pisos de escaleras. Espero que tengas las patas en forma. En ninguno de los pisos ves puertas salvo en el nivel más profundo, donde hay dos puertas metálicas. En una pone "instalaciones" y en la otra "zona de descanso". Si abres la zona de descanso, verás un balcón amplio al aire libre con varias sillas. El suelo está un poco húmedo por la cercanía de los chorros de agua de la presa. Si abres la otra puerta, verás un pasillo. En el pasillo hay un hombre con una fregona dormitando contra la pared. En cuanto escucha el ruido de la puerta, se sobresalta y se pone a fregar para disimular, sin mirarte a la cara. Además de al trabajador cansado, puedes ver un montón de puertas con diferentes nombres en el lado izquierdo del pasillo. Algunas tienen simplemente nombres de personas junto con su cargo, mientras que en otras pone cosas como "sala de ingeniería", "almacén" o similares. En el lado derecho el pasillo solo tiene una única puerta metálica de seguridad al fondo de todo, sin ninguna clase de letrero.
6:35 de la mañana
El maletín está cerrado con un candado numérico, un tipo de candado que en vez de abrirse con llave, se abre introduciendo una contraseña girando una serie de ruedas. Sin embargo, ¿quién necesita contraseñas cuando puede romper cosas con las manos? Sin apenas esfuerzo, destrozas el candado con tus dedos y abres el maletín. En el interior hay un montón de subcarpetas con documentos, un juego de plumas estilográficas con pinta de ser caras, una caja de almuerzo que si revisas verás que tiene un bocadillo y un termo de café, un bolso de mano con un kit de maquillaje básico pero de buena calidad y la cartera de la mujer. Cuando revisas las subcarpetas, ves que son fichas de empleados y datos de salarios. En la cartera encuentras también su tarjeta de identificación. Parece que se llama Sylvia Primm y es la encargada de contabilidad y recursos humanos de las instalaciones presa.
Los documentos en sí tienen algunos datos de interés que la Revolución podría encontrar útiles. Horarios de trabajo, notas sobre los trabajadores, información sobre sus familias... pero lo más interesante de todo está en la subcarpeta más fina. Esta última apenas tiene tres papeles. El primero tiene una serie de extractos bancarios con información escueta. Parece ser que enormes cantidades de berries (hablamos en total de cientos de millones a lo largo de meses) han sido enviados desde un banco extranjero a la cuenta de la presa. La única información sobre cuál es el banco de origen es un código alfanumérico y sobre el depositario de la transferencia, un número de cuenta. La segunda hoja es un mensaje para esta mujer, Sylvia, de parte de alguien llamado Avery Hogges. Dirías que te suena, ¿verdad? En el mensaje, Hogges le pide que haga una transferencia de parte del "dinero de Loguetown", cincuenta millones para ser precisos, para la construcción de una nueva fábrica. Por lo que dice en el documento, ya ha recibido aprobación de "los jefes".
La tercera hoja es un documento más preocupante. Lleva el emblema del Gobierno Mundial. Se trata de un documento oficial en el que el alguien llamado C. Hobb solicita a la presa un informe detallado de gastos de "la inversión". No detalla de qué se trata esa inversión, pero con los documentos anteriores probablemente puedas atar cabos y deducir, al menos en parte, qué está ocurriendo aquí.
Una vez echas un ojo a estos documentos, si te diriges a la presa, verás a dos personas arrodilladas junto al guardia, que está inconsciente. Parecen preocupados y estar intentando despertarle. En cualquier caso, parece que tienes vía libre para entrar.
Nota: en caso de que Lobo oculte el cuerpo, no habrá nadie en la puerta.
INSTALACIONES
6:35 de la mañana
- ¿Un músico? ¿Para los jefes? ¿Por qué nadie me ha contado nada? - el guardia arquea una ceja y suspira - Y aún encima si no te dejo pasar, luego me la cargo yo. Si es que... ¡eh! ¡Espera! - parecía que casi le tenías. Estabas convencido de que había colado, cuando de repente el hombre se alarma y empieza a levantar su fusil - ¡¿Dos extraños el mismo día en cuestión de minutos?! - no le dejas llegar a apuntarte con el arma. Tu puñetazo lo estampa contra la puerta y le hace caer sobre sus posaderas, tosiendo aturdido. No te cuesta terminar de dejarlo inconsciente sin causarle daños mayores. Lo malo es que al entrar mediante la violencia, el tiempo que tengáis para investigar probablemente sea más reducido.
En el interior de la caseta encuentras solo unas paredes de cementos iluminadas con bombillas eléctricas y unas escaleras que descienden. Si miras por el hueco, verás que son tranquilamente cuatro pisos de escaleras. Espero que tengas las patas en forma. En ninguno de los pisos ves puertas salvo en el nivel más profundo, donde hay dos puertas metálicas. En una pone "instalaciones" y en la otra "zona de descanso". Si abres la zona de descanso, verás un balcón amplio al aire libre con varias sillas. El suelo está un poco húmedo por la cercanía de los chorros de agua de la presa. Si abres la otra puerta, verás un pasillo. En el pasillo hay un hombre con una fregona dormitando contra la pared. En cuanto escucha el ruido de la puerta, se sobresalta y se pone a fregar para disimular, sin mirarte a la cara. Además de al trabajador cansado, puedes ver un montón de puertas con diferentes nombres en el lado izquierdo del pasillo. Algunas tienen simplemente nombres de personas junto con su cargo, mientras que en otras pone cosas como "sala de ingeniería", "almacén" o similares. En el lado derecho el pasillo solo tiene una única puerta metálica de seguridad al fondo de todo, sin ninguna clase de letrero.