King Kazma
Shiromimi
31-07-2024, 07:27 PM
Hacía poco tiempo que conocía a Jack, pero era suficiente como para saber que él estaba enamorado de su profesión. No desatendía sus necesidades físicas, pero dudaba mucho que alguna mujer robara su corazón y atención más allá de una noche. Le gustaría haber añadido algo a lo que dijo sobre pasar la noche con una mink, pero no se había criado en una sociedad mink, así que no sabía ni lo que se decía sobre ellas dentro de su propia raza. Pero era indudable que con el pelaje proporcionaba protección al frío… Aunque era horrible en situaciones de calor. Recordaba pasarlo especialmente mal en los días calurosos del verano, pasándose el tiempo con el pelaje mojado para refrescarse, aunque no le gustara mucho la sensación de estar mojado todo el tiempo. Desde que tenía el poder de la Netsu Netsu no Mi, el calor y el frío no habían vuelto a suponer un problema para él, lo cual agradecía.
No podía dar la razón a Alexander. King no tenía labia como estaba diciendo, normalmente era meditabundo, aunque con su tripulación hablaba más de lo habitual para propiciar la forja de lazos de amistad. Pero lo que decía de que el amor no tenía barreras… ¿Él podría enamorarse de una humana? ¿O una gyojin? Tal vez si la situación fuera favorable para ello… No podía estar tan seguro como para decir que no, no conocía gyojins, y ya había conocido a dos humanos que se comportaban como personas civilizadas y no como trogloditas… Bueno, Jack se quedaba a medias entre ambas cosas.
Mientras que Jack amedrentaba a los niños curiosos y Alexander jugaba con ellos, King los esquivaba cuando iban hacia él, cosa que parecieron tomar como un juego, pero uno que nunca podrían ganar. No quería darles una patada a unos niños, pero se estaban poniendo molestos y le recordaban a cuando él era niño y los demás sólo se acercaban a él para tirarle del pelo y las orejas porque era raro. Y el nuevo Raiden era alguien educado. Curioso que los dos mink lobos que conocía eran al mismo tiempo las personas más educadas que conocía. Uno pensaría que serían salvajes. – Nuestros planes son viajar. Yo quiero ver el mundo con mis ojos y vivir la historia. Ser libre de ir adónde quiera. Los demás, cada uno tiene sus propios sueños. Ella, por ejemplo, quiere vengarse de alguien. – Dijo, señalando a Anissa al final.
Entonces entraron en la posada y la primera en pedir algo de beber fue Anissa. Los fumadores necesitaban reponer combustible, y él… - Seis habitaciones. Y anota todo lo que pidamos ahora en la cuenta. – Obviamente iba a inflar esa cuenta durante los días que estuvieran ahí para luego marcharse sin pagar ni un vaso de agua. No tenia dinero, y dudaba ganar tanto dinero en su estancia como para que le diera igual pagar el precio de varias habitaciones y comidas. – Tu contacto está en Gray Terminal, ¿no? Iré contigo, tiene pinta de ser un lugar peligroso. – Y un capitán debía proteger a sus subordinados, además de nakamas, y no podía negar que la perspectiva de algo de acción le atraía.
No podía dar la razón a Alexander. King no tenía labia como estaba diciendo, normalmente era meditabundo, aunque con su tripulación hablaba más de lo habitual para propiciar la forja de lazos de amistad. Pero lo que decía de que el amor no tenía barreras… ¿Él podría enamorarse de una humana? ¿O una gyojin? Tal vez si la situación fuera favorable para ello… No podía estar tan seguro como para decir que no, no conocía gyojins, y ya había conocido a dos humanos que se comportaban como personas civilizadas y no como trogloditas… Bueno, Jack se quedaba a medias entre ambas cosas.
Mientras que Jack amedrentaba a los niños curiosos y Alexander jugaba con ellos, King los esquivaba cuando iban hacia él, cosa que parecieron tomar como un juego, pero uno que nunca podrían ganar. No quería darles una patada a unos niños, pero se estaban poniendo molestos y le recordaban a cuando él era niño y los demás sólo se acercaban a él para tirarle del pelo y las orejas porque era raro. Y el nuevo Raiden era alguien educado. Curioso que los dos mink lobos que conocía eran al mismo tiempo las personas más educadas que conocía. Uno pensaría que serían salvajes. – Nuestros planes son viajar. Yo quiero ver el mundo con mis ojos y vivir la historia. Ser libre de ir adónde quiera. Los demás, cada uno tiene sus propios sueños. Ella, por ejemplo, quiere vengarse de alguien. – Dijo, señalando a Anissa al final.
Entonces entraron en la posada y la primera en pedir algo de beber fue Anissa. Los fumadores necesitaban reponer combustible, y él… - Seis habitaciones. Y anota todo lo que pidamos ahora en la cuenta. – Obviamente iba a inflar esa cuenta durante los días que estuvieran ahí para luego marcharse sin pagar ni un vaso de agua. No tenia dinero, y dudaba ganar tanto dinero en su estancia como para que le diera igual pagar el precio de varias habitaciones y comidas. – Tu contacto está en Gray Terminal, ¿no? Iré contigo, tiene pinta de ser un lugar peligroso. – Y un capitán debía proteger a sus subordinados, además de nakamas, y no podía negar que la perspectiva de algo de acción le atraía.