Derian Markov
Lord Markov
21-10-2024, 02:04 PM
(Última modificación: 21-10-2024, 02:05 PM por Derian Markov.)
No parece que ninguna de estas personas sea quien buscas... al menos no en las que te has centrado. Ni los del cuarto de personal, ni el hombre con quien hablas, ni la pareja. Tras centrarte específicamente en sus auras crees que es seguro descartar que sean alguna de las tres voces que sentiste con tu kenbunshoku haki. Sin embargo, tu búsqueda no se queda sin resultados. El hombre al que has hablado, un señor de entorno a los cincuenta, regordete, de pelo oscuro con una calva incipiente y vestido con un traje púrpura sorprendentemente elegante para la elección de color, te responde algo de lo más revelador - Ah, ¿el incidente de hace un momento? Uno de los administradores del casino entró apresuradamente acompañado de una señorita, una camarera. Una absoluta falta de modales, le digo. Entró dando un golpe a la puerta y cruzó la sala a toda velocidad, incluso casi derriba una de las mesas de canapés. Cruzó esa puerta de allá - te dirá, si le preguntas por la dirección. La puerta que señala es la de la izquierda, la que es igual a por la que has entrado. Si le preguntas por la camarera, te contestará - ¿La señorita? Mantuvo un poco más de decencia, aunque era evidente que estaba inquieta. Es esa de ahí, puede preguntarle usted mismo, señor.
En el momento en que señala a la camarera, ves que se trata de una mujer joven, de no más de veinte años, con el pelo castaño claro recogido en una coleta. Por su mirada fija en vosotros, te das cuenta de que os estaba prestando atención y alejándose discretamente. Así como ve al hombre señalarla, rompe cualquier intento de ser discreta y empieza a esprintar hacia la puerta de seguridad. Podrías intentar cazarla, de hecho aunque te lleva algo de ventaja y eso te dificultará un poco alcanzarla, te das cuenta de que no es tan rápida como tú. Sin embargo, en ese momento percibes algo con tu haki. Un aura, hasta ahora discreta, emite una fuerte intención asesina y percibes dos voces apagarse, desconoces si muertas o inconscientes. La sensación viene de debajo vuestra, del siguiente piso. Y un detalle más importante: reconoces el aura como una de las tres que sentiste.
Debes tomar una decisión rápido. Si vas a por la camarera, tal vez pierdas a tu otro objetivo de nuevo. No puedes mantener tu concentración en todo a la vez y hay demasiadas voces en el casino. Además, es seguro deducir que en su huida ha empezado a tomar medidas drásticas y a eliminar a quienes se han metido en su camino. Sin embargo, si dejar irse a la camarera para perseguir a esta otra presencia, tal vez lo pierdas todo. El tiempo corre y sabes gracias a tu haki que la presencia del piso inferior está en movimiento. Ninguno de tus dos objetivos pretende perder ni un segundo en su huida.
En el momento en que señala a la camarera, ves que se trata de una mujer joven, de no más de veinte años, con el pelo castaño claro recogido en una coleta. Por su mirada fija en vosotros, te das cuenta de que os estaba prestando atención y alejándose discretamente. Así como ve al hombre señalarla, rompe cualquier intento de ser discreta y empieza a esprintar hacia la puerta de seguridad. Podrías intentar cazarla, de hecho aunque te lleva algo de ventaja y eso te dificultará un poco alcanzarla, te das cuenta de que no es tan rápida como tú. Sin embargo, en ese momento percibes algo con tu haki. Un aura, hasta ahora discreta, emite una fuerte intención asesina y percibes dos voces apagarse, desconoces si muertas o inconscientes. La sensación viene de debajo vuestra, del siguiente piso. Y un detalle más importante: reconoces el aura como una de las tres que sentiste.
Debes tomar una decisión rápido. Si vas a por la camarera, tal vez pierdas a tu otro objetivo de nuevo. No puedes mantener tu concentración en todo a la vez y hay demasiadas voces en el casino. Además, es seguro deducir que en su huida ha empezado a tomar medidas drásticas y a eliminar a quienes se han metido en su camino. Sin embargo, si dejar irse a la camarera para perseguir a esta otra presencia, tal vez lo pierdas todo. El tiempo corre y sabes gracias a tu haki que la presencia del piso inferior está en movimiento. Ninguno de tus dos objetivos pretende perder ni un segundo en su huida.