King Kazma
Shiromimi
24-10-2024, 02:37 AM
(Última modificación: 24-10-2024, 02:44 AM por King Kazma.)
5 Primavera 723
Tenía frío a pesar de ser una noche cálida. Llevaba un año viajando y el saco de dormir había ido perdiendo poco a poco el relleno. Todavía servía y abrigaba suficiente, pero para las zonas más frías necesitaba una manta a mayores. Tal vez era momento de hacerse con un saco de dormir nuevo, más grande de ser posible, ya que aquel se le hacía demasiado estrecho y en los últimos meses había crecido, así que ya no podía meterse hasta el cuello. Pero la razón por la que tenía frío no era la falta de abrigo, al fin y al cabo era una noche cálida de primavera y estaba refugiado del viento en una cueva. El problema era que tenía fiebre. Estaba enfermo de resfriado o gripe o a saber qué.
En momentos como ese recordaba la calidez de su casa. Puede que el pueblo se sintiera como un lugar frío y solitario para él, pero su casa era cálida y agradable. Ahora que caía en la cuenta, era una casa bien mantenida, sin desperfectos notables. Y además nunca había faltado comida en la mesa. A pesar de ser minks en una sociedad humana, sus padres realmente se esforzaban por tener una buena vida en casa… Tal vez debería enviarles una carta, hacerles saber que estaba bien porque deberían estar muy preocupados. Los había abandonado sin decir nada cuando ellos le habían dado todo lo que estaba en sus manos darle. No había sido muy justo con ellos, la verdad. Y realmente podía recordar de forma vívida cómo su madre mantenía un paño húmedo y fresco en su frente toda la noche y una infusión caliente en la mesilla. Si el paño se calentaba, lo refrescaba con agua nueva, y si la infusión se enfriaba, la volvía a calentar o preparaba otra.
En la vida que había elegido llevar ya no había lugar para ese tipo de cuidados, ni para depender de alguien. Pero tal vez, si hubiera tenido más paciencia, si hubiera aprendido a ver las cosas desde el punto de vista de sus padres… todavía estaría en casa y esa enfermedad la pasaría con su madre velando por él. No estaría TAN mal, había cosas peores que ser el marginado del pueblo. Pero tal vez debería intentar dormir, porque la fiebre le estaba haciendo pensar de forma muy distinta a su yo habitual.