Terence Blackmore
Enigma del East Blue
01-08-2024, 11:01 PM
(Última modificación: 11-08-2024, 03:54 PM por Terence Blackmore.)
Día 11 del Verano de 724
-¡Bienveniiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiiidooooooooooooooooooooooooooos a la noche de los juegooooooooooooos!- sonó con una fuerte reverberación durante todo el improvisado coliseo con un tono que carraspeaba con una voz bastante carismática.
El lugar retumbaba con un fuerte aire viciado donde el sonido golpeaba en las superficies metálicas y devolvía un sonido estridente pero comprensible.
Apenas habías llegado a la puerta de aquel tugurio cuyas formas te eran increíblemente extrañas, y no había sido fácil llegar, pero siguiendo el rastro del olor de la sangre seca y del nauseabundo sudor y el terrible vocerío, lo habías logrado.
En la remota Isla de Dawn, un rincón olvidado en la magna geografía del Reino de Goa encontramos un basurero llamado Gray Terminal. Algunas noches, las almas más ignotas se reúnen para vociferar al unísono los vítores del fragor de la batalla que acontecen en una estructura tan peculiar como imponente llamada simplemente "El Club".
En este coliseo de la modernidad, crisol de ingenio y necesidad así como supervivencia, podemos atisbar lo que parece un gigante rompecabezas de chatarra en el que metales oxidados y retorcidos se unen a planchas de plásticos de colores vibrantes y restos de maderas de barco todavía putrefactas y desgastadas que se entrelazan formando una arquitectura única en una suerte de escultura viviente que es incluso menos aberrante que las personalidades que allí se reúnen.
Nada más entrar en el interior, encontramos un ambiente cargado de pura adrenalina, vibrante electricidad que se conduce de espectador a espectador en una experiencia catártica. Las gradas, construidas con restos neumáticos y restos de casas de madera, tiemblan de excitación mientras ofrecen cierta vista privilegiada de un ring central, una plataforma circular fabricada con metales pulidos y peligrosos alambres que lo rodean de un radio total aproximado de cinco metros.
El Club es más que un simple coliseo, es el símbolo de la desmedida codicia de unos, de la represión convertida en furia del pueblo y también una macabra forma de expresión artística.
Aquí no solo la lucha es cuestión de física, sino también de estrategia.
Rengetsu D. Tenji, recuerdas claramente la orden de un hombre amortajado de mayor rango en la organización a la que perteneces. Te haces una idea de su apariencia en relación con el silbido del viento que acaricia su capa y dilucidas que viste un pesado ropaje amplio. No sabes más, pero no es la primera vez que escuchas esa voz.
Debes abrir la carta que te han dado, una carta que normalmente no podrías leer, pero que está en un código que afortunadamente conoces.