Mayura Pavone
El Pavo Real del Oceano
24-10-2024, 07:59 PM
Mayura observó cómo la katana de Ren volaba por el aire, aterrizando a un par de metros a su izquierda. Un pequeño destello en la hoja de su propia katana le llamó la atención: sangre. Sonrió para sí mismo, satisfecho de haber dejado una marca en su oponente que demostraba su superioridad en el manejo de espadas. Sin embargo, no tuvo mucho tiempo para regodearse en su logro, ya que la agilidad de Ren se puso nuevamente de manifiesto cuando este, al este alejarse un poco realizó un rápido movimiento, lanzando dos cuchillos directamente hacia el pecho del elegante pirata.
El Pavo Real del Océano solo se preocupaba de su integridad física, no le interesaban los detalles innecesarios y no estaba dispuesto permitirse que lo tocaran con algo tan degradante como cuchillos lanzados. Con la elegancia que lo caracterizaba, Mayura se mantuvo apoyado en la misma pierna izquierda y espero a que cada cuchillo llegará hacia la distancia necesaria. El primero fue desviado con la espada derecha que desenvainó en el momento justo para chocar su filo con el cuchillo e inutilizar el ataque. Mientras, el segundo fue deviado de la misma forma con la espada izquierda que había llevado a posición normal mientras su oponente se había alejado de él.
No había tiempo de jugar, si bien el pirata hubiera preferido no continuar con un combate que estaba destinado a su victoria, le era claro que la determinación de su contrincante no permitiría que esto acabara antes de que alguno quedara fuera de combate. Con el caos que habían armado, era solo cuestión de tiempo para que la marina llegara y ambos se vieran envueltos en problema. No podía darle de larga al asunto y por ende, no podía permitirse que Ren recuperara su katana.
Observó de reojo cómo el peliverde se desplazaba hacia el arma caída. — Parece que vas a necesitar algo más que cuchillos y esa espada, querido. — pronunció con su habitual tono burlón con una sonrisa traviesa que ocultaba su creciente hambre de atención, mientras se impulsaba en dirección hacia Ren esquivando los restos de los objetos que yacían en el suelo. Tras acortar la distancia, utilizaría su katana izquierda para buscar herir sus extremidades dominantes y ver si podía dejarlo lo suficientemente herido para evitar continuar con el combate.
Mayura, siempre un maestro de la elegancia y el cálculo, mantenía su segunda katana lista, esperando el próximo movimiento de su oponente. De haber fallado o acertado ese ultimo ataque, el pirata buscaría nuevamente ganar distancia con un salto de tres metros hacia detrás, el pirata empezaba a sentir el cansancio y ganar distancia le serviría para recuperar un poco el aliento y mantenerse en el combate hasta el final.
El Pavo Real del Océano solo se preocupaba de su integridad física, no le interesaban los detalles innecesarios y no estaba dispuesto permitirse que lo tocaran con algo tan degradante como cuchillos lanzados. Con la elegancia que lo caracterizaba, Mayura se mantuvo apoyado en la misma pierna izquierda y espero a que cada cuchillo llegará hacia la distancia necesaria. El primero fue desviado con la espada derecha que desenvainó en el momento justo para chocar su filo con el cuchillo e inutilizar el ataque. Mientras, el segundo fue deviado de la misma forma con la espada izquierda que había llevado a posición normal mientras su oponente se había alejado de él.
No había tiempo de jugar, si bien el pirata hubiera preferido no continuar con un combate que estaba destinado a su victoria, le era claro que la determinación de su contrincante no permitiría que esto acabara antes de que alguno quedara fuera de combate. Con el caos que habían armado, era solo cuestión de tiempo para que la marina llegara y ambos se vieran envueltos en problema. No podía darle de larga al asunto y por ende, no podía permitirse que Ren recuperara su katana.
Observó de reojo cómo el peliverde se desplazaba hacia el arma caída. — Parece que vas a necesitar algo más que cuchillos y esa espada, querido. — pronunció con su habitual tono burlón con una sonrisa traviesa que ocultaba su creciente hambre de atención, mientras se impulsaba en dirección hacia Ren esquivando los restos de los objetos que yacían en el suelo. Tras acortar la distancia, utilizaría su katana izquierda para buscar herir sus extremidades dominantes y ver si podía dejarlo lo suficientemente herido para evitar continuar con el combate.
DIL301
DILETANTE
Ofensiva Activa
Tier 3
No Aprendida
39
2
Empuñando su arma el usuario buscará siempre golpear a los puntos clave de la fisonomía de sus adversarios con el fin de que deban soltar sus armas provocando un [Desarme] y se queden indefensos durante la batalla, su buena habilidad y manejo le permiten impactar en un instante a todas las extremidades que porten un arma casi simultáneamente.
Golpe Básico + [FUEx2,5] de Daño a Determinar
Mayura, siempre un maestro de la elegancia y el cálculo, mantenía su segunda katana lista, esperando el próximo movimiento de su oponente. De haber fallado o acertado ese ultimo ataque, el pirata buscaría nuevamente ganar distancia con un salto de tres metros hacia detrás, el pirata empezaba a sentir el cansancio y ganar distancia le serviría para recuperar un poco el aliento y mantenerse en el combate hasta el final.