Rocket Raccoon
Rocket
25-10-2024, 03:12 AM
Seguía tomando de mi pequeña taza lo poco del café que quedaba. Quizás llevaba aquí poco menos de una hora, y para este entonces ya estaba algo frío el líquido. Pero aquello fue culpa mía, enteramente mía. De por sí, me lo habría terminado ya mucho antes, pero al aparecer este sujeto indescifrable, había cambiado por completo el cómo había planeado la mañana. Lo cual no era mucho para serles sincero. El único plan era venir aquí, relajarme con una buena bebida calentita y luego ir vagando por aquí y por allá entre las calles de Loguetown. Le había cogido cierto agrado a esta ciudad en particular. Tenía a la base marina, aquí mismo, una de las enormes. Y siempre me venía bien molestarles un poco por aquí y por allá.
-¿Diez como tú? Jaaa aja no jodas, apenas se puede aguantar a uno, no me imagino a diez jajajajaja. Joder eh. Tanto billete así entonces... joder eh- Terminaba con la bebida y dejaba la taza en su lugar, mientras seguía escuchando al rubio. Era en cierto modo interesante, o por lo menos llamativo. Diez hermanos... yo no tenía ninguno, ¿o quizás sí? Seguramente sea algo que nunca sabré. Aunque ya hacía bastante tiempo que había dejado de darle vueltas a ese asunto. -Yo no tengo ninguno de esos. Joder eh. Ni padres, ni hermanos... soy yo y el puto mundo. Joder eh-
Su historia giró repentinamente a algo que había recordado leer en aquellos libros en donde me tenían capturado. 'Que yo recuerde no fue así lo que vi...' Pensaba, ya que había algo de desajuste con las palabras que este tipo me decía, con las que había leído anteriormente. Y según recordaba, aquellos libros siempre contenían escritos muy certeros sobre lo que se planteaba en ellos. Pero había algo más en sus palabras que me llamaba mucho el interés. Hablaba sobre una revolución, y al parecer a gran escala.
-Está bien, está bien, tengo mil y una ideas de molestar a esos malnacidos. Joder eh.- Buscaba entre mis telas algunas monedas o billetes para saldar la cuenta del café, las dejaba a un lado del mismo e instaba a Lemon a dejar el lugar. -Vámonos de aquí, hay oídos. Joder eh-. Espere que terminara lo suyo para seguir con la charla. No me gustaba del todo andar soltando que estoy en contra de precisamente la gente que gobierna y vigila estos alrededores. Quién sabe si hay algún familiar o un pendejo novato que quiera unirse a sus filas. Era mejor seguir hablando en otra parte.
-¿Qué es esa mierda de una rebelión? Joder eh. Me interesa bastante, joder a esos hijos de puta... y ya estoy cansado de quemar banderitas y hacer grafitis. Joder eh-
-¿Diez como tú? Jaaa aja no jodas, apenas se puede aguantar a uno, no me imagino a diez jajajajaja. Joder eh. Tanto billete así entonces... joder eh- Terminaba con la bebida y dejaba la taza en su lugar, mientras seguía escuchando al rubio. Era en cierto modo interesante, o por lo menos llamativo. Diez hermanos... yo no tenía ninguno, ¿o quizás sí? Seguramente sea algo que nunca sabré. Aunque ya hacía bastante tiempo que había dejado de darle vueltas a ese asunto. -Yo no tengo ninguno de esos. Joder eh. Ni padres, ni hermanos... soy yo y el puto mundo. Joder eh-
Su historia giró repentinamente a algo que había recordado leer en aquellos libros en donde me tenían capturado. 'Que yo recuerde no fue así lo que vi...' Pensaba, ya que había algo de desajuste con las palabras que este tipo me decía, con las que había leído anteriormente. Y según recordaba, aquellos libros siempre contenían escritos muy certeros sobre lo que se planteaba en ellos. Pero había algo más en sus palabras que me llamaba mucho el interés. Hablaba sobre una revolución, y al parecer a gran escala.
-Está bien, está bien, tengo mil y una ideas de molestar a esos malnacidos. Joder eh.- Buscaba entre mis telas algunas monedas o billetes para saldar la cuenta del café, las dejaba a un lado del mismo e instaba a Lemon a dejar el lugar. -Vámonos de aquí, hay oídos. Joder eh-. Espere que terminara lo suyo para seguir con la charla. No me gustaba del todo andar soltando que estoy en contra de precisamente la gente que gobierna y vigila estos alrededores. Quién sabe si hay algún familiar o un pendejo novato que quiera unirse a sus filas. Era mejor seguir hablando en otra parte.
-¿Qué es esa mierda de una rebelión? Joder eh. Me interesa bastante, joder a esos hijos de puta... y ya estoy cansado de quemar banderitas y hacer grafitis. Joder eh-