Gautama D. Lovecraft
El Ascendido
25-10-2024, 07:24 PM
KENB601
KENBUNSHOKU
Haki intermedio
Tier 6
No Aprendida
9
2
Permite al usuario percibir con precisión la presencia de otros seres vivos en un área, siendo capaz de apreciar las emociones que exterioricen y de forma superficial las hostilidades que realmente tienen. Así como estimar de forma general quién es alguien más fuerte o más débil que él. Si lo activa puede anticiparse a un ataque obteniendo para ello un bono de +10 [Reflejos].
Área: [VOLx15] metros | +10 [REF]
BUSO401
BUSOSHOKU
Haki básico
Tier 4
No Aprendida
8
2
Permite al usuario recubrir hasta dos extremidades o dos armas con haki, tornándose estas de un color oscuro y brillante como el metal, siendo capaz de golpear los cuerpos de todo tipo de Akumas. Obteniendo un bono de +15 en los daños que aplique el Haki y +5 [Resistencia] ante daños y efectos. (En caso de querer recubrir solo pequeñas zonas del cuerpo, inferiores a la mitad del recubrimiento máximo, el coste bajará a la mitad)
+15 en los daños físicos con Haki imbuido y +5 [Resistencia] ante daños y efectos en el área.
ARM401
ARTISTA MARCIAL
Utilidad Mantenida
Tier 4
No Aprendida
58
43
2
El usuario comenzara a Canalizar a lo largo de 1 Turno en lo que activa y tensa todos sus músculos, adquiriendo un estado de concentración absoluta sobre sus movimientos y los de sus adversarios. Moviéndose y atacando con más fluidez y potencia incrementando el Daño que causa en +10.
+8 [Agilidad] / +8 [Fuerza]
La victoria ante el lunarian se consagró cuando aquel puñetazo se hundió en su costado, pues su envergadura aunque a priori pareciera intimidante, lo hacían un blanco fácil en las distancias cortas, donde desplegaba todo mi potencial. Fue rechazado como un saco de carne gigante mientras algunas plumas negras volaban al desquitarse de sus alas, alejándose por el impacto metros y metros más allá. Estaba k.o.
Acto seguido, volví con el joven Tao, el cual me llevaría hasta el templo del que fue raptado mientras me contaba la situación por el camino. Por mi mente se empezaban a definir algunas supuestas situaciones que podían darse, así como actuar ante ellas, con la incógnita de desconocer a los otros dos compañeros que acompañaban al de antes. ¿Qué hacían allí? ¿Serían igual de rápidos? ¿Quizá más poderosos? Lo que sí tenía claro era que eran 2, y eso suponía peores variantes contra mí en el caso de volver a pelear, pues me notaba algo mermado tras el encuentro anterior. Visualicé una estrategia básica en peleas en desventaja, la cual recuerdo haberla trabajado también en el templo, pero aquí, fuera de sus muros no las tenía todas conmigo, no al menos hasta que pudiera evaluar de más de cerca a los 2 seres que sentía centenas de metros más allá.
Por el camino, fui escuchando atentamente las palabras del niño calvito, su inocencia me procesaba un sentimiento protector que incluso tumbaba la templanza que me caracterizaba, y me reconocí que si la pasara algo, me sería difícil responder con mi particular serenidad. Me contó acerca de su cometido, y su forzada lectura hacia los textos del templo, mostrando una preocupación a tener en cuenta, algo que despertó en mí cierta curiosidad, pues ¿Qué leyó que no podía decirlo? ¿Qué tipo de reliquia había en aquel templo como para que lo asaltaran? Probaría con él para intentar saber más acerca del templo.
- ¿Qué leíste? -
Le pregunté para intentar conocer las lecturas que realizó, esperando que el joven pudiera compartirlas conmigo, no obstante, el joven siguió hablando. Sus palabras calaron en mi con bastante incidencia, me acordé de Nyrio, del legado que estaba en juego, del antiguo maestro y de todos los recuerdos que aún albergaba en mí sobre el Templo Gautama, no podía consentir que nadie con malas artes e intenciones lo profanase, aunque me tuviera que costar la vida. Hubo algo que me resultó especialmente importante una vez Tao terminó su explicación.
-... Activémosla. -
Dije un segundo después de terminar el joven, refiriéndome a la supuesta protección que albergaba el templo para proteger su tesoro. Es cierto que no las tenía todas conmigo, pero lo que sí sabía es que al igual que el Templo Gautama tenía para proteger sus tesoros de posibles asaltantes, no descartaba que este tuviera también algo para repeler o mermar a los asaltantes que osaran perpetrarlo para robar la reliquia que contenía. Quizá, podría ser una buena baza para tenderles una trampa a los lunarian que esperaban allí, y ganar con esto cierta ventaja contra ellos en el caso de que se produzca una nueva contienda. Tenía que usar todos los recursos a mi alcance para sacar todo el provecho que pudiera, aunque desconociera que tipo de protección tendría el sitio, si era una más defensiva o por el contrario agresiva, pero el plan improvisado estaba trazado, y Tao debía de intervenir también en él para activar la protección en el caso de que esta nos pudiera beneficiar contra los enemigos.
El templo y las siluetas se dibujaron al fin de manera más definida dentro de la gran explanada de roca carmesí. Bajaron de las escaleras y aguardaron nuestra llegada como si nos estuvieran esperando. Suponía que tenían que estar en guardia sabiendo que si su compañero se fue con Tao y no volvió, debía de ser a causa de mi presencia, por lo que me preparé para lo que pudiera acontecer.
Llegamos hasta ellos hasta posicionarnos a una distancia de algo más de 15 metros. Junté las palmas de mis manos para transmitir y hacer constatar aún más mi apariencia de monje, guardé silencio esperando a que Tao colaborase de acuerdo al plan, y la tipa, parece que nos dio pie a hacerlo, pues nos dio la posibilidad de colaborar en la apertura de lo que fuera que hubiera allí dentro. La tensión podría palparse en el ambiente, el cual se presentaba conflictivo, seguro que no se fiarían de nosotros, pero había que apostar por el plan, Tao debía de aportar su granito de arena con la palabra, y yo lo haría con los puños cuando fuera necesario.