Lance Turner
Shirogami
29-10-2024, 09:07 AM
(Última modificación: 04-11-2024, 11:33 PM por Lance Turner.)
El suelo de piedra tembló violentamente a nuestro alrededor cuando el extraño sujeto cayó como un meteorito, levantando una nube de polvo que envolvió la calle y dejó atónitos a todos los que miraban. Por un momento, la conmoción fue tal que apenas podía distinguir las figuras que se acercaban para ver qué había causado semejante impacto.
Segundos antes, había logrado empujar a Juuken para evitar que el muy cabeza alocada atacase con sus armas al tipo que provenía desde el cielo. Había que tener mucho cuidado a la hora de empezar un posible combate en cualquier sitio.
Cuando esta polvareda comenzó a disiparse, no pude evitar abrir los ojos como platos ante el espectáculo, preguntándome si el tipo que acababa de caer de semejante altura estaría siquiera consciente, gravemente herido, o peor aún, muerto.
Juuken, me había preguntado como estaba, pero en ese momento no pude responderle bien. Él parecía que se limitaba a mirarme con una mezcla de confusión y nervios, parecía no comprender bien que acababa de pasar. Es muy probable que no esperase ese empujón que le di, pero esta era una conversación que tendría con él en otro momento. Y ahí estaba yo, frente a un hombre que, minutos antes, saltaba y gritaba como un loco, preguntándome sobre qué hacer en esa situación.
- Oye... ¿Estás bie-? - Dije cortando mi pregunta al ver que comenzaba a moverse casi como si nada.
El impacto no parecía haberle afectado demasiado, lo cual era un indicio de que ese tipo era alguien lejos de lo normal e incluso interesante. Muchos estarían inmóviles en su lugar, o incluso muertos, y no hablaba precisamente de ciudadanos de a pie. El tipo intentaba reincorporarse, sacudiéndose el polvo y con una sonrisa que no parecía del todo cuerda. La escena me hizo preguntarme si estaba viendo algún tipo de ilusión, o si realmente este hombre tenía la resistencia de alguien que ignoraba la lógica común. Yo mismo me consideraba capaz de sobrevivir a una caída similar, pero nunca estaría tan bien como él se mostraba ahora.
- Bueno… eso fue un aterrizaje... impresionante - Dije, conteniendo una sonrisa mientras evaluaba la situación. - Parece que tienes buena resistencia, amigo.
Lo observé mientras se levantaba completamente, ignorando las miradas de desconcierto de la gente a su alrededor. La multitud, que se había reunido a nuestro alrededor, empezaba a disiparse, aunque algunos seguían atentos a cada uno de sus movimientos. Me quedé en silencio un segundo, intentando no reírme ante la peculiar situación que estábamos viviendo, mientras un pequeño boceto sobre el nuevo desconocido se formaba en mi cabeza. Podría ser que este tipo, resultase ser alguien muy interesante, y la gente que es interesante, suele tener algún conocimiento útil sobre la isla, o quizá de algún rumor que merezca la pena escuchar.
Sin embargo, todos estos pensamientos se vieron relegados cuando el joven preguntó por nuestro bienestar, seguido de una escueta presentación, que a su vez, iba acompañada de una sonrisa enorme.
Como respuesta, no tardé en extender mi mano hacia Goku y devolverle la sonrisa.
-¡Hola Goku! Mi nombre es Lance, y este - dije señalando a Juuken. - Es Juuken.
Volví mi mirada a Goku y decidí responder su pregunta para que esta no quedara en el aire.
-¡Sí! ¡Estamos bien! - Respondí de inmediato para calmarle un poco. - Pero lo importante es ¿¡Estás bien tú!? ¡¡Esa caída desde tan alto ha tenido que doler!! ¿Qué te había pasado?.
Decidí preguntar directamente, ya que era una pregunta normal en esta peculiar situación. Quizá esta me ayudase a conocerle mejor, pues realmente ese loco había captado todo mi interes.
Segundos antes, había logrado empujar a Juuken para evitar que el muy cabeza alocada atacase con sus armas al tipo que provenía desde el cielo. Había que tener mucho cuidado a la hora de empezar un posible combate en cualquier sitio.
Cuando esta polvareda comenzó a disiparse, no pude evitar abrir los ojos como platos ante el espectáculo, preguntándome si el tipo que acababa de caer de semejante altura estaría siquiera consciente, gravemente herido, o peor aún, muerto.
Juuken, me había preguntado como estaba, pero en ese momento no pude responderle bien. Él parecía que se limitaba a mirarme con una mezcla de confusión y nervios, parecía no comprender bien que acababa de pasar. Es muy probable que no esperase ese empujón que le di, pero esta era una conversación que tendría con él en otro momento. Y ahí estaba yo, frente a un hombre que, minutos antes, saltaba y gritaba como un loco, preguntándome sobre qué hacer en esa situación.
- Oye... ¿Estás bie-? - Dije cortando mi pregunta al ver que comenzaba a moverse casi como si nada.
El impacto no parecía haberle afectado demasiado, lo cual era un indicio de que ese tipo era alguien lejos de lo normal e incluso interesante. Muchos estarían inmóviles en su lugar, o incluso muertos, y no hablaba precisamente de ciudadanos de a pie. El tipo intentaba reincorporarse, sacudiéndose el polvo y con una sonrisa que no parecía del todo cuerda. La escena me hizo preguntarme si estaba viendo algún tipo de ilusión, o si realmente este hombre tenía la resistencia de alguien que ignoraba la lógica común. Yo mismo me consideraba capaz de sobrevivir a una caída similar, pero nunca estaría tan bien como él se mostraba ahora.
- Bueno… eso fue un aterrizaje... impresionante - Dije, conteniendo una sonrisa mientras evaluaba la situación. - Parece que tienes buena resistencia, amigo.
Lo observé mientras se levantaba completamente, ignorando las miradas de desconcierto de la gente a su alrededor. La multitud, que se había reunido a nuestro alrededor, empezaba a disiparse, aunque algunos seguían atentos a cada uno de sus movimientos. Me quedé en silencio un segundo, intentando no reírme ante la peculiar situación que estábamos viviendo, mientras un pequeño boceto sobre el nuevo desconocido se formaba en mi cabeza. Podría ser que este tipo, resultase ser alguien muy interesante, y la gente que es interesante, suele tener algún conocimiento útil sobre la isla, o quizá de algún rumor que merezca la pena escuchar.
Sin embargo, todos estos pensamientos se vieron relegados cuando el joven preguntó por nuestro bienestar, seguido de una escueta presentación, que a su vez, iba acompañada de una sonrisa enorme.
Como respuesta, no tardé en extender mi mano hacia Goku y devolverle la sonrisa.
-¡Hola Goku! Mi nombre es Lance, y este - dije señalando a Juuken. - Es Juuken.
Volví mi mirada a Goku y decidí responder su pregunta para que esta no quedara en el aire.
-¡Sí! ¡Estamos bien! - Respondí de inmediato para calmarle un poco. - Pero lo importante es ¿¡Estás bien tú!? ¡¡Esa caída desde tan alto ha tenido que doler!! ¿Qué te había pasado?.
Decidí preguntar directamente, ya que era una pregunta normal en esta peculiar situación. Quizá esta me ayudase a conocerle mejor, pues realmente ese loco había captado todo mi interes.