[Aventura] Ascensión [Tier 5 - Akuma no Mi]

Aquella habia sido una experiencia casi mística y difícil de explicar. El haki logro abatir a todos los presentes a excepción e Lovecraft al cual parecía estar recibiendo con los brazos abiertos. Voces, haki, todo parecía indicar que algún ser vivo estaba detrás de todo eso, pero en el interior de ese altar ya no habia ningún rastro de vida. Pero eso no hacia que no pareciera existir una voluntad que impulsaba a ese haki, al mismo tiempo que llevaba hacia ese fruto al monje.

El monje tomo con toda la solemnidad del mundo aquel fruto entiendo a que se referían Tao y los Lunarian con una poderosa reliquia, una Akuma no Mi. La cual parecía estar llamando al propio monje a que la consumiera, todo era como demasiado difícil de rechazar, tantos siglos esperando allí sin que nadie la abriera, Tao y los Lunarian fracasando en sus intentos de acceder a ella, en cambio para él habia sido tan fácil. Y algo aturdido termino por dar un mordisco a esa fruta e ir consumiéndola, notando su terrible sabor, pero mostrando templanza ante él sin dramatizar o poner mala cara. Pero consumirla algo en él comenzó a cambiar, un nuevo poder latía en su interior y unas nuevas memorias vinieron a su mente.

Un joven se aproximaba corriendo entre unas runas antiguas hasta alcanzar una sala más amplia - ¡Karma! - Exclamo el joven que cargaba el mismo fruto que Lovecraft acababa de consumir en las manos - ¡Mira que he encontrado! - El joven desconocido se acercaba al supuesto Karma el cual estaba frente a una pared con una losa oscura inmensa plagada de símbolos de un lenguaje extraño - Yep Goutama, déjame ver - Diría el hombre cerrando la libreta en la que estaba tomando apuntes de la losa cuadrada de piedra.

- Me separe de los otros mientras acabábamos de buscar cosas por la catacumba y no se como acabe en una sala donde me encontré esto en un pedestal, es de los frutos que nos dijiste? - Le explico mientras le enseñaba la fruta - Ohh, esto es sin duda una Akuma no M exacto, y por su voz parece ser una muy fuerte, de hecho siento en ella una voluntad muy fuerte, felicidades - Le diría con una amplia sonrisa de todo corazón. Ante lo cual el joven Goutaba que apenas debía tener unos 16 años se empezó a poner nervioso al saber que estaba llevando algo tan importante en las manos - Ahhhh, entonces mejor tómala tu si es algo tan fuerte y valioso, yo no lo sabría usar - Dijo extendiendo el fruto hasta Karma - ¿Qué dices bobo? Ya sabemos que cuando os hable de las Akuma os dije que si alguno encontraba una que era suya, así que tomara, encima que dices tu no dejaste toda tu vida y comodidades atrás para hacerte fuerte para poder ayudar a los demás - Le recriminaría Karma dándole un toque en la frente al chico con el índice - Si quiero ayudarlos... Pero desde que me fugue de casa solo he estado dependiendo de ti y los demás no he progresado en nada - Entonces Karma puso una mirada más seria - No digas eso, tu has cambiado mucho desde que te viniste con nosotros, estoy seguro que tu familia no te reconocería ahora mismo, a parte esta fruta es muy fuerte pero escucho una voz muy amable y gentil de ella, y te puedo asegurar que jamás he conocido a nadie más amable y gentil que tu, parece que estáis hechos el uno para el otro - Karma apoyaría su puño en el hombro de Goutama para darle ánimos.

- ¡Oigan chicos, encontramos el acceso a otro piso más abajo! - Gritaría alguien en la distancia - ¡Wooo, hay más? Voy! - Karma se emocionaría y saldría corriendo hacia sus otros compañeros - ¡Vamos Goutama, deja de darle vueltas! 

Lovecraft volvería en si mismo, pasando a volver a estar con la cabeza centrada y en sus cabales, esas memorias eran algo extraño, como voluntades heredadas a través de medios que incluso con su avanzada edad el monje jamás habia visto. Pero no habia ahora mucho tiempo para darle vueltas. Era necesario regresar y sacar a Tao de allí antes de que los Lunarian se recuperaran. Que planes tendría para la fuga el monje?