Rocket Raccoon
Rocket
02-11-2024, 04:32 AM
(Última modificación: 02-11-2024, 04:36 AM por Rocket Raccoon.)
Podría decir que me sentía más aliviado al momento de sentir como su mano, que apretaba fuertemente uno de mis brazos que tenía sujetado, comenzaba a suavizar la fuerza con la que ejercía su acción de agarre. Segundos después ya me había soltado, dejándome en el suelo. Pero el ardor en mis ojos aún era bastante inquietante, seguía intentando quitármelo con la ayuda de mis manos e incluso la ropa que tenía puesta, pero era inútil. Sea lo que sea que haya usado este chico para elaborar ese gas, pues era de muy buena mano. Me sorprendía, no lo podía negar. Aunque si lo piensas un poco, era el aprendiz de uno de los inventores más prodigiosos del gran mar azul. Así que una que otra cosita debía saber más que yo, quién sabe si mucho más incluso.
-Si, mapache. Joder eh. Las trampas no son para mí, son para los que vienen subiendo joder eh.- Comenzaba a sentirme ya algo desesperado, y quizás empezaba a ya notarse en mi voz.
Los segundos seguían pasando uno tras otro. Y los marinos que venían en búsqueda del chico también se iban acercando cada vez más y más, ya no solo lo sabía por mi habilidad para percibir el aura que desprendían. Si no también porque sus pisadas comenzaban a resonar ahí a la distancia, detrás de la puerta. -Debemos apurarnos, si ponte eso y ya, joder eh. Digo, si no quieres caer en las manos del gobierno. Joder eh-
La visión comenzaba a volver a mí de a poco, ya podía abrir los ojos lentamente para intentar ahora si ver qué coño estaba ocurriendo a mi alrededor. El chico se había vestido al completo, con capucha y todo, incluida la peluca que le había comprado. -No sé qué coño habrás creado, Tadao. Pero la Armada Revolucionaria no se puede permitir que esa cosa caiga en la mano de la marina. Joder eh. Ahora que si nos vemos bien, Rocket Raccoon, sí, un mapache parlanchín.- Tome la mochila después de notar que ya el muchacho la había dejado de usar. Agarre la [granada de humo] y la mantuve en mi mano.
'Buen mecanismo de escape... una cajita de sorpresas este muchacho'. -Hehe, buena esa Tadao. Joder eh.- Tras las palabras, volví a observar hacia la puerta por la cual iban a ingresar los marinos que venían tras el chico. Quite el seguro de la [granada de humo] y la arroje en esa dirección. Al momento de ellos entrar, la idea era que la humareda los sorprendiera por completo, y eso les hiciera perder tiempo valioso para la persecución, y nos daría a nosotros un tiempo extra para nuestra exitosa fuga. La cual, apenas comenzaba.
Ya estando ambos en tierra y fuera del edificio, observe hacia arriba para ver si la granada había funcionado. Después de asegurarme de aquello, comencé a guiar al chico entre las calles de Loguetown. -Vale, pues ya caminemos normal y listo, hacia el mercado. Ahí podemos perderlos de pista si llegase a ocurrir una persecución. Joder eh.- Lo miré para ver si se había puesto bien tanto el traje como la peluca, y también para notar si estaba nervioso o algo. Me tapé también como pude mi rostro con mi propia ropa y comencé a caminar en dirección al mercadillo, siempre intentando ir entre medio de los bloques, esquivando las grandes calles. No le preste mucha atención a lo que sucedía un poco más al norte, solo notaba como todo el mundo iba para allá, y bueno, eso era lo que estaba buscando en principio. Que ambos pudiéramos caminar por aquí tranquilos sin que algunos ojos se fijasen en nosotros.
-Hay un lugar en el muelle sur, ese es nuestro destino, joder eh. Tengo a unos amigos más preparados para la acción por si la cosa va a mayores. Joder eh. Pero en principio, estoy haciendo todo lo posible para que eso no pase, y nuestra travesía sea solo un paseo mas. Joder eh- Pero eso sería cosa para otro momento. Lo primero sería llegar al mercadillo, y ver como seguían avanzando los sucesos. ¿Pero por qué el mercadillo?, se preguntarán. Había bastante gente, y tenía dos pelucas que se parecían al verdadero cabello de Tadao. Si lograba colocársela a alguien, pues mi plan seguiría marchando como había planeado.
-Si, mapache. Joder eh. Las trampas no son para mí, son para los que vienen subiendo joder eh.- Comenzaba a sentirme ya algo desesperado, y quizás empezaba a ya notarse en mi voz.
Los segundos seguían pasando uno tras otro. Y los marinos que venían en búsqueda del chico también se iban acercando cada vez más y más, ya no solo lo sabía por mi habilidad para percibir el aura que desprendían. Si no también porque sus pisadas comenzaban a resonar ahí a la distancia, detrás de la puerta. -Debemos apurarnos, si ponte eso y ya, joder eh. Digo, si no quieres caer en las manos del gobierno. Joder eh-
La visión comenzaba a volver a mí de a poco, ya podía abrir los ojos lentamente para intentar ahora si ver qué coño estaba ocurriendo a mi alrededor. El chico se había vestido al completo, con capucha y todo, incluida la peluca que le había comprado. -No sé qué coño habrás creado, Tadao. Pero la Armada Revolucionaria no se puede permitir que esa cosa caiga en la mano de la marina. Joder eh. Ahora que si nos vemos bien, Rocket Raccoon, sí, un mapache parlanchín.- Tome la mochila después de notar que ya el muchacho la había dejado de usar. Agarre la [granada de humo] y la mantuve en mi mano.
'Buen mecanismo de escape... una cajita de sorpresas este muchacho'. -Hehe, buena esa Tadao. Joder eh.- Tras las palabras, volví a observar hacia la puerta por la cual iban a ingresar los marinos que venían tras el chico. Quite el seguro de la [granada de humo] y la arroje en esa dirección. Al momento de ellos entrar, la idea era que la humareda los sorprendiera por completo, y eso les hiciera perder tiempo valioso para la persecución, y nos daría a nosotros un tiempo extra para nuestra exitosa fuga. La cual, apenas comenzaba.
Ya estando ambos en tierra y fuera del edificio, observe hacia arriba para ver si la granada había funcionado. Después de asegurarme de aquello, comencé a guiar al chico entre las calles de Loguetown. -Vale, pues ya caminemos normal y listo, hacia el mercado. Ahí podemos perderlos de pista si llegase a ocurrir una persecución. Joder eh.- Lo miré para ver si se había puesto bien tanto el traje como la peluca, y también para notar si estaba nervioso o algo. Me tapé también como pude mi rostro con mi propia ropa y comencé a caminar en dirección al mercadillo, siempre intentando ir entre medio de los bloques, esquivando las grandes calles. No le preste mucha atención a lo que sucedía un poco más al norte, solo notaba como todo el mundo iba para allá, y bueno, eso era lo que estaba buscando en principio. Que ambos pudiéramos caminar por aquí tranquilos sin que algunos ojos se fijasen en nosotros.
-Hay un lugar en el muelle sur, ese es nuestro destino, joder eh. Tengo a unos amigos más preparados para la acción por si la cosa va a mayores. Joder eh. Pero en principio, estoy haciendo todo lo posible para que eso no pase, y nuestra travesía sea solo un paseo mas. Joder eh- Pero eso sería cosa para otro momento. Lo primero sería llegar al mercadillo, y ver como seguían avanzando los sucesos. ¿Pero por qué el mercadillo?, se preguntarán. Había bastante gente, y tenía dos pelucas que se parecían al verdadero cabello de Tadao. Si lograba colocársela a alguien, pues mi plan seguiría marchando como había planeado.