Odinson D. Shizu
Asesina de Espadas
05-11-2024, 01:59 AM
El viento soplaba acariciando la hierba del campo. La gigante caminaba procurando que sus pasos fueran ligeros y suaves para no pisotear a ningún animal de las inmediaciones, o perturbar de forma abrupta el posible descanso de alguno de ellos. Simplemente la joven quería pasear por los campos más despejados que rodeaban la base de la marina. Puesto que era de los pocos lugares donde no se tenia que mover de forma cohibida y limitada. Por ejemplo en el pueblo de Rostock, sus estrechas calles y sus construcciones no muy elevadas era susceptibles a que Shizu las rompiera si se tropezaba o chocaba con alguna de forma imprudente, por eso no era la indicada para patrullar la ciudad y se dedicaba a pasear por los alrededores de la ciudad y el antiguo faro cuando la mandaban a patrullar. Pero por lo menos tenia esa opción en esta isla, porque en su primer destino en Loguetown, si que era imposible moverse bien por esa ciudad, las calles eran inmensamente concurridas y estrechas, llenas de cosas y toda la isla estaba construida hasta el limite de la costa, no habia margen.
Aunque eso no era importante. Hoy era su día libre y opto por no entrenar y simplemente familiarizarse un poco con la naturaleza de la isla paseando tranquilamente. En su isla natal donde se crio vivió por casi 50 años en una jungla bastante más densa y salvaje, donde la mano del ser humano casi no se percibía, era en Demon Tooth. Que era casi una isla salvaje comparada con la pacifica y edificada Kilombo, aunque por lo menos a diferencia de Loguetown en esta isla se conservaban ciertos prados y pasajes naturales, sobre todo cerca de la base naval, ideal para que estos entrenen. Pero hoy la gigante solo quería descansar.
Tras un rato, cuando el cuartel de la marina se veía pequeño en la distancia, Shizu decidió sentarse sobre la hierba, que para ella era como una fina moqueta en el suelo, más que un césped salvaje sin control. Pero la gigante simplemente se quedo ahí sentada estirando un poco los brazos hacia el cielo chasqueando su espalda un poco emitiendo algún ruido relajado, casi como un gato ronroneando. Quedándose contemplando un poco el horizonte del mar a lo lejos, dada la altura a la que se encontraba el cuartel naval, teniendo una posición ventajosa. Viéndose más pequeñas de lo habitual las casas del pueblo, junto a los restos del faro en proceso de obras algo más lejos en la distancia.
Aunque eso no era importante. Hoy era su día libre y opto por no entrenar y simplemente familiarizarse un poco con la naturaleza de la isla paseando tranquilamente. En su isla natal donde se crio vivió por casi 50 años en una jungla bastante más densa y salvaje, donde la mano del ser humano casi no se percibía, era en Demon Tooth. Que era casi una isla salvaje comparada con la pacifica y edificada Kilombo, aunque por lo menos a diferencia de Loguetown en esta isla se conservaban ciertos prados y pasajes naturales, sobre todo cerca de la base naval, ideal para que estos entrenen. Pero hoy la gigante solo quería descansar.
Tras un rato, cuando el cuartel de la marina se veía pequeño en la distancia, Shizu decidió sentarse sobre la hierba, que para ella era como una fina moqueta en el suelo, más que un césped salvaje sin control. Pero la gigante simplemente se quedo ahí sentada estirando un poco los brazos hacia el cielo chasqueando su espalda un poco emitiendo algún ruido relajado, casi como un gato ronroneando. Quedándose contemplando un poco el horizonte del mar a lo lejos, dada la altura a la que se encontraba el cuartel naval, teniendo una posición ventajosa. Viéndose más pequeñas de lo habitual las casas del pueblo, junto a los restos del faro en proceso de obras algo más lejos en la distancia.