Vesper Chrome
Medical Fortress
11-11-2024, 10:39 PM
(Última modificación: 11-11-2024, 10:39 PM por Vesper Chrome.)
La noche en Rostock está cargada de una quietud inquietante, apenas rota por el murmullo de las olas que golpean las costas de la isla Kilombo y el susurro ocasional del viento que cruza las estrechas calles del pueblo. Cuervo y Sowon, ustedes caminan en silencio, sus pisadas amortiguadas por la tierra húmeda del camino, atentos a cualquier movimiento, a cualquier señal de posibles problemas. Las sombras se extienden en las esquinas, envolviendo el lugar en una oscuridad que parece comprimir los sonidos y ocultar secretos en cada rincón.
Para ti, Cuervo, este es el momento ideal para actuar. La noche te brinda el anonimato perfecto y te ayuda a moverte con sigilo sin llamar la atención. La misión es sencilla en principio: entrar, encontrar a Isabella Duarte, y sacarla antes de que los piratas noten siquiera su presencia. Pero en el fondo, sabes que pocas misiones se ejecutan sin contratiempos.
De repente, un sonido débil y ahogado se cuela entre el silencio. Ambos se detienen, aguzando el oído. Unos pasos rápidos y temblorosos se acercan desde una calle lateral. De entre las sombras, emerge una niña pequeña, con las mejillas sucias y los ojos hinchados de tanto llorar. Lleva un vestido sencillo, con la tela deshilachada en algunos bordes, y parece haber estado corriendo en el frío de la noche.
La niña se lanza hacia Cuervo, aferrándose a su ropa con una mirada desesperada.
—¡Por favor, ayúdenme! —suplica en un susurro tembloroso, con la voz desgarrada por el miedo—. Mi papá… unos hombres malos lo están golpeando en un callejón. Dicen que se lo van a llevar. ¡No dejen que lo lastimen más!. Señala un callejón oscuro y angosto más adelante, y su mano tiembla al hacerlo. El dolor en su mirada es palpable, y ustedes mis aventureros no pueden evitar sentir un leve conflicto interno. Saben que tienen una misión urgente, pero también son conscientes de que dejar a esta niña podría tener consecuencias difíciles de ignorar.
Antes de que puedan responder, otro sonido llama su atención desde el lado opuesto. Un anciano que lucha con el peso de una gran bolsa aparece tambaleándose por una calle cercana. Es un hombre de barba blanca y mirada cansada, con las manos arrugadas y temblorosas que intentan cargar la bolsa. Sus pasos son pesados y lentos, claramente luchando contra el peso que lleva. Al ver a Cuervo y Sowon, levanta una mirada esperanzada y les hace un gesto con la cabeza.
—Disculpen, jóvenes— dice con una voz suave y ronca — ¿Podrían darme una mano? Esta bolsa… es más pesada de lo que pensaba. —
Señala una casa al final de la calle, justo al borde de donde se extiende la penumbra. — Solo hasta allí. — agrega con una sonrisa cansada, tratando de aparentar fuerza, aunque se nota que apenas se sostiene.
Ambos, a pesar de su naturaleza sienten un tirón de conflicto. Por un lado, saben que ayudar al anciano podría ser rápido y evitar que cargue solo con ese peso; por otro lado, la niña aún los observa con ojos suplicantes, como si todo su mundo dependiera de ustedes. El tiempo corre, y cada minuto es crucial. Miran al anciano y a la niña, ambos entienden que tendrán que tomar una decisión rápida, y que cualquier elección podría acarrear consecuencias.
Piensen en sus opciones:
Ayudar a la niña: Pueden correr hacia el callejón para enfrentar a los hombres que golpean a su padre. Pero una intervención en un conflicto tan público podría atraer miradas indeseadas, y ambos como trabajadores del mundo nocturno y oculto saben que el riesgo de enfrentar problemas con la autoridad local es alto. Sin embargo, el deber de proteger a alguien vulnerable como la niña pesa en su conciencia.
Ayudar al anciano: La petición parece inocente y breve, solo cargar una bolsa unos cuantos metros hasta una casa cercana. Pueden estimar que no les tomará más de un par de minutos, y el anciano ciertamente necesita ayuda. No obstante, cualquier pérdida de tiempo puede dificultar su misión y reducir las posibilidades de cumplir con éxito el rescate de Isabella.
Ignorar ambos llamados y continuar con la misión principal: La opción más lógica es seguir adelante, ignorando las distracciones y centrándose en el objetivo principal. Es lo que se haría en cualquier otra misión en el mundo en el que ustedes estan involucrados, especialmente cuando los minutos cuentan. Sacar a Isabella es la prioridad, y cualquier demora podría poner en riesgo su vida.
¿Que harán jovenes aventureros?
Para ti, Cuervo, este es el momento ideal para actuar. La noche te brinda el anonimato perfecto y te ayuda a moverte con sigilo sin llamar la atención. La misión es sencilla en principio: entrar, encontrar a Isabella Duarte, y sacarla antes de que los piratas noten siquiera su presencia. Pero en el fondo, sabes que pocas misiones se ejecutan sin contratiempos.
De repente, un sonido débil y ahogado se cuela entre el silencio. Ambos se detienen, aguzando el oído. Unos pasos rápidos y temblorosos se acercan desde una calle lateral. De entre las sombras, emerge una niña pequeña, con las mejillas sucias y los ojos hinchados de tanto llorar. Lleva un vestido sencillo, con la tela deshilachada en algunos bordes, y parece haber estado corriendo en el frío de la noche.
La niña se lanza hacia Cuervo, aferrándose a su ropa con una mirada desesperada.
—¡Por favor, ayúdenme! —suplica en un susurro tembloroso, con la voz desgarrada por el miedo—. Mi papá… unos hombres malos lo están golpeando en un callejón. Dicen que se lo van a llevar. ¡No dejen que lo lastimen más!. Señala un callejón oscuro y angosto más adelante, y su mano tiembla al hacerlo. El dolor en su mirada es palpable, y ustedes mis aventureros no pueden evitar sentir un leve conflicto interno. Saben que tienen una misión urgente, pero también son conscientes de que dejar a esta niña podría tener consecuencias difíciles de ignorar.
Antes de que puedan responder, otro sonido llama su atención desde el lado opuesto. Un anciano que lucha con el peso de una gran bolsa aparece tambaleándose por una calle cercana. Es un hombre de barba blanca y mirada cansada, con las manos arrugadas y temblorosas que intentan cargar la bolsa. Sus pasos son pesados y lentos, claramente luchando contra el peso que lleva. Al ver a Cuervo y Sowon, levanta una mirada esperanzada y les hace un gesto con la cabeza.
—Disculpen, jóvenes— dice con una voz suave y ronca — ¿Podrían darme una mano? Esta bolsa… es más pesada de lo que pensaba. —
Señala una casa al final de la calle, justo al borde de donde se extiende la penumbra. — Solo hasta allí. — agrega con una sonrisa cansada, tratando de aparentar fuerza, aunque se nota que apenas se sostiene.
Ambos, a pesar de su naturaleza sienten un tirón de conflicto. Por un lado, saben que ayudar al anciano podría ser rápido y evitar que cargue solo con ese peso; por otro lado, la niña aún los observa con ojos suplicantes, como si todo su mundo dependiera de ustedes. El tiempo corre, y cada minuto es crucial. Miran al anciano y a la niña, ambos entienden que tendrán que tomar una decisión rápida, y que cualquier elección podría acarrear consecuencias.
Piensen en sus opciones:
Ayudar a la niña: Pueden correr hacia el callejón para enfrentar a los hombres que golpean a su padre. Pero una intervención en un conflicto tan público podría atraer miradas indeseadas, y ambos como trabajadores del mundo nocturno y oculto saben que el riesgo de enfrentar problemas con la autoridad local es alto. Sin embargo, el deber de proteger a alguien vulnerable como la niña pesa en su conciencia.
Ayudar al anciano: La petición parece inocente y breve, solo cargar una bolsa unos cuantos metros hasta una casa cercana. Pueden estimar que no les tomará más de un par de minutos, y el anciano ciertamente necesita ayuda. No obstante, cualquier pérdida de tiempo puede dificultar su misión y reducir las posibilidades de cumplir con éxito el rescate de Isabella.
Ignorar ambos llamados y continuar con la misión principal: La opción más lógica es seguir adelante, ignorando las distracciones y centrándose en el objetivo principal. Es lo que se haría en cualquier otra misión en el mundo en el que ustedes estan involucrados, especialmente cuando los minutos cuentan. Sacar a Isabella es la prioridad, y cualquier demora podría poner en riesgo su vida.
¿Que harán jovenes aventureros?