El jolgorio y la alegría es algo que se propaga fácilmente, llegando incluso a cegar al ser con el mejor instinto del mundo para percibir problemas que pudieran avecinarse. No obstante, aún es pronto para saber si ese es vuestro caso en concreto. Mediante el uso del aumento de vuestros sentidos gracias al haki de observación, efectivamente, notáis que aquel hombre puede teneros cierta tirria. No es un odio profundo, sino un poco de animadversión hacia vuestra persona, la cual se disipa en cuando una muchacha de cabellos anaranjados se acerca a él. Entonces, notáis como la densa oscuridad de su corazón se convierte en alegría y regocijo, la mujer le agarra de la mano y lo lleva a una esquina de aquella plaza, y pasa de vosotros.
El tiempo transcurre y todo sigue igual, pero quizá esto sea la calma que precede a una tempestad más grande. ¿No creéis? Pasados unos minutos escucháis un grito que proviene de un lugar cercano. Es una llamada de pánico, que alerta a todos los presentes. La gente comienza a moverse rápido, llegando hacia el lugar desde donde nació aquel alarido. Allí os topáis con el joven nervios de antes, con una letra «T» realizada en la frente con algún tipo de utensilio cortante, bastante preciso.
—¿Hay algún médico presente? —pregunta una mujer, a la que parece que va a darle un ataque de ansiedad.
Muchos de los ciudadanos os miran a vosotros, esperando que hagáis algo. Entonces, aparece el hombre engominado que os miraba con desprecio. En ese momento, tan solo mira mal a Lobo. Se acerca al cuerpo, le toma el pulso y empieza a tocar distintas partes de su cuerpo. Observa la herida de la frente, tocándola con un utensilio de plástico bastante extraño, y entonces abre su camisa. Su cuerpo esta repleto de cortes, y en su corazón hay un orificio de entrada, pero no de salida.
—Esto es bastante extraño —dice el hombre, que se levanta y se cruza de brazos—. Al parecer le han clavado algo en el corazón y lo han sacado. No hay marcas de quemadura por un proyectil, ha tenido que ser algún tipo de arma perforante. ¿Cuál? Tendría que examinar el cuerpo y hacer comprobaciones varias. No obstante, estamos ante un claro caso de asesinato en primer grado.
Os fijáis, que bajo en la mano del joven hay un trozo de papel, lo está agarrando con fuerza. Si intentáis cogerlo de una forma zafia y con poco cuidado se romperá, pero si lo intentáis de alguna manera más delicada, os toparéis con lo siguiente:
¿Qué haréis héroes de la revolución?
El tiempo transcurre y todo sigue igual, pero quizá esto sea la calma que precede a una tempestad más grande. ¿No creéis? Pasados unos minutos escucháis un grito que proviene de un lugar cercano. Es una llamada de pánico, que alerta a todos los presentes. La gente comienza a moverse rápido, llegando hacia el lugar desde donde nació aquel alarido. Allí os topáis con el joven nervios de antes, con una letra «T» realizada en la frente con algún tipo de utensilio cortante, bastante preciso.
—¿Hay algún médico presente? —pregunta una mujer, a la que parece que va a darle un ataque de ansiedad.
Muchos de los ciudadanos os miran a vosotros, esperando que hagáis algo. Entonces, aparece el hombre engominado que os miraba con desprecio. En ese momento, tan solo mira mal a Lobo. Se acerca al cuerpo, le toma el pulso y empieza a tocar distintas partes de su cuerpo. Observa la herida de la frente, tocándola con un utensilio de plástico bastante extraño, y entonces abre su camisa. Su cuerpo esta repleto de cortes, y en su corazón hay un orificio de entrada, pero no de salida.
—Esto es bastante extraño —dice el hombre, que se levanta y se cruza de brazos—. Al parecer le han clavado algo en el corazón y lo han sacado. No hay marcas de quemadura por un proyectil, ha tenido que ser algún tipo de arma perforante. ¿Cuál? Tendría que examinar el cuerpo y hacer comprobaciones varias. No obstante, estamos ante un claro caso de asesinato en primer grado.
Os fijáis, que bajo en la mano del joven hay un trozo de papel, lo está agarrando con fuerza. Si intentáis cogerlo de una forma zafia y con poco cuidado se romperá, pero si lo intentáis de alguna manera más delicada, os toparéis con lo siguiente:
¿Qué haréis héroes de la revolución?