Lykos silver
Drake
17-11-2024, 02:08 AM
Parece ser que mi espera no duró demasiado, a lo lejos, podía observar a un hombre extraño, tenía alas y un largo cabello de color negro azabache, su expresión no era la mas agradable que había visto, la verdad, pero bueno, todo el mundo solía ser mas considerados en el interior. El chico caminaba de forma segura, contrarío al nerviosismo que yo estaba teniendo, el estaba.. juzgando con la mirada, se le notaba a leguas, después de un rato se acercó a mi, al parecer, estaba buscando a un tal Agyo o algo así, lo cierto es que el era el primero en llegar. -No, caballero, de momento ha llegado usted. Tsk. Le dije de forma seca, aun no estaba seguro de si aquella persona quería o no unirse al gremio, por lo que me quedé observándolo durante un rato hasta que acabó sentándose en una de las sillas, bueno, algo es algo y el parecía ser el comienzo, estaba seguro de que las siguientes personas en llegar serían algo mas sociables, la base de toda una organización era la comunicación, no pasaba nada por que alguno de sus miembros fueran mas callados que otros, así que todo iba bien de momento... o eso creía, al rato, una persona de tez oscura y alas igual de negras llegaría, algo me decía que ese debía de tratarse de la persona que el otro estaba buscando, se acercó a mi, diciendo que igual planteaba unirse. -Bienvenido seas, entonces. Tsk. Y después se acercó al que asumí que debía tratarse de su hermano.. y efectivamente, el que acababa de llegar parecía ser el hermano mayor, interesante, ¡eso era muy bueno! por que ya tenían confianza y podrían comprometerse mas con todo el rollo de ser una familia y esas cosas, por lo que sonreiría al verlos, aunque.. me fijaría en que el primero que había llegado aun tenía mala cara. Desde la mesa principal en la que me encontraba apoyado no podía realmente soportarlo, la cara de mal rollo que tenía el de las alas blancas me estaba poniendo mas nervioso de lo que me encontraba, ¿de verdad lo había hecho tan mal?, joder... a ver, ¿Cómo lo podía hacer?, tenía que hacerme respetar de alguna manera y aquellas dos personas seguro que la mejor forma de ganar su confianza era apareciendo mas intimidante, algo que... bueno, midiendo 5,20 metros era sencillo de obtener.
Respiré hondo mientras me encorvaba, dejando ver realmente la magnitud de mi tamaño, debido a la posición de la chimenea y de las ventanas, mi colosal sombra cubría gran parte de la habitación en la que aquellos dos individuos se encontraban, caminaría hacia ellos con paso firme el cual haría rechinar levemente el suelo debido a mi peso al completo, sonando pesados, los miraría fijamente mientras mi barba ya bien acicalada tapaba gran parte de mi cara, tanto que no podía llegar a verse mi boca de buena forma, gran manera de intimidar aun mas. -Disculpa.... pero creo que no nos hemos presentado. tsk. Daría un ligero golpe a la mesa para que me prestaran atención, mis manos eran probablemente mas grandes que sus cabezas y mi tono de voz era muy serio y seguro de mi mismo, después de eso volvería a tomar la postura, cruzando mis brazos y mirándolos desde arriba -Mi nombre, es Lykos, como os podéis imaginar... soy el creador del gremio. tsk. Mientras decía aquellas palabras, sacaría de mi bolsillo un cigarro y lo encendería con un mechero, posicionándolo en alguna parte de mi barba donde podríais suponer que se encontraba mi boca. -No he podido... evitar escuchar las palabras de tu hermano, aun desconozco tu nombre pero.. Entiendo. Que no todo el mundo puede ver lo que yo veo aquí, tsk. Dije con una voz profunda y llena de autoridad, no levantaría el tono de mi voz, pues era un hombre que sabía hacerse escuchar sin necesidad de alzarla. Ondularía mi brazo, señalando al interior del gremio. -Es cierto.. que el gremio acaba de crearse y aun estoy en proceso de mejorar la decoración.. le pedí consejo a mis tres hijos y quizá no he pensado demasiado en la decoración, pero... mira, este edificio no es simple madera, metal y tela, esto, es una promesa, un hogar para aquellos que no tienen, una oportunidad para forjar algo mas grande que pequeñas vidas. tsk. me quedaría quieto durante unos segundos para darle oportunidad de escucharlo todo bien, mientras daría ligeros pasos hacía atrás, arqueando la cara en una sonrisa. -Buscamos luchadores, gente para defender a los que lo necesiten, yo confió en que tendréis lo necesario, pero necesito que confiéis en mi, puede que sea el líder solo por haber creado el gremio, pero aquí todos tenéis voz y voto si decidís ingresar. tsk. Mientras les decía todo aquel discurso, un pequeño lagarto escamado como un armadillo se subiría en mi hombro
Respiré hondo mientras me encorvaba, dejando ver realmente la magnitud de mi tamaño, debido a la posición de la chimenea y de las ventanas, mi colosal sombra cubría gran parte de la habitación en la que aquellos dos individuos se encontraban, caminaría hacia ellos con paso firme el cual haría rechinar levemente el suelo debido a mi peso al completo, sonando pesados, los miraría fijamente mientras mi barba ya bien acicalada tapaba gran parte de mi cara, tanto que no podía llegar a verse mi boca de buena forma, gran manera de intimidar aun mas. -Disculpa.... pero creo que no nos hemos presentado. tsk. Daría un ligero golpe a la mesa para que me prestaran atención, mis manos eran probablemente mas grandes que sus cabezas y mi tono de voz era muy serio y seguro de mi mismo, después de eso volvería a tomar la postura, cruzando mis brazos y mirándolos desde arriba -Mi nombre, es Lykos, como os podéis imaginar... soy el creador del gremio. tsk. Mientras decía aquellas palabras, sacaría de mi bolsillo un cigarro y lo encendería con un mechero, posicionándolo en alguna parte de mi barba donde podríais suponer que se encontraba mi boca. -No he podido... evitar escuchar las palabras de tu hermano, aun desconozco tu nombre pero.. Entiendo. Que no todo el mundo puede ver lo que yo veo aquí, tsk. Dije con una voz profunda y llena de autoridad, no levantaría el tono de mi voz, pues era un hombre que sabía hacerse escuchar sin necesidad de alzarla. Ondularía mi brazo, señalando al interior del gremio. -Es cierto.. que el gremio acaba de crearse y aun estoy en proceso de mejorar la decoración.. le pedí consejo a mis tres hijos y quizá no he pensado demasiado en la decoración, pero... mira, este edificio no es simple madera, metal y tela, esto, es una promesa, un hogar para aquellos que no tienen, una oportunidad para forjar algo mas grande que pequeñas vidas. tsk. me quedaría quieto durante unos segundos para darle oportunidad de escucharlo todo bien, mientras daría ligeros pasos hacía atrás, arqueando la cara en una sonrisa. -Buscamos luchadores, gente para defender a los que lo necesiten, yo confió en que tendréis lo necesario, pero necesito que confiéis en mi, puede que sea el líder solo por haber creado el gremio, pero aquí todos tenéis voz y voto si decidís ingresar. tsk. Mientras les decía todo aquel discurso, un pequeño lagarto escamado como un armadillo se subiría en mi hombro