Anko
Médica Despiadada
11-08-2024, 07:54 PM
La joven sonrió de forma sutil cuando logró que su hermana felina se presentara de forma más amena gracias a su petición. De forma irónica, ella que no sabía mucho de presentarse con extraños y que en ocasiones le aterraba, estaba tratando de enseñarle a Mitsu a hacerlo, y es entendible, aveces es más fácil decir las cosas que hacerlas. Por otro lado, el segundo cazador que se encontraba disfrutando de sus dangos a escasos metros del grupo se burló de forma de forma histérica de Yoshiro al ser “rechazado” por Mitsu, este acto hizo que Anko soltara pequeños ruidos guturales, también riendo muy levemente, pero lo hacía más por la forma en la que Jo de reía, de esas veces cuando vez a alguien riendo y te dan ganas de reír por cómo esa persona lo hace.
— Oh no es que no quiera, sólo es muy tímida pata hablar con extraños, pero estoy segura de que le gusta conocer gente nueva —. Respondió Anko a las palabras del chico Hafugyo de cabellera rojiza. No conocía aún del todo a su hermana, pues no había pasado mucho tiempo desde que establecieron comunicaciones entre ellas, pero algo le decía que Mitsu no quería ser grosera y simplemente era muy tímida como los desconocidos, un rasgo que Anko compartía cuando tenía que presentarse sola. — Yo soy Anko, y de igual forma, siempre eh vivido aquí, rara vez salgo de esta isla —. La chica irradiaba una confianza plena, y es que es fácil hacerlo cuando estás rodeado de gente y con la vista de una hermana que espera que seas más fuerte que ella.
Luego de responder al comentario del Lunarian sin alas, al igual que lo hizo Yoshiro, una sensación de ser observada invadió su ser, haciendo que, en un gesto casi automático, su mirada se levantara hacia donde ella creía que se pudiera encontrar aquella vista furtiva, topándose con aquellos ojos carmesíes de Yoshiro. El joven sonrió al verla, un gesto que Anko entendió como un gesto de amabilidad, después de todo, al igual que la Jujin, no tenía demasiada experiencia socializando. La marine replicó este gesto y de igual forma le regaló una sonrisa amable a la vez que sus párpados se cerraban, creando una sonrisa divertida.
— ¿Lo ves, Mitsu? Te dije que Yoshiro es alguien amable —. Diría la peli marrón luego de haberle dado aquella sonrisa al cazador. Yoshiro empezaba a agradarle a Anko, a pesar de que aún no se conocían del todo, y en parte, Jo también le había agradado, la forma en la que tomaba las desgracias de los demás le generaba un sentimiento de complicidad, pues ella a menudo lo hace, la diferencia con el Lunarian es que ella decide hacerlo una vez llevan un poco de tiempo de haberse conocido.
El grupo reunido por el destino empezaban a conocerse entre ellos y a presentarse, pero aún faltaba la presentación del Lunarian, pues este todavía no hablaba sobre su nombre, siendo hasta ese momento algo desconocido para el grupito. Anko se esperaba que se presentara pronto por cuenta propia, si no lo hacía, siempre podían preguntarle ellos mismos para sacarle esa información.
— Oh no es que no quiera, sólo es muy tímida pata hablar con extraños, pero estoy segura de que le gusta conocer gente nueva —. Respondió Anko a las palabras del chico Hafugyo de cabellera rojiza. No conocía aún del todo a su hermana, pues no había pasado mucho tiempo desde que establecieron comunicaciones entre ellas, pero algo le decía que Mitsu no quería ser grosera y simplemente era muy tímida como los desconocidos, un rasgo que Anko compartía cuando tenía que presentarse sola. — Yo soy Anko, y de igual forma, siempre eh vivido aquí, rara vez salgo de esta isla —. La chica irradiaba una confianza plena, y es que es fácil hacerlo cuando estás rodeado de gente y con la vista de una hermana que espera que seas más fuerte que ella.
Luego de responder al comentario del Lunarian sin alas, al igual que lo hizo Yoshiro, una sensación de ser observada invadió su ser, haciendo que, en un gesto casi automático, su mirada se levantara hacia donde ella creía que se pudiera encontrar aquella vista furtiva, topándose con aquellos ojos carmesíes de Yoshiro. El joven sonrió al verla, un gesto que Anko entendió como un gesto de amabilidad, después de todo, al igual que la Jujin, no tenía demasiada experiencia socializando. La marine replicó este gesto y de igual forma le regaló una sonrisa amable a la vez que sus párpados se cerraban, creando una sonrisa divertida.
— ¿Lo ves, Mitsu? Te dije que Yoshiro es alguien amable —. Diría la peli marrón luego de haberle dado aquella sonrisa al cazador. Yoshiro empezaba a agradarle a Anko, a pesar de que aún no se conocían del todo, y en parte, Jo también le había agradado, la forma en la que tomaba las desgracias de los demás le generaba un sentimiento de complicidad, pues ella a menudo lo hace, la diferencia con el Lunarian es que ella decide hacerlo una vez llevan un poco de tiempo de haberse conocido.
El grupo reunido por el destino empezaban a conocerse entre ellos y a presentarse, pero aún faltaba la presentación del Lunarian, pues este todavía no hablaba sobre su nombre, siendo hasta ese momento algo desconocido para el grupito. Anko se esperaba que se presentara pronto por cuenta propia, si no lo hacía, siempre podían preguntarle ellos mismos para sacarle esa información.