Alguien dijo una vez...
Monkey D. Luffy
Digamos que hay un pedazo de carne. Los piratas tendrían un banquete y se lo comerían, pero los héroes lo compartirían con otras personas. ¡Yo quiero toda la carne!
[Evento] Lo que el rio se llevó
Lobo Jackson
Moonwalker
Sus ojos brillantes como bombillas apenas tuvieron tiempo para captar el instante en el que aquel pelirrojo escalaba la colina en meros segundos, una bestia desbocada que parecía dirigida por la sed de sangre y una voluntad enfocada en matar. Podía escuchar su respiración profunda, ardiente y energética que transmitía oxígeno a cada músculo de su ser. Su mirada de ojos desorbitados, fija en su ser, reflejaba la decisión por acabar con el robot con todas sus fuerzas.

En aquellas cumbres de aullidos inmisericordes que parecían arrancados por un carcelero impiadoso, traídos por un viento colmado de angustia desde lo más alto de las montañas, apareció un sonido muy diferente. Una dulce voz que se sobreponía sobre todas las demás llegó hasta sus oídos, un tono dulce y embriagador de naturaleza etérea que envolvía cada nota en promesas de sangre y batalla. Un llamado seductor cuyo cometido parecía ser el de acariciar el alma de un guerrero para desatar la tormenta de su corazón en el combate.

Robot Jackson sintió el susodicho cántico como una afiladísima espada envuelta en seda: hermoso en sobremanera pero indudablemente letal.

Entonces, el impacto de un puño motivado por la voz de la sirena y potenciado por la lluvia alcanzó el torso metálico del robot, cuya armadura quebró al instante por la fuerza que recorrió cada parte de su ser. Un impacto tan violento que ni tan siquiera la brillante coraza argéntea pudo mitigar, arrugándose como papel de aluminio bajo la fuerza de un meteorito. Alrededor, la lluvia se apartó por la onda de choque y el cuerpo del robot salió despedido hacia atrás con un espeluznante sonido que se asemejaba al crujir de un centenar de ramitas, seguido por el inmutable silencio de la muerte.

No hubo tiempo para la agonía, tan sólo quedaron los restos mecánicos de su cuerpo desperdigados sobre la ladera, deshechos por la pura brutalidad.

Robot Jackson había muerto, con sus últimos pensamientos dedicados a la hermosa melodía que algún día esperaba conseguir replicar en sus canciones.

Datos
#71
Marvolath
Marvolath
Personaje

Inventario y Estado inicial

Aspecto onírico


Se detuvo, tanto por la sorpresa del lanzamiento y la reacción del felino como por el choque. Cuando se recuperó asintió al agradecimiento, sujetándose el sombrero con el índice y el pulgar a modo de saludo; y escupió mirando al... ¿Qué raza sería esa? Nunca la había visto antes. Ya lo pensaré después.

- Típico de los grandullones, tratando a los que somos pequeños como herramientas. - masculló.

Echó un rápido vistazo al resto de la escaramuza, atento ante posibles nuevos peligros. Parece que varios habían caído, y pronto la batalla acabaría. Se preguntaba en qué bando se había posicionado al intervenir, y en qué harían con él entonces. Pero ah, ¡malditos lamentos! Atacan sin descanso, y no podría aguantar mucho más. Existía la opción de retirarse fuera de la montaña, donde el intenso viento sería un descanso en comparación. Pero no podía abandonar a alguien en apuros.

Aprovechando que la atención de aquel estaría centrada en el ataque inminente, corrió los pocos metros que les separaban parcialmente oculto detrás del pequeño acróbata, preparado para interponerse e interceptar el probable contraataque con su escudo. Esto va a doler. Un hombro dislocado, como poco.

Bloque Defensivo
CON102
CONTUNDENTE
Defensiva
Tier 1
12
Costo de Energía
1
Enfriamiento
Contundente I - 3 Destreza - 3 Fuerza
Aprovechando la densidad y volumen de un arma contundente el usuario adquiere una postura defensiva en la que buscará encajar una ofensiva rival con la parte más maciza de su arma, amortiguando los daños. Logrando amortiguar un 50% más de daños cortantes.
[FUEx1,9] de Daño Mitigado


Resumen
#72
Ray
Ray
El joven marine se regocijó al ver que, aún con su horrible aspecto actual y entumecido y débil como se sentía en comparación a su habitual forma física, había sido capaz de derrotar a su enemigo con facilidad. Era verdad que parecía estar en las últimas, lo que sin duda restaba mérito a su logro, pero no dejaba de resultar satisfactorio.

Escuchó a Octojin a lo lejos, tratando de recordarle que cogiera sus monedas, pero por desgracia aquel pobre hombre no parecía tener ninguna. Parecía que iba a tener que esforzarse más para conseguir alguna más que sumar a la que ya poseía.

En ese momento su improvisado aliado el portentoso tiburón lanzó un brutal ataque con una ola de agua hacia dos enemigos. El zángano, transformado, voló por encima de ella y vio cómo el escualo se había lanzado sin dar tiempo a sus oponentes a reaccionar a su anterior ataque a por uno de ellos inmediatamente.

Era su oportunidad. Aprovechando la ventaja que le otorgaba su capacidad de volar podía atacar al otro de los dos individuos que se enfrentaban a la letal ola antes de que tuviera tiempo de sobreponerse al ataque del gyojin.

Así que se lanzó a través del aire a gran velocidad, buscando llegar a la posición de aquel enemigo justo después que la ola lanzada por Octojin, avanzandon desde su espalda en el más absoluto silencio para pillarle desprevenido y lanzó un feroz puñetazo contra su rostro buscando impactar directamente contra él. Si conseguía derrotarle buscaría posibles canicas entre sus pertenencias y se las quedaría.

Suterusu
NIN300
NINJUTSU
Pasiva
Tier 3
Los ninjas son expertos en el arte del sigilo, por eso siempre que lo deseen serán capaces de moverse y actuar sin emitir ningún ruido con el fin de no poder ser escuchados y pillar por sorpresa a sus enemigos.Siempre que se ataque desde el sigilo o desde un ángulo obtendrá un aumento en su siguiente acción ofensiva de +5 Agilidad y +20 de daño. Adicionalmente los ataques desde puntos ciegos que el usuario ejecute causarán un penalizador de -5 Reflejos en adversarios que no puedan detectarlos con alguna técnica o habilidad.

Impacto Directo II
U78001
ÚNICA
Físico
Tier
24
Costo de Energía
1
Enfriamiento
Combatiente I 5 Fuerza
El usuario encarará de frente a su adversario propinándole un poderoso impacto directo con alguna de sus extremidades. De acertar en su ataque, causará el efecto [Derribo].
Golpe Básico CaC + [FUEx2] de [Daño contundente]


Resumen


Cosas
#73
Galhard
Gal
El peor escenario de todos se había dado. Antes de que Galhard alcanzase a Kael para confirmar la alianza, el enorme gyojin tiburón arremetió con todo. No solo lanzó una gigantesca ola hacia él y el pirata que tenía el aspecto de Salazar Stone, sino que también demostró una fuerza descomunal, que rápidamente puso a Galhard en una situación desesperada. Sabía que aquel enemigo iba a ser todo un desafío a enfrentar, pero jamás hubiera imaginado la magnitud de la diferencia de poderes entre él y aquellos recién llegados a la montaña de los lamentos.

El viento rugía con furia, mezclado con el estruendo de la ola que se aproximaba, una pared de agua que parecía capaz de arrasar con todo a su paso. Galhard, con su pequeño cuerpo en forma de gnomo, se sentía insignificante frente a la inmensidad del ataque que se le venía encima. Su mente trabajaba a toda velocidad, intentando idear una estrategia que le permitiera sobrevivir. Pensó en utilizar el dial de propulsión de su mochila para ganar altura y escapar de la ola. Desde allí, podría intentar un contraataque, empleando su ataque más fuerte para herir al tiburón y ganar algo de tiempo.

Pero antes de que pudiera siquiera meter la mano en su mochila, algo cambió. Un destello en su visión periférica, una sombra que se movía a una velocidad sobrehumana, y en un instante, el impacto llegó.—Pero ¿Que dem... — Un aliado del gyojin tiburón, moviéndose con una fuerza y velocidad abrumadoras, alcanzó a Galhard de pleo. El golpe fue devastador, con su pequeño cuerpo siendo zarandeado como una muñeca de trapo en medio de una tormenta.

El dolor fue inmediato y paralizante. Galhard sintió cómo sus huesos crujían bajo la presión del ataque, y su visión comenzó a desvanecerse. Intentó desesperadamente recuperar el control, pero su cuerpo no respondía. Apenas si logró procesar lo que estaba ocurriendo antes de que el segundo ataque llegara, esta vez directo sin tempo a poder si quiera tensar el cuerpo para recibir el ataque . La fuerza del impacto fue tal que su corazón se detuvo por un instante, y el aire le fue arrancado de los pulmones.

Todo se volvió negro.

En el mundo onírico, donde las reglas de la realidad se distorsionaban, Galhard cayó sin vida, su cuerpo inerte golpeando el suelo con un sonido sordo. De su cintura, la bolsa de canicas que había recolectado se soltó, cayendo a un lado. Tres canicas rodaron fuera de la bolsa: dos de ellas eran normales, comunes, pero la tercera brillaba con un resplandor dorado, especial y única.

El cuerpo de Galhard yacía en el suelo, desapareciendo lentamente, mientras las canicas rodaban ligeramente, reflejando la luz tenue del entorno. El silencio que siguió al ataque fue casi abrumador, un contraste inquietante con el caos que lo había precedido. Galhard había caído, y con él, las esperanzas de resistir contra un enemigo tan poderoso. Pero las canicas, especialmente la dorada, aún estaban allí, esperando ser reclamadas como premio por alguno de los sectarios de Norfeo.
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#74
Balagus
-
Personaje


Aspecto onírico de Balagus


El oni no esperaba volverse a ver las caras de nuevo con el gato, a quien hacía dándose de bruces con la cara del nuevo contendiente. Al contar con un tiempo que realmente no tenía, despreocupó momentáneamente su defensa en favor por adoptar una postura más ofensiva y blandir el madero entre sus manos para iniciar su propia ofensiva.
 
Ver a la bola de pelo saltando de nuevo hacia él le sorprendió, dejándole indefenso contra un ataque a su pierna que no pudo esquivar.
 
- ¡Maldita bola de pelo inmunda! – Bramó al sentir el corte sobre su pierna. Podía seguir aguantando mucho más castigo como aquel, pero le hería más en el orgullo que una alimaña hubiera podido herirle tan fácilmente. – A ver cómo manejas tú lo que te voy a hacer en la cara. –

Rompecoraza
CON101
CONTUNDENTE
Fisica
Tier 1
14
Costo de Energía
1
Enfriamiento
Contundente I - 3 Destreza - 3 Fuerza
Dando un firme paso en el que el usuario buscará generar toda la potencia de impulso y una cierta inercia con la que golpeara con su arma sin compasión a su objetivo causando un [Empuje] de 6 metros.
Golpe Básico Arma Contundente + [FUEx1,9] de [Daño contundente]


Con ojos fijos en él, y el rostro congestionado por el enfado, cargó su enorme rama apuntándola directamente a la crisma del felino, tensó los hercúleos músculos de ambos brazos, y lanzó un ataque devastador. Pero tal había sido su ira ciega, que no había visto el rápido acercamiento del anciano, empujando al gato de la trayectoria e interponiendo el escudo entre el arma de Balagus y él.
 
El golpe trasmitió fuertes vibraciones por todo su brazo, he hizo que el gigantón apretara y enseñara los dientes. Aquel vejestorio tenía mucha más fuerza en su escuálido cuerpecillo de la que aparentaba para poder aguantar una acometida así, pero al menos se habría quitado de en medio y el pequeño gato estaría listo para recibir su propio garrotazo.

Resumen


Inventario
#75
Silver
-
Personaje

Aspecto Onírico


El impacto en la pierna del gigante fue satisfactorio, pero no tan eficaz como Silver hubiera querido. Aún así, el corte fue lo suficientemente profundo como para provocar una reacción furiosa del coloso verde. El pirata gatuno no tuvo tiempo de celebrar su pequeño triunfo, ya que la gigantesca rama se alzó en el aire, apuntando directamente a su cabeza con una fuerza que prometía un dolor considerable.

Esto se va a poner feo —murmuró, preparándose para lo peor. Pero justo en ese instante, sintió una sombra moverse a su lado, y antes de que pudiera reaccionar, Marvolath se lanzó en su defensa, interponiendo su escudo entre la rama y su pequeña cabeza.

El escudo recibió el golpe con un estruendo que resonó por toda la zona, enviando vibraciones a través del suelo y haciendo que el gigantesco Balagus apretara los dientes con frustración. Silver, por su parte, aprovechó la distracción y la agilidad felina le permitió reaccionar rápidamente.

“Muy útil esto de tener a alguien con un escudo al lado...”, pensó mientras se preparaba para contraatacar, “aunque no estaría mal tener aquí a Balagus, él sabría cómo lidiar con un bruto de este tamaño”. Claro que en su mente, el coloso verde no podía ser su compañero de tripulación.

Enseguida sacudió la cabeza, alejando esos pensamientos que solo serían una distracción. A continuación, con velocidad y precisión, decidió que era el momento perfecto y, aprovechando la situación, trazó un tajo rápido y certero con su espada, buscando profundizar el corte en la pierna del gigante.

El objetivo del corte era maximizar el daño y hacer que su oponente se lo pensara dos veces antes de subestimarlo de nuevo. Mientras lo hacía, una sonrisa traviesa se dibujó en su rostro felino. No importaba lo grande que fuera su oponente, siempre había una forma de derribarlo y solo había que encontrarla.

Cizaña
ESP101
ESPADACHíN
Fisica
Tier 1
13
Costo de Energía
1
Enfriamiento
Requisito: Espadachín I - 5 Destreza
Se trata de un simple pero rápido tajo con el arma buscando encajar un corte con la mayor profundidad posible.
Golpe Básico Arma Filo + [DESx1,9] de [Daño cortante]

Resumen
#76
Byron
Hizashi
El caos provocado por aquella encrucijada bélica había hecho acto de presencia en el escenario. Parecía que este se había hecho esperar para desatar con las mayores de las fuerzas posibles. El olor a sangre y acero poco a poco acompañarían a esta fuerza sobrenatural que arropaba con su cálido abrazo pasional a los presentes. Ya no solo eran las palabras de Norfeo las que alentaban las ganas de conflicto en cualquier individuo que se encontrase en el lugar, el caos, tendía una mano amiga a aquellos que se dejaban llevar por el camino de la destrucción. Allí, parecía que ya no quedaba nadie cuerdo, todos alzaban sus armas en busca de discordia, presos de sus deseos más primigenios, ya no quedaba nada más que el aliento de masacre dentro de aquellos seres.

Se mantuvo alejado, aun con el mismo objetivo, ofrecer apoyo en caso de que sus compañeros lo necesitasen, pues aun no queriendo seguir los macabros juegos de aquel dios, tampoco quería ver como sus acompañantes morían. Aunque reviviesen, la experiencia era lo suficientemente traumática como para no querer hacerlos pasar por eso, lo sabía de primera mano. Pateó el suelo con espada en mano por la frustración y siguió esperando el momento en el que necesitasen ayuda. Se mantenía alejado, lo suficiente como para no verse envuelto en un ataque perdido por alguno de los dos bandos, pero en caso de ser necesario, no tardaría más de dos minutos en llegar a ayudar a alguien.

La figura de la chica rubia pasó ante sus ojos, siguiendo al Gyojin con retardo, algo comprensible viendo la motivación extrema que tenía él concretamente. Segura de sí misma, corría con arma en mano para unirse a la batalla. No tardó en llegar también la medio sirena, tal para cual, siempre juntas, aunque esta se quedó guardando las distancias, quedando cerca del joven espadachín, parecía que ella no era de las que luchaban en primera línea.

Después de la distracción que estas dos habían ocasionado en el muchacho, volvió a mirar al frente para captar cualquier detalle que lo hiciese entrar en acción. Así volvió a fijar su atención en la vanguardia del grupo, liderados por el colosal tiburón blanco, y aquel que no había tenido capacidad de conocer, pero había sido usado como bala humana. Ah sí, y el pato bélico, era fácil olvidarlo por su tamaño. El mestizo de pelirrojo aún esperaba su momento en la cima.

No tardaron en cobrarse sus primeras víctimas, los dos individuos con los que se habían encontrado, habían sido arrasados sin opción alguna de contraatacar. Es más, el golpe combinado fue tan salvaje para uno de ellos que murió casi en el acto solo dándole tiempo a señalar el cero que se encontraba sobre su cabeza. Con la primera baja conseguida, y la sangre derramada, el líder de aquel sectario grupo dio la orden de atacar al que se alejaba de ellos.

Sin dudarlo y como si fuese nacida para la batalla la rubia de redondo y trabajado trasero, interceptó a aquel tipo, golpeando con la culata de su arma de fuego, a la par que disparaba para ganar más fuerza con el retroceso de este, en aquel momento parecía la misma muerte reencarnada sobre los caídos.

Todo esto era acompañado por los cantos de la híbrida morena, que poniendo sobre aviso que la cubriese, afinó su voz para motivar a sus aliados con su canto angelical. Pensando que solo sería algo para poner banda sonora al combate, sorprendido vio henchido su pecho de poder, las frases melódicas de aquella mujer parecían cobrar forma corpórea, y como si de energía se tratasen, dotaban a sus compañeros de batalla de un poder que casi podías ver reflejado en los resplandecientes ojos de los bendecidos. En cierta forma, aquello se sentía como los rayos del Sol para el chico que solía pelear bajo su influjo.

No pudo evitar pensar que, solo con su mera presencia, estaba siguiendo el camino que aquella molesta deidad tenía preparados para ellos. Por desgracia para él tendría que admitir su derrota en aquella partida de ajedrez, viendo la situación poco esperanzadora no iba a ser posible llevar a cabo su venganza. Así que con un leve resoplido frustrado, dejó correr un tupido velo, después de todo, era un sueño, ¿no? Aquellos pensamientos que invalidaban su anterior convicción resonaban en su mente, más, ¿qué iba a hacer? No daría la sádica lucha y veneración que el dios quería, pero haría todo cuanto estuviese en su mano para que sus compañeros se viesen satisfechos con su lucha.

Un estruendo lo sacó de su debate interno, otro caído más. Pudo ver a lo lejos como el cuerpo sin vida de un lobo humanoide caía a manos de Yoshi en la cima del claro, ¿cuándo había llegado el perro? Y al lado contrario, a la misma altura que Byron, continuando con su labor, el gigantesco tiburón arrasaba parte de la zona con un potente ataque que se cobraba la vida de otros dos individuos. Una masacre en toda regla, aquellos que se oponían a la tiranía de los fieles a Norfeo caían como débiles insectos, uno tras otro, sin oportunidad alguna de ofrecer resistencia. Viendo el resultado fue inteligente quedarse alejado de ellos esperando el hueco, de haberse entrometido, hubiese vuelto a morir.

Volvió a dirigir la mirada a la rubia para ver como la iba.

- Qué diablos.- Dijo para sí dispuesto a prestarla apoyo.

Salió raudo hacia ella, con la espada lista para hacer su movimiento, observó como la disputa entre ella y su enemigo se volvía más cruda y violenta. El sujeto sangraba por su hombro por la herida provocada por aquel ataque. La sangre misma se fundía con el aire, cosa que embriagaría de poder al enfermizo dios. Aun así, haciendo gala de una voluntad inquebrantable, aquel fornido hombre, no cesó en su iniciativa y estuvo dispuesto a atacar, cargando con su enorme naginata hacia ella. El ataque se acercó a ella, incluso la potencia del golpe generó una pequeña cortina de polvo que le impidió ver el resultado. Preocupado apretó los dientes, y estando lo suficiente mente cerca lanzó su primer golpe.

- ¡NADIE TOCA A MI WAIFU!- Exclamó al mismo cielo lo suficientemente alto como para que la pareja lo escuchase. Ni siquiera sabía que significaba ese término, pero apareció por su mente en ese mismo momento y tuvo la imperiosa necesidad de gritarlo.

[Imagen: NFvQs8h.png]
Primera Rotación Solar
U22101
ÚNICA
Esgrima
Tier
17
Costo de Energía
1
Enfriamiento
10 DES 10 AGI
El usuario arranca con una rápida zancada, pillando inercia y acercándose 5 metros rápidamente, ahí lanzará un fuerte tajo horizontal dibujando una media luna con su espada. Desarmando al enemigo por el fuerte golpe.
[Desarme] / Ataque básico+0,8xDES de daño cortante

Recorrió rápidamente los últimos 5 metros que le quedaban con una zancada, lanzando un poderoso golpe con su espada con la intención de desarmar al rival. Si el efecto era el deseado, no se vería con la oportunidad de protegerse del siguiente golpe. Y sirviéndose de un rápido giro para potenciar el tajo, lanzó un fuerte golpe con la intención de cortarlo por la mitad.

[Imagen: GPp12Sr.png]
Segunda Rotación Solar
U22201
ÚNICA
Esgrima
Tier
17
Costo de Energía
1
Enfriamiento
15 Des 15 Agi
Realizando un rápido giro para servirse de la inercia, el usuario lanzará un potente corte horizontal con la intención de cortar todo a su paso. Dibujando un circulo de 360 grados con su hoja.
Ataque básico+2xDES de Daño Cortante

- ¡Espero que esté bien rubia, tienes que ayudarme a convencer a tu amiga de pagar lo que debe!- Gritó intentando bajar la tensión de la situación.

[Imagen: Ui5vQ2C.png]

DATOS
#77
Marvolath
Marvolath
Inventario y Estado inicial

Vio la gran porra ascender y descender. No lo dudó: se lanzó, escudo por delante, interponiéndose entre los dos. Cerró los ojos, apretó los dientes, y contrajo los músculos. Sintió un calambre que le recorría todo el brazo y escuchó un sonido seco. Y después, nada. Se sintió flotar. Hasta que dejó de flotar.

El duro suelo le recordó donde se encontraba, aunque tras rodar unos metros ya no estaba tan seguro de hacia donde quedaba. Se incorporó, clavando una rodilla en el suelo mientras trataba de palparse el brazo dolorido. La armadura impedía consolar sus articulaciones, pero al menos no había nada roto ni fuera de sitio.

"Es duro. Incluso siendo dos no creo que podamos terminar antes de que la montaña acabe con nosotros." - pensó, buscando a su alrededor algo que pudiera ayudarles. - "Es un valle, sin alturas por las que tirarlo. Podría intentar subir y quizá desprender alguna roca... pero es poco probable que le acierte, y arriesgado..."

Suspiró, resignado a tener que seguir intentándolo. Centro de nuevo su atención en sus compañeros de baile. El gato estaba ensañándose con la pierna, y esa distracción le daba la oportunidad de acercarse discretamente.

Una armadura no es lo ideal para ser sigiloso, pero la lluvia, el caos de la batalla, y ¡ESOS MALDITOS LAMENTOS! podrían serle de ayuda, por una vez. Fue dando un rodeo, procurando quedar en su espalda. 
Ahora, solo quedaba esperar el momento oportuno.


Resumen
#78
Balagus
-
Personaje

Aspecto onírico de Balagus


El nuevo y veloz ataque sobre la pierna, demasiado rápido como para repelerlo, hizo que Balagus rugiera de dolor. Su iracunda y relampagueante mirada volvía a estar fijada en el molesto y peligroso felino que lo acosaba sin cesar.
 
- ¡Ya me he cansado de tus jueguecitos, felino asqueroso! –
 
La rabia hacía arder sus entrañas y tensaba los músculos con mayor fuerza. Casi como si no le pesara, alzó la rama y la dejó caer sobre el gato a gran velocidad, esperando pillarle por sorpresa con su sobrehumano aguante. Pero el oni ya había visto a muchos enemigos esperarse el primer golpe, e incluso esquivarlo, por lo que no se detuvo en su ofensiva y, ensañándose con aquel desgraciado peludo, uso la inercia del primer ataque para dejar caer un segundo.
 
Los pies se le resbalaron momentáneamente sobre la gravilla suelta. Las respiraciones le llenaban y vaciaban el pecho con creciente dificultad. Se repetía mentalmente que debía de aguantar. Que tenía que aguantar. Cuántas palizas peores se había llevado a manos de sus antiguos amos, de los gladiadores del foso, del látigo y los hierros candentes…

“¿Hierro? ¡Hierro!”

Miró en derredor rápidamente, buscando al viejo del escudo. ¿Cómo podía haberse olvidado tan trivialmente de él? ¿Hasta ese punto le había cegado la ira contra el felino?


Resumen


Inventario
#79
Airgid Vanaidiam
Metalhead
Absorta por la sed de sangre de la batalla, por la repentina fe que Norfeo había inspirado en ella, se lanzó sin dudarlo hacia el joven de cabellos rubios. Sin previo aviso, sin palabras de por medio. Aquello solo le avisaría de su ataque, algo que no buscaba. Su intención era ser rápida, eficiente, asesina. El primer golpe, el ocasionado con la culata del rifle, impactó de lleno contra su bonita cara. Era un hombre objetivamente atractivo. Una pena que estuvieran en bandos enemigos. Sin embargo, el disparo no salió como Airgid lo había planeado, pues su oponente fue capaz de reaccionar justo a tiempo, alcanzando su arma y desviando la bala disparada en un movimiento rápido y sorprendente. La sonrisa de la rubia se afiló, sintiendo la adrenalina recorrer sus venas como oleadas de puro éxtasis. Oh sí, Airgid adoraba una buena pelea. No hacían falta palabras, las acciones hablaban por si solas con una sinceridad apabullante y pura, violenta pero hermosa.

Entre todo el bullicio y el frenesí, una nueva sensación abordó su cuerpo. Una hermosa voz cantaba en un idioma desconocido pero con una fuerza que contagiaba a cualquiera. La mujer no solo reconoció que se debía gracias a Asradi, también fue capaz de asimilar lo que aquella canción quería transmitirle a su cuerpo y a sus músculos. Un poder que se sumó a todo lo que ya sentía de por sí.

Acto seguido, aprovechando la destreza de su movimiento, su enemigo buscó lanzarle un ataque a la mujer con su naginata. Un ataque que seguramente, bajo circunstancias normales, no lo habría visto siquiera venir. Pero no esta vez, no en esta ocasión, Airgid había sido bendecida por el mismísimo Norfeo, sus capacidades físicas habían evolucionado. Ya no era la misma persona que hacía unos minutos, o quizá horas, la verdad es que era complicado llevar la cuenta del tiempo en un lugar como ese. La mujer fue capaz de anticiparse a su ataque, así que rápidamente se movió hacia su costado derecho, tratando de esquivar su afilada arma. Una acción que, inesperadamente, se cruzó con el movimiento del chico de cabellos violetas, que saltó en defensa de la rubia. Le atacó de manera horizontal y directamente contra el arma de su enemigo, quizás intentando arrebatárselas de las manos. No obstante, no fue solo eso lo sorprendente, si no también la forma en la que la llamó. "¿Waifu? ¿Eso qué cojone significa?", se preguntó a sí misma, aunque pronto se olvidaría de aquella extraña palabra. No podía permitirse perder ni un solo segundo.

Entre que intentó esquivar y la intervención de Byron, finalmente el golpe no le dio. Quizás habría podido ella sola, quizás no... ya pensaría más adelante si darle las gracias o no. Su compañero lanzó una nueva ofensiva, esta vez buscando atacarle directamente, con brutalidad, con fiereza. Al ver sus intenciones, la rubia decidió no quedarse atrás. Avanzó la poquísima distancia que les separaba y lanzó ahora un poderoso e increíblemente veloz puñetazo impulsado por la fuerza otorgada tanto por Norfeo como por Asradi, con el objetivo de golpearle directamente al estómago.

Sin mirar atrás, dio una orden, directamente dirigida hacia ya no solo su compañera, si no su mejor amiga. - ¡A'radi, sube a mi' hombroh! - La morena había pedido que la cubrieran mientras se dedicaba a cantar, y eso trataría de hacer, aunque a su manera. Flexionó ligeramente las rodillas para agacharse un poco y facilitarle el salto a Asradi. Si se colocaba sobre los hombros de la rubia, podría tenerla controlada y no permitía que nadie le pusiera un dedo encima sin pasar por ella primero. Además, al lanzar su puñetazo se acababa de dar cuenta del poder extra tan valioso que Asradi le había otorgado. No sabía qué más trucos se guardaba bajo la manga, pero desde luego tenía muchas ganas de averiguarlos. - Y tú. - Se dirigió a Byron. - Si quiere vé teta, gánatela. - Le dijo sin más. ¿Qué coño significaba eso? A saber. Tampoco iba a explicarse. Le gustaba un poco jugar con la ambiguedad.


Resumen

Ataques y defensas

Stats

Surprise
#80


Salto de foro:


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