Marvolath
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05-11-2024, 12:12 AM
Sentado a la sombra de la borda para protegerse del cálido sol de la mañana, Marvolath repasaba distraído uno de sus libros de medicina. Llevaba pocos consigo, y casi todos eran compendios de medicamentos, dónde encontrarlos, y cómo usarlos. Los había leído tantas veces que había memorizado hasta en qué páginas estaban las erratas, pero no venía mal repasar de vez en cuando.
El viento soplaba a favor en un mar en calma, y poco había que hacer mientras navegaban rumbo a un barco que Silver quería encontrar, por lo que la tripulación estaba ociosa. Le parecía escuchar a Balagus cacharrear en la cocina, a Dharkel lamentarse junto al mástil, y a Silver... hacía rato que no lo veía. Tampoco tenía interés en comprobarlo, pues mientras le dejasen tranquilo él haría lo propio. Y, como en respuesta a este pensamiento, unos pasos ligeros que casi parecían canturrear en la madera se dirigían hacia él.
Unas piernas se detuvieron junto a él, izándose para quedar colgando de la borda junto a él. Ninguno dijo nada, pero una sensación de incomodidad empezó a picarle en la nuca mientras leía, producida por la certeza de que unos ojos cotilleaban lo que hacía.
- Supongo que vienes por el "examen" que mencionaste antes. - marcó con un dedo la página en la que estaba, frotándose los ojos con la otra mano para aliviar los ojos cansados - Supongo que no servirá de nada recordarte que soy médico, y que procuro curar más que dañar, ¿verdad?
La única respuesta fue una nueva sensación en el picor de su nuca, de una sonrisa maliciosa que se divertía con la situación. Juntó el índice y el pulgar de la mano que sostenía el libro, cerrándolo con un golpe seco, que siguió con un suspiro de resignación.
- Acabemos cuanto antes.
El viento soplaba a favor en un mar en calma, y poco había que hacer mientras navegaban rumbo a un barco que Silver quería encontrar, por lo que la tripulación estaba ociosa. Le parecía escuchar a Balagus cacharrear en la cocina, a Dharkel lamentarse junto al mástil, y a Silver... hacía rato que no lo veía. Tampoco tenía interés en comprobarlo, pues mientras le dejasen tranquilo él haría lo propio. Y, como en respuesta a este pensamiento, unos pasos ligeros que casi parecían canturrear en la madera se dirigían hacia él.
Unas piernas se detuvieron junto a él, izándose para quedar colgando de la borda junto a él. Ninguno dijo nada, pero una sensación de incomodidad empezó a picarle en la nuca mientras leía, producida por la certeza de que unos ojos cotilleaban lo que hacía.
- Supongo que vienes por el "examen" que mencionaste antes. - marcó con un dedo la página en la que estaba, frotándose los ojos con la otra mano para aliviar los ojos cansados - Supongo que no servirá de nada recordarte que soy médico, y que procuro curar más que dañar, ¿verdad?
La única respuesta fue una nueva sensación en el picor de su nuca, de una sonrisa maliciosa que se divertía con la situación. Juntó el índice y el pulgar de la mano que sostenía el libro, cerrándolo con un golpe seco, que siguió con un suspiro de resignación.
- Acabemos cuanto antes.