[Común] Diario de Entrenamiento [Solitario]

Hacia mucho tiempo que Shizu tenia un problema, uno muy grave, su tamaño excesivo. Ella era infinitamente más grande que los humanos del East Blue y por su desgracia las ciudades, casas y el propio cuartel de la marina estaban diseñados para humanos. Incluso si estuvieran diseñados para gigantes, ella era casi el doble de grande que un gigante promedio, lo cual hacia que fuera un problema inmenso el simplemente vivir como los demás, puesto que si se despistaba podría causar un pequeño caos y destrucción por el lugar.

Pero eso estaba a punto de ser cosa del pasado. Gracias a la Akuma no Mi que consumió, la Suna Suna no Mi, la cual le daba el poder de transformar su cuerpo en arena y tener el mismo compuesto por esta. Gracias  a esa peculiaridad se le ocurrió la posibilidad de comprimir y condensar la arena de su cuerpo con el fin de reducir su volumen de forma drástica, cuanto mayor compresión mayor seria la presión y por lo tanto la dureza que alcanzaba su cuerpo. Tardo mucho en desarrollar esta idea y pulirla, una cosa era tener la idea brillante y la otra era llevarla a su ejecución. Por no hablar del increíble esfuerzo y control sobre la fruta que requería el poder manejarla a tal punto de comprimir el cuerpo y mantenerse con una forma estable y no descontrolarse de golpe y crecer de nuevo cuando estuviera dentro de un edificio y destruir el mismo en mil pedazos.

Pero por ahora se habia desenvuelto muy bien con la ejecución de su técnica, estaba dando buenos resultados y podía lograr reducir su volumen hasta diez veces. Seguía siendo una persona grande, pero lo era en los parámetros humanos, lo cual le permitía hacer vida en el cuartel, aunque por ahora el dormir le tocaba aun en su cuarto especial por si dormida desactivaba su técnica y de golpe crecía, no fuera que aplastara a todos en los dormitorios.

Su único y pequeño inconveniente es que al hacerlo su tez se tornaba más oscura, casi como morena, en ocasiones controlaba mal su cabello y era más largo, pero se seguía notando por sus rasgos que era ella, pero esto generalmente solo pasa cuando se alcanza la compresión máxima del cuerpo y la arena estaba excesivamente comprimida, ganando de paso su cuerpo una mayor dureza y rigidez, como si se comparara el diamante con el carbón.

La arena de su cuerpo lograba comprimirse con satisfacción. Lo cual condensaba su forma a una versión miniatura de si misma, aunque su aspecto se veía ligeramente alterado al oscurecerse la piel, era un tono más tostado y marroncito propio de la tierra solida, más que simplemente ser un oscurecimiento como el que se ve habitualmente con el Haki. 

Aunque al principio solo habia logrado ir menguando unos pocos metros su estatura, en el presente ya lograba reducir hasta los 4 metros su altura, eso era una barbaridad, puesto que era como 10 veces su tamaño, nunca habia contemplado el mundo desde una perspectiva tan pequeña y bajita, era sin duda algo nuevo y fascinante que nunca habia experimentado.

Pero aun era algo muy temporal. Era una transformación que requería mucha concentración y gasto de energía constante. Sin duda una técnica que por ahora no podía mantener mucho tiempo, así que no podía hacer el tonto aun entrando en la base muy descuidadamente no fuera que se agotara o perdiera la concentración allí dentro y de golpe creciera y lo destruyera todo sembrando el caos en el cuartel.

Por eso la gigante partió al campo de entrenamiento para sentarse tranquilamente y tomando profundamente una bocanada de aire, comenzar a respirar lentamente y dejar la mente en blanco para meditar. Para controlar mejor esa técnica debía lograr mejorar su concentración, debía lograr tener la cabeza despejada y asimilar ese estado como algo natural que no le requiera un esfuerzo de pensar, algo tan natural como el mismo respirar. De lo contrario seria imposible lograr intentar llevar una vida normal usando esa técnica. 

Eso era lo más importante, la meditación para lograr encoger la forma y no romper todo de forma descontrolada. El consumo energético era algo problemático también, pero más fácil y sostenible, uno sabe bien cuando se cansa y llega a su limite, puedes medirlo y con el tiempo optimizar dicho gasto, pero la concentración era el problema, romperla de golpe podia ser algo brusco y repentino que ocurriera por la mayor nimiedad y podria terminar en una gran tragedia.