¿Sabías que…?
... Este foro se abrió el día de One Piece?
[Evento - P] Setas grandes y niebla densa. ¿Qué puede salir mal?
Norfeo
El Poeta Insomne
Un temblor sacudió el bosque y entonces en la distancia una gran venus atrapamoscas se alzo entre el bosque, por alguna razón la niebla se volvía más ligera al mirar hacia ese lugar como si invitara a acercarse... ¿Aguardara la salvación o la perdición en ese lugar?...

[Link al Centro del Bosque]
#21
Lobo Jackson
Moonwalker
Pronto tuvo respuesta para su pregunta. 

La visibilidad del bosque de setas comenzó a clarear, una suave brisa parecía diluir la espesa niebla y convertirla en una neblina más fácil de atravesar con la mirada. Agarrado al champiñón, Lobo Jackson observó con gran curiosidad el emerger de una gigantesca planta que se parecía mucho a aquellas famosas devoradoras de insectos. Ladeó la cabeza cual husky confuso mientras gozaba del privilegio de aquella inusual aparición, pero por algún extraño motivo, sentía que la planta parecía el lugar perfecto para ir.

- ¿Sabéis qué-gara? - Dijo en voz alta. - Me harté de recibir palos por todos lados, ¡me piro-gara! -

Decidido a dejar atrás a los kamikazes y lanzahongos, se sintió con ganas de volar. Extendió el brazo hasta agarrar el borde del sombrero del hongo que le servía de punto de mira y comenzó estirarlo hacia abajo, al tiempo que bajaba por la seta y llegaba hasta el suelo. Comenzó a andar hacia atrás, estirando, estirando, estirando y estirando mientras ganaba energía potencial sobre el micológico resorte... Hasta que la tensión de la seta se hizo notar en sus manos.

- ¡Ahora he de irme! ¡Mi planeta me necesita-gara! - Dijo antes de que diera un pequeño saltito, no estaba seguro de por qué pronunció esas palabras pero en su interior sentía que eran las adecuadas. El hongo al que estaba sujeto regresó con fuerza hacia su posición inicial, catapultando al mink con energía hacia el cielo en dirección a la gigantesca venus. - ¡Sayonara-garaaaaaa! - Su voz se perdió en la lejanía mientras que su cuerpo se volvía un pequeño bosquejo en el horizonte.

Aclaraciones
#22
Shiro
Ninguno
Los segundos pasaban y la tensión aumentaba a cada momento que no ocurría nada. Sentía la niebla como un manto frío recorrer mi piel desnuda mientras la cabeza comenzaba a jugarme malas pasadas. Seguía sin comprender cómo mi mente era capaz de elaborar un sueño tan retorcido, raro y a la vez tan real. Notaba como la niebla envolvía mi piel desnuda como un manto brumoso, como un abrazo frío y pegajoso que envolvía hasta mis partes más íntimas. Era una sensación de lo más extraña, una mezcla de vulnerabilidad y desconcierto a la que no estaba muy acostrumbrado.

No había ningún punto de referencia o sonido que me guiase y la incertidumbre de si el lobo terminaría apareciendo justo por donde no miraba me estaba volviendo loco. Necesitaba hacer algo si no quería terminar cayendo en un ataque de pánico, por lo que decidí que una vez más volvería a moverse. Ya daba igual si me perdía o no, puesto que no sabía dónde narices estaba y si nada de esto estaba siendo real.

-Seguro que Terence le ha echado algo a la comida que hice antes de dormir… La próxima tortilla que cocine estará bien hecha. Nada de esas pijadas que tanto le gustan - maldije al pelinegro mientras dejaba el grupo de setas que había estado usando como cobertura. Alguien tenía que tener la culpa… y desde luego me negaba a admitir estar tan trastornado para que mi mente imagine cosas así. Si esto fuese cosa de mi psique ya hubiese aparecido Nanako por algún lado. Siempre lo hacía y no había ningún rastro de la pelirroja.

Entonces un nuevo retumbar hizo que me parase en seco preparándome para el peligro. Un nuevo augurio apareció en este ominoso lugar y como un faro en mitad de la tormenta apareció una planta gigante en mitad de la niebla, emitiendo una especie de resplandor  que atravesaba la niebla. El fulgor que emitía se antojaba cálido y acogedor, hipnótico incluso. No sabía por qué, pero la planta lo atraía como la mierda a las moscas y sin darme cuenta mis pasos ya me dirigían hacia ella.

resumen
#23
Drake Longspan
[...]
Ahí se encontraba Drake Longspan, con la percepción de la realidad completamente alterada y más colocado que un estante de Legos. Caminaba sin atisbo alguno en dirección a las ruinas cuando le pareció escuchar un paso detrás de él. Miró su blunt, luego a su espalda, y comenzó a soltar una carcajada.

Heh heh heeeh.

¿Desde cuándo se reía así? Ni idea, tampoco tardó mucho en cambiar su risa por sorpresa.

Hehehe ... ¿Pero qué coño?

El suelo a sus pies temblaba, lo que hizo que se cayera de culo contra el suelo. Amortiguado gracias a las setas de la Ciénaga del Delirio, se levantó sin dolor alguno, comenzó a rascarse la barba antes de comenzar a liarse otro. ¿La supuesta canica esa que llevaba? Ni idea, ni se había percatado, no giraba en torno a nada ni tenía una razón real para preocuparse por ella. Cuando la sintió, la lanzó al suelo y siguió pasando su lengua por la papelina en dirección a la proveniencia de lo que consideraba ruido. 

Y así, puso rumbo al medio de aquel pantano oscuro y húmedo. Ignorando completamente la presencia invisible a su espalda, que haga con él lo que quiera, total, iba demasiado despreocupado como para preocuparse de hombres, mujeres o animales invisibles.

Personaje
#24
Timsy
Timsy
-¡Ouch!

El impacto contra aquel lobo me dolió en la cabeza. Con aquello acababa de comprobar de primera mano y de la peor manera posible que los golpes contra otros seres no estaban exentos de dolor – Nota mental, estamparse contra el suelo o las setas – sin embargo la vida tenía una cruel y peculiar venganza. El pobre cánido, víctima del azar y de la densa niebla que no me permitía ver más allá de unos pocos metros para reaccionar a tiempo, rebotó contra el suelo, que no le provocaría daño alguno al lobo, al menos no de manera inmediata, pero sí en diferido. La testa del cuadrúpedo me golpeó, esta vez ella a mí, hiriéndome por segunda vez, lo cual liberó una segunda masa de baba que empaparía al lobo por completo dejándolo completamente babeado y pegajoso. ¡Terribles los caprichos del destino! Sin embargo no todo terminaba ahí.

El golpe del lobo hizo que saliera volando hacia atrás, alejándome de él, y como de caprichoso fue el azar, ¡que me lanzó de nuevo contra uno de aquellos hongos gigantes que no dudó en internarme de nuevo aquella densa y a estas alturas ya molesta niebla. Volaba por el cielo, pero en esta ocasión lo hacía girando sobre mí mismo, dando vueltas en el aire como los rizomas de posidonia transportados por las corrientes marinas. En mi infinito centrifugar escuché un gran temblor allá abajo, en el suelo. Aunque no pude ver nada, noté que la niebla se hacía menos densa a la derecha de la dirección en la que me había lanzado la seta. Allí, en el centro del bosque pude ver una gran planta. ¿Qué escamas era aquello? ¿Dónde estaba? ¿Por qué cuanto más tiempo pasaba allí más raro era todo?

En cuanto pudiera tocar el suelo o ver una seta en la que rebotar, me dirigiría hacia allí.
Aclaraciones para Lobo

Aclaraciones

#25
Tenka
Anticuario
Aquel individuo de aspecto extraño no pareció inmutarse. Tomé su canica sin reacción alguna por su parte y salí del lugar arrojándome sobre una seta. Tan pronto como alcancé altura pude ver cómo de la nada brotaba un planta gigante de aspecto peculiar. La trayectoria me acercó a la misma mientras seguía invisible. Me pareció ver alguna silueta entre la bruma, que, además había reducido su densidad. Parecía que no estaba solo en aquella zona así que decidí mantener mi estado de discreción.

La planta comenzó a acumular un agua de tonos irisados. Era de gran belleza aunque de alguna forma dejaba entrever signos de una peligrosidad innata y antigua.

Me aproximé, una vez había aterrizado, a la colosal planta. Seguía invisible y no veía a nadie cerca así que avancé con cuidado hacia la fuente vegetal.
#26


Salto de foro:


Usuarios navegando en este tema: 1 invitado(s)