Panda
JANAI
13-12-2024, 02:31 AM
Panda muerde el diamante y comprueba la dureza del mismo. Convencido o con dudas suficientes como para creerle a Merk, Panda decide acompañarlo a la mina como su guardespaldas. Merk acepta, pero le informan que no irán solos y que irán al caer la tarde para evitarse problemas, ya que el rumor de la mina se había extendido como el aire.
En eso el mercader le comenta a Panda que hay una razón por la cual nadie quiere asentarse en Yotsuba, más allá de la leyenda del capitán de la marina que supuestamente defiende aquel territorio a capa y espada, desde el más allá.
-Mm que interesante, me encantaría saber un poco más sobre esa historia. Igualmente quédese tranquilo Merk, vengo bien preparado puede confiar en mi.- Responde Panda, sumamente intrigado por conocer aquella historia de Yotsuba, ya que hasta ahora solo sabia de ciertos rumores.
Igualmente Panda estaba preparado y listo, había traído un equipo por demás completo ante cualquier eventualidad, con el que esperaba poder solventar cualquier situación que se presentara. Desde botiquines simples, hasta varias reservas de comida y bambu para compartir.
Quedan unas horas antes de salir a lo desconocido de Yotsuba, así que Panda aprovecha para hacer sociales con aquellos que lo acompañaran en esta nueva aventura, naturalmente se presenta con cada uno y de paso intentara indagar un poco más en aquella historia que conto el mercader a ver si alguien sabia un poco más o tenia más detalles de los supuestos peligros que se podían encontrar en las profundidades de esa mina. De paso le ofrecerá bambu fresco a cada persona que conozca, mientras el mismo comía. Después de todo, no se puede indagar una cueva con la pansa vacía, claro que no!.
Era una isla bastante curiosa sin duda, llena de misterios y misticismo, como si fuera un gran territorio inexplorado y lleno de ruinas de una antigua ciudad, que a la vez transmitían un sentimiento nostálgico y melancólico.
En eso el mercader le comenta a Panda que hay una razón por la cual nadie quiere asentarse en Yotsuba, más allá de la leyenda del capitán de la marina que supuestamente defiende aquel territorio a capa y espada, desde el más allá.
-Mm que interesante, me encantaría saber un poco más sobre esa historia. Igualmente quédese tranquilo Merk, vengo bien preparado puede confiar en mi.- Responde Panda, sumamente intrigado por conocer aquella historia de Yotsuba, ya que hasta ahora solo sabia de ciertos rumores.
Igualmente Panda estaba preparado y listo, había traído un equipo por demás completo ante cualquier eventualidad, con el que esperaba poder solventar cualquier situación que se presentara. Desde botiquines simples, hasta varias reservas de comida y bambu para compartir.
Quedan unas horas antes de salir a lo desconocido de Yotsuba, así que Panda aprovecha para hacer sociales con aquellos que lo acompañaran en esta nueva aventura, naturalmente se presenta con cada uno y de paso intentara indagar un poco más en aquella historia que conto el mercader a ver si alguien sabia un poco más o tenia más detalles de los supuestos peligros que se podían encontrar en las profundidades de esa mina. De paso le ofrecerá bambu fresco a cada persona que conozca, mientras el mismo comía. Después de todo, no se puede indagar una cueva con la pansa vacía, claro que no!.
Era una isla bastante curiosa sin duda, llena de misterios y misticismo, como si fuera un gran territorio inexplorado y lleno de ruinas de una antigua ciudad, que a la vez transmitían un sentimiento nostálgico y melancólico.