Mc. Duck simplemente espero paciente mientras esperaba su pedido, pero hay gente armando jaleo muy alto cerca suya, examino solo superficialmente a la gente de al lado, empezamos mal con aquel tipo de pelo oscuro que lo miraba raro, luego estaba el tipo gigante cachas que parecía fuerte pero no muy inteligente junto con las las chicas que bebían de sus pasiones, una rubia mas vivaz y una de pelo negro mas fría que insinuó que se comieran al pato, ósea a él, aunque estaba acostumbrado a las bromas rara vez las solía dejar pasar, pero no iba a ponerse a la altura de una dama de compañía. Y por otro lado, alguien intercedió rápidamente para evitar un conflicto.
Ubben Sangrenegra...¿verdad? - dijo el pàto revelando su naturaleza humana, aunque claro ya había sido desenmascarado- ¿a ti también te han invitado
Le extrañaba, pero no le sorprendía al fin y al cabo trabajadores del inframundo siempre buscan oportunidades de ascenso y de mejorar su posición. Por otro lado, no sabia si el había sido invitado por los Cheetony para aquella reunión.
-¿o estas demasiado ocupado en tu reunión social?
Dijo volviendo a mirar a su grupito de fenómenos, y lo decía un pato inteligente, que de por si es un fenómeno de feria. pero eran algunos tan raros y en grupo parecían muy ruidosos, uno hasta había invitado a todo el establecimiento. No eran gente con la que pasar desapercibidos. ojala el pato pudiera decir que a su lado pasaría desapercibido, pero con quien había quedado no era cualquier cosa. Destacaría incluso mas que aquel grupo.
Y efectivamente su conversación fue interrumpida, cuando alguien entro en el local, y muchos de los presentes callaron, por que a diferencia de los que había en el local, unos completos don Nadie, el que había entrado era un tipo popular, aunque no exactamente en el buen sentido. Vestido con ropas elegantes en vez de unas mas callejeras cruzo la sala con su prominente hocico, mientras algunas personas abandonaban el local, temerosos, pero otros sonrieron y incluso alguno hizo un gesto de reverencia, por ejemplo el pato abandono su cojin y se inclino ante el, sus hombres se inclinaron también, por que era una muestra de respeto a un importante miembro de la mafia.
-Señor Chettony, No esperaba verlo en persona -esperaba un enviado o alguien similar- ¿en que puedo...
-¡Pato! es verdad que es un pato. Bien coleguilla, no necesitas estar tan estirado. -chasqueo los dedos a un camarero que algo intimidado asintió esperando tomar notas- hamburguesa doble con queso, sin verduras... como encuentre un pepinillo.
Chester Cheetony
Ubben Sangrenegra...¿verdad? - dijo el pàto revelando su naturaleza humana, aunque claro ya había sido desenmascarado- ¿a ti también te han invitado
Le extrañaba, pero no le sorprendía al fin y al cabo trabajadores del inframundo siempre buscan oportunidades de ascenso y de mejorar su posición. Por otro lado, no sabia si el había sido invitado por los Cheetony para aquella reunión.
-¿o estas demasiado ocupado en tu reunión social?
Dijo volviendo a mirar a su grupito de fenómenos, y lo decía un pato inteligente, que de por si es un fenómeno de feria. pero eran algunos tan raros y en grupo parecían muy ruidosos, uno hasta había invitado a todo el establecimiento. No eran gente con la que pasar desapercibidos. ojala el pato pudiera decir que a su lado pasaría desapercibido, pero con quien había quedado no era cualquier cosa. Destacaría incluso mas que aquel grupo.
Y efectivamente su conversación fue interrumpida, cuando alguien entro en el local, y muchos de los presentes callaron, por que a diferencia de los que había en el local, unos completos don Nadie, el que había entrado era un tipo popular, aunque no exactamente en el buen sentido. Vestido con ropas elegantes en vez de unas mas callejeras cruzo la sala con su prominente hocico, mientras algunas personas abandonaban el local, temerosos, pero otros sonrieron y incluso alguno hizo un gesto de reverencia, por ejemplo el pato abandono su cojin y se inclino ante el, sus hombres se inclinaron también, por que era una muestra de respeto a un importante miembro de la mafia.
-Señor Chettony, No esperaba verlo en persona -esperaba un enviado o alguien similar- ¿en que puedo...
-¡Pato! es verdad que es un pato. Bien coleguilla, no necesitas estar tan estirado. -chasqueo los dedos a un camarero que algo intimidado asintió esperando tomar notas- hamburguesa doble con queso, sin verduras... como encuentre un pepinillo.
Chester Cheetony
Jefe de la mafia Chettony
el Mink cheeta